La Magnate Rusa

Capítulo 49

KrntPlm. Esté Capítulo va dedicado con mucho cariño y agradecimiento para tí.

¡Gracias por el apoyo brindado!.

Todos volteamos a ver a la mujer frente a nosotros. No sé quién es, pero ve a Cristián con una gran sonrisa que me irrita.

Es hermosa. Un vestido ceñido al cuerpo de color rojo, su melena castaña hasta los hombros, maquillaje un poco sobrecargado, pero que le va muy bien.

Veo a Cristián que ladea su cabeza viendo a la mujer frente a él. Recorre el cuerpo de la mujer, me poso a su lado agarrando su mano.

-¿Dalila?- pregunta Cristián después de unos segundos.

¿Dalila? Vuelvo a verla. Está muy cambiada, su cabello ahora es castaño. Su cuerpo tiene más caderas que cuando la vi por última vez, pero sigue viéndose hermosa.

Ciertamente antes decía que era una perra operada, pero no era que la juzgaba por eso. Alguna vez en mi adolescencia pensé en hacerme unos que otros retoques estéticos, pero después olvidé eso cuando mi cuerpo empezó a cambiar.

-Pensé que no me reconoceriás- habla con una sonrisa- Tan candente como siempre. ¿Como estás? ¿Cómo va tu vida?.

-Realmente me costó un poco hacerlo. Bien. Mi vida de maravilla, un hijo, una hermosa mujer, y dos bebés en camino. Todo perfecto- habla Cristián subiendo mi mano dejando un beso en el dorso de está.

Entonces ahí la modelo deja de ver a Cristián, para observarme a mí. Su mirada me recorre completa.

-¡No puede ser!- exclama- ¿Nathaly? ¿Eres tú?.

No, mi doble.

Solo asiento sin decir nada. Ve a Ángel, nuestras manos y, después mi panza.

-Si sentía una fuerte tensión entre ustedes en aquella cena, en el Jet, en Italia, pero jamás pensé que sería tan fuerte.

-Asi es el amor, supongo- habla Cristián.

-¿Estás hablando de amor? ¿Cristián Black, enamorado?

-Dalila...- mi mano duele cuando Cristián aprieta está al escuchar la voz de Leonardo.

-¿Será esta una costumbre?- pregunta el italiano hacia mí- Lo digo porqué siempre nos encontramos en estas circunstancias, quizás es el destino que quiere que cenes conmigo...- dice con una sonrisa.

-Primo, que es una mujer comprometida- habla Dalila.

¿Primo?.

-Veo que no te fue suficiente en perder la sociedad que llevo a tu empresa a la miseria- habla Cristián tranquilo- ¿Que más quieres perder? ¿La villa en Italia? ¿El concesionario en Alemania? Dime... Será órdenes para mí.

La sonrisa en el rostro del italiano desaparece y su cuerpo se tensa. El ambiente está tenso.

-Me la pagarás, Black- dice Leonardo.

Cristián suelta mi mano, pero pongo está en su abdomen. No permitiré que haga un show aquí y menos, con Ángel presente. La nana se acerca y agarra a nuestro hijo.

Cristián sonríe, esa sonrisa maliciosa que hace que mi cuerpo se tense.

-¿Me estás amenazando?. ¿Quieres que te recuerde gracias a quién estás aquí? O... ¿Quieres que haga una llamada para que...

-Juegas sucio- interrumpe Leonardo a Cristián.

-Te lo advertí, te dije que no te acercaras a mi mujer y no te importo ahora tente a las consecuencias- le dice a Leonardo- Walther- saluda Cristián al hombre de edad avanzada que llega a dónde estamos.