GROSERO ©

By CitizenOfHeavenn

1M 53.2K 7.5K

Esto no es una historia normal. No hay tristeza, felicidad, risas, llantos como tal. Aquí hay más que esto... More

GROSERO
Prólogo
Capitulo 1
Capítulo 2
Capitulo 3
Capítulo 4
Capitulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capitulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 33
Epílogo

Capítulo 26

23.9K 1.2K 142
By CitizenOfHeavenn

-Mañana tengo que ir a la oficina.

Vi su cara de decepción y no pude evitar sentirme bien por ello.

-De acuerdo-dijo, después de pensárselo un buen rato.

Le di un beso corto y luego la abracé hacia mí para sumergirnos en un profundo sueño.

Era la primera vez que dormíamos juntos.

Y espero que no sea la última, porque si era así, haría todo lo posible para evitarlo.

***

Si digo que dormí bien, estaría mintiendo porque la verdad es que dormí excelente a su lado.

Me levanté con cuidado de no despertarla, se veía tierna con sus ojos cerrados y su estupidez ocultada a causa de su profundo sueño. Cualquiera que la viera, no creería que fuese así de torpe.

Aunque así se veía hermosa; con su cabello todo desordenado y abrazando su almohada, mientras que tenía una pierna semi-doblada y una estirada.

Vamos, campeón, deja de mirarla y alístate.

Seguí mi camino hacia el baño, y me di una ducha considerable para poder pensar sobre todo aquello que me estaba ocurriendo.

Estaba preocupado por mis hermanos, por mi vida, por ser el sin suerte de la familia, y por el daño que he hecho y que haré. No puedo evitar sentirme frustrado.

Salí del baño con una toalla que sólo cubría de la cadera para abajo, mientras que abría el clóset para buscar mi traje.

Sonreí al recordar que la noche anterior la encontré a ella escondida. Tenaz.

Estaba arreglándome la corbata cuando veo un movimiento que proviene de la cama; ella allí, tallandose los ojos para poder ver mejor y medio bostezando.

-¿Ya te vas?-Preguntó cuando ya estaba medio despierta.

-Sí. Sólo voy a esperar un par de minutos más-dije, volteándome para verla mejor ya que anteriormente la veía a través del espejo.

-¿Por qué?-preguntó, mirándome fijamente.

-Chase vendrá a acompañarte mientras que voy a la oficina.

-¿Chase viene para acá?-Su cara mostraba sorpresa y alegría a la vez, no pude evitar que se tensaran mis músculos.

-Sí.-Me giré para verme en el espejo de nuevo y la vi a ella levantarse para ir al baño.

Yo me senté en la cama para enviarle un mensaje a Chase; necesitaba saber si ya venía en camino.

Me puse de pie cuando la vi a ella saliendo del baño con una toalla en su cabello y sonriendo.

-Creí que ya te habías ido.

-¿Me estás corriendo?-Pregunté ofendido. Ella rió.

-Sólo decía.-Se encogió de hombros mirando hacia todos lados. Estaba nerviosa.

Y me encantaba.

-No me odies.-Hice un puchero mientras la tomaba de la cintura.

-¿Por qué?-Preguntó confundida.

-Porque viene Chase.-Me encogí de hombros tensandome.

-¿Qué tiene que ver Chase en esto?-Seguía con su rostro lleno de confusión.

Se veía graciosa debido a que tenía la toalla aún en la cabeza, sin embargo ya estaba vestida.

-Bueno, empezando porque te gusta y siempre me terminas odiando cuando estás con él.

-Bueno, empezando porque no me gusta y eres tú el que me odias cuando estoy con él.

Realmente me sentía de ese modo; cada vez que llegaba Chase y estaba con ella, ella se veía más feliz y yo era el villano del cuento.

Y si ella al menos conociera un poquito de mi vida, no pensaría eso de mí. Pero no tengo que darles explicaciones a nadie porque yo ya estaba condenado de por vida.

-Eso no es cierto.

-Sí lo es.-Sonrió.

-¿Quién eres ahora?-Le sonreí de vuelta, cambiando de tema.

-Oh, por dios.-Se tapó el rostro con las dos manos-. No me digas.

Yo la apreté más hacia mí.

-No sé nada.-Me encogí de hombros-. Sólo sé que de día eres Chloe y de noche Megan.

-Idiota.-Me golpeó el brazo en tono juguetón. Yo reí.

-Cuando regrese-la miré fijamente-, si no me sigues odiando, vamos a comprar tu TV.

-No es necesario. ¿Cuando regresamos?

-Sí lo es. No te preocupes, en dos días estamos de vuelta.

Ella asintió y nos quedamos un buen rato en silencio, mirándonos a los ojos fijamente.

Sentía una extraña electricidad cada vez que me ocurría algo con respecto a ella. Era extraño.

-Vamos a peinarte-le dije, apartando esos desagradables pensamientos de mi cabeza.

-¿Qué?

-Ven.-La tomé de la mano y la senté en la butaca frente al espejo.

-¿Tienes alguna crema o algo para desenredarlo?-pregunté.

Debo confesar que aprendí a peinar gracias a mi hermana mayor Kiara; cuando era pequeño me obligaba a que la peinase debido a que mi madre siempre le regañaba por andar como loca. Pero como ella no le gustaba, me obligaba a mí a hacerlo, de lo contrario, me acosaba con mi madre de que me comía los dulces a escondidas.

Ya después de un tiempo, se volvió un hábito hasta tal punto que me gustaba peinar. Tanto, que después era yo el que amenazaba a Kiara para que se dejara peinar, o sino la acusaba con mamá que se escapaba por la ventana para irse a ver con el que en ese tiempo, era su novio.

Pero eso no me hacia diferente en nada, simplemente me gustaba peinar y ya. Y estoy seguro que cualquier chica estuviese feliz que su chico supiera peinar así de bien.

-Sí.-Me pasó la crema y yo me unté un poco en la palma de mi mano, luego la regué en mi otra mano y la aplique en las puntas de su cabello.

Luego tomé el peine y comencé a cepillar su cabello.

-Esto. Es. Vida.-dijo, cerrando los ojos.

Le di un par de cepilladas más y acabé.

-Listo.

-¿Qué?-preguntó incrédula-¿Tan rápido?

La ayudé a que se levantara de la butaca y la volví a tomar de la cintura.

-Lo siento-solté.

-¿Por qué te disculpas?-preguntó-. Si es porque me peinaste muy rápido, no te preocupes. Habrán miles de veces en las que podrás peinarme. Al fin y al cabo yo ni me peino.

Reí sin ganas. Era increíble que se le ocurrieran esas tonterías tan rápido como flash.

-Siento haberte golpeado.-La miré fijamente y tomé su rostro con mis manos-. Yo no soy así. No sé que me pasó.

-No te preocupes. Ya todo está olvida-le interrumpí-. Es que ese es el problema; nada está olvidado para mí. No puedo dejar de pensar que desconfíes de mí y que en cualquier momento te voy a volver a tocar de esa manera.

Ella soltó un suspiro.

-No es fácil, pero creo que puedo intentarlo-confesó-. Pero si me vuelves a poner un dedo encima, yo...

Y ahora no sé que cara iba a tener con esto.

-¿Qué?-entró en la habitación con su rostro asombrado-. ¿Te atreviste, Kyle?

Había estado eternamente agradecido con ella por no haberle contado nada a Chase. Pero entre cielo y tierra no hay nada oculto, y tarde o temprano tenía que enterarse.

-Chase...-él la interrumpió-. ¿Cómo pudiste ser tan masoquista, Chloe? ¿Cómo pudiste si quiera ocultarmelo?

-Cálmate, hermano...-¡No! ¡Me calmo una mierda! ¡Eres un hijo de puta! ¡¿En qué mierda estabas pensando?!

Me puse delante de Chloe.

-¿Y es que te gusta tanto como para que te afecte de esa manera?-pregunté con enojo.

-Eres un severo idiota que no te das cuenta de nada-dijo entre dientes.

-Responde-le ignoré.

-Pues sí. Como te parece que me muero por ella tanto que me afecta.

La miré de reojo y ella pareció estar sorprendida.

-Entonces, ¿por qué carajos no te casaste tú con ella?

-Mis amores, les recuerdo que estoy aquí presente.

-Dicen por ahí que lo prohibido es mejor-dijo con aire satisfactorio.

-Por favor, no empiecen de nuevo.

-Así, ¿es que ahora te crees mucho hombre? La verdad, es que no te entiendo. Te gusta pero haces casarme con ella.

-Y esa ella soy yo...-dijo con aire distraido.

-Bueno, supongo que tengo de hombre lo que tú no tienes-me retó.

-Creo que el maricón aquí eres tú-le hablé de vuelta.

-Creo no deberían pelear, chicos.

-Creo que vales mierda-escupió.

-Paz, por favor.

-¡Cállate!-le dijimos los dos al unísono.

-¿Sabes? Puedo ser un maricón, y nunca me encargué de fingir acerca de ello. Pero tú-me señaló-, eres una verdadera nena que utiliza la violencia para hacerse hombre. Esa es la diferencia.

Y eso bastó para que mi puño estuviera en su cara.

Me sorprendí cuando él me lo devolvió, ganándome ventaja y diciéndome cosas como que no debía golpear a las mujeres ni a mi propia esposa.

-Golpeas como nena-dije, escupiendo sangre en su cara.

Sé que lo estaba provocando, pero porque me sorprendía que estuviera en ese estado. Él siempre había sido pacífico y no ocurría a la violencia, a diferencia de mí.

-Chase, para, por favor-dijo, ella nerviosa.

No quería golpearlo porque al fin y al cabo él tenía un argumento lógico para golpearme, lo merecía, además, no quería lastimarlo.

Después de tantas suplicas que hizo Chloe, él finalmente me soltó. Yo estaba bastante golpeado; sentía mi nariz rota y mi labio demasiado ensangrentado.

-Estoy tan decepcionado de ti, Chloe Adams-él le miró luego de que ella me ayudó a levantarme-. Esto no te lo voy a perdonar nunca en mi vida.

Después de esto salió por la puerta de la habitación mientras se escuchaban los grandes pasos que se dirigían a la salida.

Ella comenzó a llorar y yo entraba en pánico. ¿Qué hacía en estos casos?

-Ahora es él el que me odia.-Yo la abracé fuertemente.

-Gracias por no haberle contado.

Ella se despegó un poco de mí, limpiándose las lágrimas.

-Tengo que ir a buscarlo.

Tan pronto como ella dijo eso, mi cuerpo se tensó indudablemente.

-¿Qué?-le pregunté incrédulo.

-Es mi amigo, Evans. Lo necesito.

No sé por qué, pero me incomodaba el hecho de que ella no me llamara por mi nombre. Como si le repudiase.

-Está enojado, Adams. Debes darle tiempo.

Si ella quería jugar de ese modo, yo también podía hacerlo.

-No me importa.

Esto no me ocurría muy seguido, siempre tenía el control de mí mismo, pero ella me hacia perder totalmente la cabeza.

-Está bien. Vete-dije entre dientes, soltándola bruscamente.

-¿Pasa algo?

-No. Me voy a la oficina.

Me dirigí hasta la puerta hasta que ella me detuvo.

-¿Volverás?

-No.-Me volteé para mirarla-. Pensándolo mejor, si te arreglas con él, que él te acompañe a comprar la TV.

-Pero a mi no me importa la jodida TV, ya te lo dije. Se suponía que iríamos juntos.

-Se suponía-repetí-. Ya no.

-¿Por qué? ¿Qué cambió?

-Exactamente. Nada cambió.

Después de haber dicho esto me dirigí hacia la puerta para irme de allí.

No sé dónde estaba Chase y no me preocupaba porque sabía que tarde o temprano estaríamos bien. Eso era lo que más me gustaba: a pesar de nuestras grandes diferencias, siempre estaban allí para mí y yo para ellos.

Sé que no se los decía todo el tiempo porque la mayor parte de ello me la pasaba trabajando, pero yo los quería. Más que a mi propia vida.

E iba a hacer todo lo posible por mantenerlos a ellos a salvo.

-Estás golpeado, Evans-la escuché decir mientras me seguía.

-No me voy a morir por ello, tranquila.

-Pero mírate, estás muy... ¡Qué mierda!

Volteé a ver que había pasado, y ella estaba en el suelo agarrándose el pie derecho.

-¿Te caíste?-pregunté preocupado.

-No, idiota; ibas tan rápido que tomé un descanso.-Me fulminó con la mirada.

No pude evitar sonreír.

-¿De qué te ríes, imbécil?-me regañó-. ¿Qué no ves que estoy a punto de perder mi pie?

-No seas exagerada.

-¿Exagerada? ¿Hablas de que soy exagerada?-me miró ofendida.

-Bueno, no hay otra clase de exageración.-Me encogí de hombros, mientras me agachaba para ayudarla.

-O sea, estoy a punto de que me amputen el pie y tú dices que soy exagerada.

Comencé a revisarle el pie y sólo tenía el tobillo inflamado. Podría ser un esguince.

-Diablos, ¿por qué eres tan torpe?-susurré, haciendo girar su pie suavemente.

-Guau, parezco hija de pie grande-dijo asombrada-. ¡Eso es genial!

No pude evitar reír. Tenía una imaginación sin límite.

-Bueno, hija del señor pie grande, hay que vendarle eso antes de que pase a mayores.

-Buuuh-sonó exageradamente aburrida-, este anciano no sabe como divertirse.

-¿Me has llamado viejo?-Pregunté ofendido, pero entono dicertido.

-Oh, no, señor. Le llamé anciano, que no es lo mismo.

-Vamos, levántate.

La levanté en mis brazos con cuidado de no lastimarla.

-Caramba, ¿qué es lo que comes, niña?-Fingí que estaba muy pesada.

-Eres un idiota.-Escondió su cara en mi pecho.

-Sólo bromeaba. Pesas más de lo que dije.

-Dime cuando tenga que reírme.

Yo reí.

La dejé en la cama con cuidado, y tomé una almohada y la puse debajo de su pie.

-Llamaré a Chase para que venga a hablar contigo.-Le sonreí.

-Gracias.-Sonrió de vuelta.

-Nos vemos luego.

Giré sobre mis talones y me dispuse a salir por la puerta.

-Espera...-Me llamó. Yo me volví a acercarme a ella.

-¿Qué?-dije, sentándome en la cama.

Ella se levantó un poco, luego se acercó a mí y me besó.

Al principio me sorprendí, pero luego le seguí el beso haciéndolo más intenso.

-Es que tenías un poco de sangre aquí.-Señaló sus labios luego de termináramos el beso.

Yo reí por el hecho de que en realidad tenía sangre por todos lados. Chase no golpeaba tan mal.

-Bueno, gracias.-Sonreí.

-¿Sigue en pie lo de la TV?-preguntó.

-¿Chantaje emocional?-La miré divertido mientras ella se encogía de hombros-. ¿Te mueres por ir conmigo?

-Púdrete.

Reí dándole otro beso.

-Eres afortunada-le dije, levantándome-. Sigue en pie.

Cuando ya iba por la puerta, por tercera vez, sentí un almohadazo en mi espalda.

-Yo no fui.-Se encogió de hombros y yo negué con la cabeza, tirándosela de vuelta, pero sólo para ponerla en su lugar.

Finalmente salí de allí para hablar con Chase y luego dirigirme a la oficina. El hecho de que había alguien queriendo hacerme daño, me preocupaba como la joda.

-Chase, hablemos, por favor-dije, cuando lo encontré sentado en el jardín.

Sangre es la que vas a tener tú cuando llegue tu hora. Ven Megan, déjame limpiartela. Como te dijo: "Nada cambió" Todo sigue en pie.

¿Qué tallll? Sé los di largo porque sé que subí tarde. Pero les aseguro que yo iba a subir ayer! Sólo que tenía que editarlo y ya tenía sueño. 😪

Como les dije la vez pasada, voy a poner todas las cosas lindas que me han dicho en Twitter aquí en multimedia. Algunas veces no sé que imagen poner, y esta es la mejor forma de agradecerselos.

No las entiendo, está vez le pedí menos votos que la pasada, y tuvo más. Sólo espero que con esta sea así.

*Llora desconsoladamente😭😭* porque yo no voy a estar escribiendo para personas fantasmas, yo escribo para aquellas que existen y se hacen notar *se limpia los mocos* porque gracias a ellas es que subo cada día.

Y tampoco voy a consentir*llora más fuerte😭😭😭* que yo les exprese mi amor a final del capítulo, y sólo una corresponda mi amor*llora más😭😭😭😭😭* *la mamá le tira la chancla porque está haciendo un escándalo*

¿+85 votos +50 comentarios? 🙊🙊🌚🌚 Miren que les puse a Kyle. Y Chase no es ningún maricón, Chase es mío.

Síganme en twittah @JxleySpinosa allí soy kul. 😎😎 Twittenme si quieren aparecer en el próximo capítulo. 

Instagram: @SGxrlStories <--- estaré promocionando sus historias.

Se acercaaaa un maratón!

Las amo amándolas con amor de mi corazón. 💜

+85 votos y +50 comentarios. 🌚🌚🙌🙌🙌🙌

Bendiciones.

Besos a toda la pipol(people😂) que me lee!

Continue Reading

You'll Also Like

1.6M 113K 83
Becky tiene 23 años y una hija de 4 años que fue diagnosticada con leucemia, para salvar la vida de su hija ella decide vender su cuerpo en un club...
1.1K 404 25
Esta historia comienza en un mundo que para los humanos no existe ya que no creen en estas criaturas, un mundo donde todo es posible donde existe tod...
212K 10.5K 55
Ella se cree de mala suerte. Piensa que si alguien se le acerca lo va a destruir, lo va a matar. Se pregunta todos los días por qué le pasa lo que...
856K 38K 49
¿Como algo que era incorrecto, algo que estaba mal podía sentirse tan bien? sabíamos que era un error, pero no podíamos estar sin el otro, no podíamo...