Capítulo 51

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Atrapo mi labio inferior entre mis dientes. Mi corazón parece que se detuvo mientras todo lo que he vivido con Cristián pasa por delante de mis ojos. La noche de la cena, el siguiente día en la empresa, sus manos sobre mí, cuando dijo que tenía algo fácil entre sus manos, todo lo sucedido después de eso, el hecho de que me cuidará, que llorará conmigo, que me contará su pasado, sus temores, sus porque, el hecho de que me amara aún cuando estuve rota, el que me hiciera el amor...

Luego los tres años que pase sin él. Después de que nos viéramos en la gala, que hablara conmigo en su departamento aquí en Rusia, las cosas que hemos vivido hasta ahora, nuestros hijos...

No sé cuánto tiempo pasa desde que me quede observando a Cristián hincado sobre su rodilla.

Mi cuerpo tiembla, pero sigo dando pasos hasta llegar justo frente de él. Me inclino y atrapó su rostro entre mis manos y consumo su boca.

Sonríe sobre mis labios cuando extiendo mi mano y pone el anillo en mi dedo anular.

-No solo quiero tu apellido, quiero todo, todo de tí.

-Nena, ya todo yo soy tuyo. Estoy enamorado de tí.

Me alza entre sus brazos y me vuelve a besar. Los aplausos se vuelven cada vez mas fuertes.

-También tengo una sorpresa para tí- digo sobre sus labios.

Me deja sobre mis pies y arquea una ceja.

-¿Cuál?.

-Cierra los ojos...

Con una sonrisa lo hace. Sé lo importante que es para Cristián todo ésto del proyecto y sus ganancias, el invirtió mucho tiempo en ese motor. También sé que no quería venderlo, aunque eso hiciera que su empresa tuviera muchas más ganancias. Decidió venderlo cuando nos volvimos socios, así que aunque él se me adelantó yo también tengo una propuesta y un regalo para él.

Cristián es aficionado en los autos clásicos, pero más aficionado a sus creaciones.

Agarro a Thadeo en mis brazos y mi madre le da el sobre donde está el título de propiedad. Ángel agarra mi mano y camino con mis hijos hacia el frente de mí hombre.

-Abre los ojos- digo con una sonrisa.

Lo hace y sonríe.

-Thadeo tiene algo para tí- digo.

Se acerca y agarra nuestro pequeño bebé en sus brazos.

-¿Que tienes para papá, campeón?- le dice dándole un beso en la cabeza. Thadeo sube sus manos riendo y Cristián agarra el sobre.

Saca el papel y después de unos minutos leyendo niega con la cabeza.

-No aceptaré eso...

-Ángel- corto a Cristián viendo a mi hijo- ¿Tienes algo que mostrarle a papá?.

-¡Si!- da un salto con una sonrisa y camina hacia su padre y alza su mano para que Cristián la tomé.

Cristián lo hace viéndome confundido y cuando dan la vuelta empiezo a caminar tras de ellos.

Ángel guía a su padre hasta el Volkswagen y con ayuda de mi hermano abre la puerta. Mi hijo sube al auto y saca las llaves de esté. Cristián las toma viendo el anillo que está ahí.

-Aunque fuiste tú quien prometió cambiar el anillo por uno de compromiso, quería ser yo la que te propusiera matrimonio, aunque claro siempre vas a un paso adelante. Ya soy tu mujer y tengo cuatro hijos tuyos, pero... aún así ¿Te quieres casar conmigo?.

Cristián voltea y mis lágrimas vuelven a salir cuando veo una lágrima correr por su mejilla.

Se acerca con Thadeo en brazos. Me abraza de la cintura y se inclinan en mi oído- Solo si prometes que tu culo será mío cada vez que quiera- susurra solo para mí.

La Magnate RusaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora