La Magnate Rusa

Da Syell6

2.5M 145K 31.4K

Duología: Amor entre los negocios. La Magnate Rusa es el segundo libro de esta duología, Para entender esta h... Altro

Prólogo
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
¡DINÁMICA!
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
EXTRA: Día del Padre
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35
Capítulo 36
Capítulo 37
Capítulo 38
Capítulo 39
Capítulo 40
Capítulo 41
Capítulo 42
Capítulo 43
Capítulo Extra. Giovanni Rizandi
Capítulo 44
Capítulo 45
Capítulo 46
Capítulo 47
Capítulo 48
Capítulo 49
Capítulo 50
Capítulo 51
Dedicatoria
Agradecimientos
Epílogo
¡Hola Magnaticos!
¡Aviso!
Mi Familia♥️
Dos al cielo, uno aquí.
¡Mis amadas lectoras!
Aniversario

Capítulo 8

39.9K 2.5K 574
Da Syell6

Pov's Cristián

Horas antes de la gran verdad.

Soledad... Muchas veces esa palabra viene a mi mente y aunque cuando era un niño le temía, ahora no, crecí sintiendo así que ahora creo que ya es parte de mi y me acostumbro fácilmente, si por qué aunque intenté luchar contra ella, nunca tuve victoria, por qué luche de varias maneras para que Saray me quisiera y no lo logré, no pude contra el sentimiento de soledad que sentía cada vez que me acordaba que mi madre no me quería y aunque siempre la nana estuvo conmigo es muy diferente, yo siempre la quise conmigo, pero nunca pude hacer que ella sintiera lo mismo que yo, cada vez me rechazaba ese sentimiento de soledad se hacía más grande, no tenía una madre y eso me hacía sentir solo, y de ahí mi odio y rencor hacia ella, pues cuando me fui a Italia veía como Beatriz Sorrento le daba amor y cariño a sus hijos, a Fiorella y Angelo, ella jugaba con sus hijos, los consentía y les decía lo mucho que los amaba y aunque ella intentó hacer esas tipos de cosas conmigo nunca la deje, pues ella no era mi madre y eso no me iba hacer sentir bien, claro que no, sería todo lo contrario por que sentía que lo hacía por lastima, cuando las cosas que sentía por Karina fueron más fuertes tenía mucho temor de decirle lo que sentía, por qué por noches tuve pesadillas de Saray repitiendo que yo fui un error en su vida, que no me quería y todas aquellas mierdas que hacía y me decía, pero lo hice, me abrí con Karina diciéndole todo lo que sentía por ella y le dije la amaba, pues pensé que eso era amor, pensé que ella haría las cosas diferentes a Saray, por qué yo ya le había contado por toda la mierda que pase a raíz de eso, y aunque en sus ojos veía la lastima, pensé que por eso ella me iba a amar, que todo sería reciproco, pero nada fue así, ella solo me uso, me usaba para conseguir sus drogas, pero yo nunca quise creer que ella no me amaba, hasta el día que murió, esa noche donde llegue para decirle nuevamente que la amaba, que la quería conmigo y salvarla, y ahí ella se burló de mi tal cual lo hizo Saray, me dijo que no me amaba, que ella no era para mi y que no creyera en el amor, pero yo igual insistí quise creer que lo que salía de su boca era por los efectos de la droga, pero no, era lo que ella realmente sentía, y hasta una bala recibí queriéndola salvar, pero fue inútil, después que ella murió y dejó un sentimiento de soledad más grande del que ya yo sentía decidí hacerle caso y creer que el amor no era para mi, empecé a ser un hijo de puta, jugaba con las mujeres a mi antojo, pues no me interesaba ninguna y yo no me iba a enamorar jamás.

¡Ja!.

Hasta que llegue a New York y la vi a ella, a Nathaly, cuando la vi mi corazón latió tan fuerte que me dio miedo, temor, irá, por qué yo no quería volver a sentir esas sensaciones que me sentía cada que veía a nathaly, y esa noche en casa de cristiano se veía tan sexy y bella, con ese hermoso vestido azul, ahí en ese momento mi corazón volvió a latir como no lo hacía hace mucho, y ahí quise irme y tirar todo a la mierda, la presidencia, los proyectos, la clínica, quería irme a Italia y jamás volver a pisar territorio americano solo para no estar cerca de aquella castaña, pero el sentimiento de posesión que surgió en mi no lo permitió, no dejó que me fuera, y desde ahí supe que ya estaba jodido, cuando la tuve por primera vez en mis manos, fue mágico sentirla completa, verla desnuda en mi cama fue la mejor vista, después en su apartamento el día de año nuevo como las luces de los fuegos artificiales se infiltraban en su habitación y ella cabalgando sobre mi, sus lindos ojos azules me hechizaron y no quise aceptar que era algo más que tensión sexual, pero solo me comporte como idiota, hasta que acepte que estaba enamorado, con ella me sentía tan lleno y pleno, que no volví a pensar en la soledad que me arropaba, pero cuando Carlos llegó y le hizo lo que le hizo me sentí tan impotente por no haber llegado a tiempo, por no haber llegado antes de que el la dañará como lo hizo y antes de que hiciera que perdiera a mi hijo, aún me siento culpable y estoy seguro que me sentiré así siempre, cuando me enteré de que mi hijo existió, pero que no sobrevivió, aquel sentimiento de soledad se alojó nuevamente en mi, por qué aunque la idea de una familia solo la idialice con Karina, me hacía mucha ilusión tener un hijo con Nathaly, a lo mejor por eso hice una tumba a la que visitó cada dos días para poderlo sentir de alguna manera y poderla sentir a ella, a la castaña que me abandonó tal cual nuestro Ángel a nosotros, pero quizás ella ahora es feliz, se habrá casado o con hijos, y yo estoy aquí, en un jet camino a Rusia odiandola como nunca pensé odiar a alguien, odiandola más de lo que odio a Saray y Karina, y sintiéndome solo, y la única que puede hacer que ese sentimiento desaparezca por momentos es susej.

-¿En que piensas?- pregunta estephany sentándose en mis piernas.

Yo la miró, pero no digo nada, ella se está creyendo que es más que un simple polvo y no le gustará cuando me aburra de ella.

-No preguntes eso rubia, ¿no le ves la cara? En quién más, en Nathaly Petrova- dice Giovanni.

-Maldito hijo de puta- le digo al italiano.

-Esa mujer no merece que pienses en ella- Dice mi nana.

-La nana tiene razón Cris- dice Estephany.

Voy hablar, pero alguien se me adelanta.

-Quitate de las piernas de mi tío, ¡Ahora!- le grita Susej a estephany, pero la rubia en mis piernas la ignora, yo le doy unos golpecitos a estephany para que se levante.

-¿Es enserio?- pregunta estephany.

-Parate ahora- le hablo con mi tono de voz neutral.

Ella de mala gana se levanta y yo le abro los brazos a la pequeña que me sonríe- Me gusta que me hagas caso tío, ella no tiene por qué estar aquí, es un tormento- dice Susej poniendo su mano en su pequeña frente y hechando la cabeza para atrás.

La nana se ríe.

-Tio, ¿A donde vamos?- pregunta Susej.

-A Rusia- le respondo.

Ella sonríe y aplaude-¿Veremos a mi tía nath?- mi cuerpo se tensa al escuchar lo que mi sobrina acaba de decir, Estephany ríe.

-No veremos a tu tía nath, ella vive en Venezuela y vamos a Rusia.

-No te metas en mis conversaciones con mi tío, bruja.

Le dice Susej lazandole un cojín a estephany y yo sonrío, estephany se pone roja.

-Te amo tanto- le dice Giovanni a Susej y la chocan.

Mi cuerpo aún está tenso, por lo que acaba de decir la niña- Amor, estás equivocada, tu tía no vive en Rusia- le digo con el ceño fruncido.

-Si, claro que sí, por qué mamá dice siempre, vamos a ir a Rusia a ver a tu tía y mi tía Brenda viene con nosotros.

-¿Que?- dice Giovanni igual de desconcertados que todos.

-¡Mamá!- Grita Susej, Penélope viene hasta donde estamos.

-Dime mi amor.

-Verdad que mi tía nath vive en Rusia- Penélope pierde el color, y trata de sonreí.

-¿Esto es lo que me ocultaban tú y Danilo?- le pregunto a Penélope.

-Si Cristián, Pero no quisimos decirte por qué tú dijiste que no quieres saber nada de ella.

-Y así es- le respondo frío.

-Ella vive en Moscú- dice Penélope.

Actualidad.

Cuando Saray dijo que cristiano estaba con ella, me dio tanta irá, pero no por celos, claro que no, si no más bien por qué cómo puede estar hablando con una persona que ni siquiera lo tomo en cuenta en el momento de irse, cuando vi Harry con un niño en brazos desvíe la mirada, nunca quise ver al niño, pues me imaginé eso varias veces, me la imaginé casada con hijos mientras yo no sé qué sentía, pero no es ese momento no creí que era odio.

Las palabras se repiten en mi mente cada nada, cuando grito que teníamos un hijo me sentí tan burlado, pensé que se estaba burlando de mi, cuando lo volvió a repetir pensé que estaba loca y por eso sonreí y le dije que nuestro hijo estaba muerto, pero después llegó a mi el niño que tenía Harry en sus manos, pero eso era imposible o eso creí yo.

Pero en el momento en el que vi aquel niño y nuestras miradas conectaron, fue verme a mí, mi corazón se saltó varios latidos y mi respiración se atasco en mis pulmones, pero no dejaba de verlo, aunque la respiración no llegaba a donde tenía que llegar, su pequeña carita es tan hermosa, sus ojitos verdes al igual que los míos me veían con brillo, y quise desmayarme cuando me dijo papá, el me había llamado papá, y aunque retrocedí trantando de asimilar lo que había escuchado y visto, mis ojos no dejaban de detallarlo, hasta que grite y vi como lleno de miedo se escondió en el cuello de su madre eso me hizo sentir tan mal, que decidí acercarme poco a poco, cuando el volvió a verme y me volvio a decir papá todo en mi se estremeció y no pude evitar alzar lo en mis brazos, cuando toque su pequeño cuerpo y lo abracé en ese momento me volví a sentir vivo y pleno, el me abrazo, él sabía que yo era su padre y aunque yo no sabía de su existencia, solo con sentir esto que el me hizo sentir lo acepte y supe que si es mi hijo, ¡Tengo un hijo!.

En estos momentos no se qué decir sobre la mujer que se está montando en la limosina con mi hijo, antes no creía odiarla, no me creí capaz de odiar a la mujer que me hizo sentir y que correspondió a cada uno de mis sentimientos, pero el saber que me negó la oportunidad de conocer a mi hijo, de saber que el existía, de negarme la oportunidad de ser padre, no hace nada más que un sentimiento de odio, rencor, repugnancia hacia ella sean fuertes, ¿Cómo pudo ser capaz de eso? Le dije lo mal que me sentí cuando perdimos a nuestro primer hijo y aún así ella no se compadeció de mi, no fue más que una egoísta.

-Cristián- me detiene del brazo estephany cuando empiezo a caminar a dirección a la limosina que me espera, ahí donde está mi hijo.

-Sueltame- le digo.

Ella lo hace y retrocede.

-Ella te está engañando- dice Saray.

-¡Es mi hijo!- le gritó- Y me sabe a mierda lo que tú pienses, siempre ha sido así y no va a cambiar.

-No le hables así a nuestra madre Cristián, ¿Como sabes que es tu hijo?- habla Cristiana.

-Tu madre, ¿Acaso no lo viste? ¿Te parece poco el parecido? Hermanita.

Ella me ve mal.

-Anda y ve a ese campeón- dice Giovanni.

Volteo a ver a Danilo-¿Tu lo sabías verdad?- ¿Cómo mi hermano pudo ser capaz de esto?.

-No hermano, Te juro que no lo sabía.

-Lo hablaremos.

Yo empiezo a caminar hasta la limosina, donde el chófer tiene abierta la puerta trasera para mi.

-Mi hijo va conmigo- le digo a Nathaly.

Ella me ve sorprendida- Dijiste que te venías aquí.

-No tengo ganas de estar cerca de una mentirosa he egoísta como tú- le digo y ella baja la mirada- Dame a mi hijo, o... ¿piensas apartarlo de mi más tiempo?.

-mamá, papá- Le dice Nathaly a Ángel.

Ángel sonríe- papá- dice mi hijo viéndome, una sonrisa se plasma en mi rostro y mi cuerpo se estremece, aún no puedo creer que tengo un hijo, un ángel

Nathaly ve al niño sorprendida y luego me ve a mi, me da a Ángel y yo lo tomo.

Camino hasta la limosina la camioneta que espera por mí y empezamos a seguir la limosina que nos guiará a la mansión Petrova.

-Hola campeón- Le digo al niño en mis piernas.

-Tampeon- dice mi bebé entre balbuceos, las lágrimas bajas por mis mejillas y dejó que corran libremente, estoy feliz, y el motivo es mi hijo.

-Si, tu eres el campeón de papá- le digo mientras le doy besos por toda su cara.

-Papá- dice aplaudiendo.

-Te amo hijo, te amo- le digo y lo pegó a mi pecho.

-amo- dice mi bebé, y yo sonrío, decir que estoy feliz es poco, me siento dichoso, tengo un hijo, ¡Dios mio!.

-Haré lo que sea para que siempre estés conmigo, por ti si lucharé para que nadie te arrebate de mi lado- le digo cuando los recuerdo de su hermano vienen a mi.

Le quitó el pequeño saco a mi hijo, para solo dejarlo con sus pantalones y camisas blanca.

-¿Te gustan los carros?- le digo mientras le doy besos en la cara.

-Bum bum- dice mi ángel.

-Mandare a decorar una habitación en el departamento solo para ti, como muchos carros para que seas feliz, por qué para eso estaré siempre para hacerte feliz- le digo.

El sigue haciendo sonidos de carro, llegamos a una gran mansión, en la entrada está el apellido, Petrov.

Mi sangre hierve cuando recuerdo que siempre me engañó, nunca fue sincera conmigo, me dijo que su padre era vigilante o no se que mierdas, y resuelta que ahora ella es la dueña de una Automotriz.

Me bajo de la camioneta con mi hijo en brazos, ella se baja de la limosina.

-Vamos- me dice y empieza a caminar, yo la sigo y llegamos a un despacho, ángel empieza a llorar.

-Dame lo, Le daré de comer- me dice Nathaly extendiendo sus brazos hacia mi.

-¿Se pega a tu pecho?- le pregunto.

-Aveces, pero horita le daré su alimento.

-Yo quiero hacerlo, Yo quiero alimentar a mi hijo.

Ella se me queda viendo y la tensión se puede cortar con una hija de papel, ella termina asintiendo y sale del lugar.

-Ya no llores hijo, Ya te daré de comer.

Ángel se calma un poco, mientras yo lo pegó a mi pecho, minutos después Nathaly entra al despacho con dos biberones en mano.

-¿Los dos?- le pregunto.

-Si, unos es malteada de café y el otro es leche.

Yo quedo sorprendido por lo que dice, ella al parecer nota mi asombro- Si, hasta en eso se parece a ti.

-Fui yo quien cargo con los síntomas del embarazo, es lo más justo- le digo agarrando los dos biberones.

-¿Cómo?- pregunta Nathaly.

La ignoro, ella se sienta en la silla tras el escritorio mientras yo le doy los biberones a mi hijo, cuando termina con los dos biberones me levanto y empiezo a darle leve golpes en su espalda, siento la mirada de Nathaly en mi, pero ella ya no me importa, así que no le prestó atención.

-¿Cuál es su habitación?- le pregunto cuando ya se durmió.

-Sigueme- ella empieza a caminar fuera del despacho, cruzamos la sala de estar y subimos unas escaleras, entramos a una habitación.

-El duerme conmigo, acuesta lo en la cama y colocale almohadas al rededor.

Yo lo acuesto, y le doy un beso en la frente- Papá ya vuelve.

Volteo ver a nathaly-Bien, ahora tu y yo vamos hablar.

Ella me ve, pero no dice nada más, volvemos a bajar al despacho.

-Explicame todo ahora- le digo.

Ella respira profundo- Cuando me fui de New York, no sabía que estaba embarazada, me di cuenta unas semanas después de que llegue aquí, pues, me sentía muy mal y quise caer de nuevo en la nicotina, pero repugné su olor y el olor de otras cosas, mi madre decía que algo no estaba bien, cuando me hice los exámenes el doctor me dijo que estaba embarazada.

-¿Por qué no me lo dijiste?- le pregunto con voz dura.

-Cristián, Yo me Sentía mal, además era un embarazo de alto riesgo.

-¿Cómo así?.

-El doctor dijo que como me embarace muy pronto, después de- ella calla y se limpia una lágrima- después de la perdida de nuestro primer hijo, el doctor me dijo que sólo necesitaba reposo y estar tranquila, por eso decidí no decirte nada, por qué el verte no iba a estar tranquila después de lo que me hiciste.

-Yo no te hice nada, Y aún así no veo nada que justifique lo que hiciste, me negaste la oportunidad de estar con mi hijo, de verlo nacer, de cuidarlo en sus primeros días de vida, eres una egoísta.

-¡Si lo hiciste, Me fuiste infiel!- grita nathaly.

De mi sale una risa irónica- Jamás te fui infiel.

-Claro que si, no me mientas, vi tu foto con Meredith en el restaurante y después vi su ropa en tu clóset.

-Esa ropa no era de Meredith, era de Karina.

-¿Cómo?- pregunta sorprendida.

-Si, era el único recuerdo de ella, y con Meredith me acosté par de veces, si, pero en mi adolescencia.

-Estabas comiendo con ella, Te escuché hablando con María de ella, Maldita sea, y te pregunté de quien hablabas y me mentiste.

-¡Por qué lo que estaba planeando era una puta propuesta de matrimonio! ¡Te quería como mi esposa!.

Le gritó y ella retrocede-¿Que?.

-Si, solo era eso, pero ya no importa.

-Tu hicis...

-Si, yo hice, hice mucho por ti, te amé, te cuide, te respete, hasta me convertí en un asesino por ti, eso fue lo que hice, cuidarte, pero ¿tu cómo me pagaste? Abandonando me y además escondiendo me a mi hijo.

-Ya te dije por qué lo hice.

-¡No tiene razón que valga! ¡Lo hiciste por qué eres una egoísta!.

-¡Era mi manera de curar y después quise decirte lo pero tú estabas con Estephany!.

-¡¿Que era tu manera de curar?! Y... ¡¿ No pensaste en cómo me curaría yo?! ¡También era mi hijo el que murió! ¡Me sentí tan culpable que mandé hacer una tumba sin nada adentro solo por querer sentirlo cerca, mientras si tenía un hijo, un hijo vivo pero que su madre decidió apartarlo de mí!.

-¿Tu hiciste eso?.

-Ya no importa, solo pensate en que ángel sería tu cura, sería el complemento perfecto para llenar el vacío, y no pensaste en que yo también lo necesitaba a mi hijo.

-Perdoname.

-No, no te perdono, por qué nada de lo que hiciste tiene justificación, nada.

-Me sentía mal como mujer.

-Por que quisiste, por qué no quisiste escucharme, solo decidiste irte, así como decidiste no decirme que era papá de un hermoso niño, Y te diré algo, no me separare de el, esta vez no me lo arrebataras.

Ella va a responder, pero alguien toca la puerta.

-Adelante- dice Nathaly.

Yo no volteo a ver quien sea que está en la puerta- Sra. El niño se ha despertado y está llorando.

Yo salgo rápido del despacho y subo a la habitación de mi hijo, mi bebé está sentado en la cama llorando y pasándose sus manos por sus ojitos.

-hola campeón- le digo cuando lo alzo.

-Papá.

Esto es lo que necesito para ser feliz, a mi hijo.

-Si bebé, soy tu papá, tu papá que te ama.

-amo- dice metiendo su cabecita en mi cuello, yo empiezo a caminar por la habitación hasta que se vuelve a quedar dormido, lo vuelvo a poner en la cama.

-Papá, volverá por ti mañana temprano-le digo mientras le pasó la mano por su cabecita.

-Cristián- habla Nathaly.

-¿Cómo sabía que yo era su papá?.

-por que siempre le mostré fotos tuyas, y el cuando lloraba con lo único que se calmaba era con tu foto, siempre quise que dijera papá, pero nunca lo hizo, hasta esta noche cuando te vio.

Yo no digo nada y ella se me queda viendo.

-¿Pretendes que te agradezca? Por qué yo creo que es lo más sensato que pudiste haber hecho- le digo mientras me levanto de la cama.

-¿Me odias?- me pregunta.

Yo camino lentamente hasta ella y la agarro por el nacimiento de su cabello, subo su cara para que quede a metros de la mia, ella me ve fijamente- Antes no lo hacía, pero ahora tu me enseñaste a odiarte.

La suelto y camino hasta la puerta- Mañana estoy a primera hora aquí, Ángel se irá conmigo a New York.

Nota de autora.

¡Hola magnaticos!.

Ahhh, estoy muy emocionada por todo lo que pasó, Jajajaj.

Los leo pues👀.

Este capítulo va dedicado a MonicaLoor2  por el gran apoyo.

Hay un grupo de WhatsApp donde hablamos y opinamos sobre el libro, avances doy spoilers, opinamos sobre todo lo que pasa y nos conocemos, Sin quieren ser parte de el grupo escríbanme al privado para pasarles el link, o en el perfil de AraGarcia205 está en link.

No olviden votar, comentar y seguirme.

¡Besos cargados de dinero!

Continua a leggere

Ti piacerà anche

362K 18.9K 40
- Incluso antes de que se lo dijeran, ambos ya se amaban-. No acepto: -Copia -Plagio -Adaptación (Sin permiso) Obra registrada Esta historia es 100%...
13.8K 914 81
La nueva generación de los Rivers llega para darle nuevas situaciones a la familia, cada uno de personalidad totalmente diferente, intereses opuestos...
319K 20.3K 28
Chiara y Violeta son compañeras de piso, y no se llevan bien. Discuten a menudo, y cuando no lo hacen, se ignoran. Cuando se adelanta la boda de su h...
11.2M 791K 41
Kate, quien ha estado enamorada de Ethan desde que era pequeña, por azares del destino se ve obligada a escoger entre superar su enamoramiento y cont...