‘No lo entiendes, ______. Aún que quisiera, nunca podría irme, ¿entiendes? Nunca.
- ¿Te encuentras bien? –me sobresalté al escuchar la voz de Ashley a mis espaldas haciendo que unas gotitas de café se derramasen sobre la madera de la mesa.
- Uhm, me has asustado –reí leve y asiento –Estoy bien, ¿Porqué lo preguntas? –ella se sienta a mi lado y me mira extendiendo su mano izquierda para mostrarme una pastilla.
- Tómatela, _______. –la miró confundida –Tranquila, es parte de tu recuperación, ayuda a que el cerebro se ponga en funcionamiento intentando recuperar esos ‘recuerdos’ –hace un gesto con los dedos y la miró insegura después de la explicación –Es totalmente sano, ______ -sonríe y la cojo aún sin estar decidida a tomármela, pero no hay nada más que quiera que retomar mi vida pasada y recordar todo lo que he vivido.
La tomo con el poco café que queda y sonrío. Veo que ella juega nerviosa con sus dedos, algo que, en estas semanas que llevo con ella, sé que significa que está incómoda o que algo no va bien.
- ¿Qué ocurre Ash? –la pregunta me daba más miedo que la respuesta, no quería que me dijese que la pastilla que acababa de tomarme tenía otro efecto inesperado, pero con la suerte que últimamente tengo, sé que no será así.
- Yo…estuve dándotelas a escondidas –abro los ojos de la impresión y echo mi cuerpo hacia atrás.
- ¿¡Qué?! –me levanto de la silla y siento las ganas…necesidad, de pegarla -¡¿Cómo…?!
- Las echaba en tu comida, ______ -susurra –Sé que estás enfadada, pero mírate, esa pastilla además de ayudarte a recordar te está cambiando el humor, parece que te estás acomodando a la vida real, ¡Dentro de muy poco podrás ser una persona normal y corriente! –la miro con furia en los ojos.
- ¡Siempre lo he sido, Ashley! ¡Pero nunca me creísteis! ¡Lo que yo veo es REAL, nada es producto de mi imaginación! –grito y subo las escaleras corriendo.
Pateé la puerta de mi habitación y después de entrar la cerré de un golpe y apoyé mi espalda en ella, dejándome caer.
Solté un bufido y escuché una risa. Apreté la mandíbula. No era un buen momento para esto.
- ¿Otra discursión, pequeña? –escuché su voz de nuevo y cerré los ojos fuertemente.
- Vete, todo es culpa tuya. Tú me quieres volver loca –otra vez el sonido de sus botas aplastar el suelo me hizo abrir los ojos y mirarlo. -¿¡Qué consigues a cambio!? –él se agachó a mi altura y se encogió de hombros mirándome a los ojos.
- ¿Crees que soy real? –tragué saliva sin saber que contestar. Opté por callarme. –Sólo contesta, no es tan difícil –insiste sin apartar su mirada de la mía.
- Dímelo tú, yo ya no sé que es real o que es imaginario. Todo me da igual. –contesté agachando la cabeza.
- No has respondido a mi pregunta, _______ -me levanta el rostro.
- Si fueras real, ¿por qué solo te veo yo? –lanzó esa pregunta como si fuera un dardo haciendo que él encare una ceja al verme.
- ¿Tan segura está de ello, de que sólo me ves tú? –entonces el dardo volvió con más fuerza.
- Entonces, existes –afirmo mirándole y él niega con la cabeza -¿Eres mi imaginación? –niega de nuevo.
- ¿Entonces, qué mierda eres? –la desesperación se podía notar por cómo las ganas de llorar cada vez eran más fuertes.
- Descúbrelo tu misma, ¿no? –aprieto la mandíbula cansada de todo.
- Sólo quieres hacerme la vida imposible, Liam –él se encoge de hombros y acaricia mi mejilla cerrando los ojos.
Me aparto algo asustada por su movimiento, pero su mano vuelve a recorrer mi cuerpo, hasta que se paró en mi nuca. Miré su rostro, era realmente hermoso, pero seguía siendo él. Se mojó los labios y me dí cuenta de que su vista estaba fija en los míos.
La mano que reposaba en mi nuca me fue acercando hacia el rostro de él. Sentía que mi corazón bombeaba cada vez más rápido. Pero no era porque deseaba que pasara, si no por el pánico que me daba lo que él quería, que realmente, no sabía lo que era.
Él se paró a escasos centímetros de que nuestros labios se juntaran.
- ¿Me tienes miedo? –susurró con una voz totalmente distinta a la que había escuchado de su boca.
Esta vez no sonaba agresiva, todo lo contrario. Era como si la hubiese escuchado mil veces, como si esa misma voz me causara mariposas en el vientre.
Mis ojos se abrieron y le miré directamente al pozo profundo de color café que me miraba.
Estaba tan cerca que pude apreciar cada lunar de su rostro. Su barba, sus labios rosados. Todo.
Hasta que apretó la mandíbula y la imagen que había creado de él segundos atrás se desvaneció.
- Sí –temblé al contestar a su pregunta, recuperando la respiración y el pulso acelerado.
Chascó la lengua y volvió a mirar a mis ojos.
Se acercó más a mí, pero esta vez no pude ver nada de su rostro, el miedo me ganaba, su voz ya no era la que me causaba mariposas, ¿Qué demonios me pasaba?
Capturó con sus labios mi labio inferior y lo besó agresivamente. A los cinco segundos se alejó de mí mordiendo el mismo labio que acababa de besar y dio un puñetazo en el espejo que hacía días que había puesto, haciendo que se rompiera y cada cristal se cayera en añicos al suelo. Me quedé petrificada al ver su puño, ensangrentado, pero mi cabeza seguía en su reacción.
- ¡Joder! –chilló y se sobó el rostro nervioso –Esto no debería de haber vuelto a pasar –susurró aún con las manos en su cara –Otra vez no… -se quitó las manos y me miró asesinamente.
Se levantó y desapareció entre los cristales.
No sé cómo lo hizo pero dejó mi mente en otro lugar. ¿Otra vez? ¿Qué significaba eso? ¿Por qué ahora?
¿Quién es?
- ¡__________! –la puerta se abrió de golpe dándome en la espalda -¡¿Estás bien?! –observó los cristales en el suelo y después se agachó para mirarme y revisar que no tuviera nada de sangre.
- Si… -susurré aún ida.
- ¿Qué ha pasado? –la miré a los ojos.
Ella también estaba viendo los cristales rotos. Ya tenía una respuesta más.
Liam era real.
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CHAN CHAAAN CHAAAAAAAAAAAAAAAN
NONONO NO ME MATÉIS!!
Sé que es un capítulo corto en comparación a los demás, y también sé que estuve como 6 días sin subir, ¡No me matéis!
Pero tengo razones jo!!!
El lunes tengo exñamen de Biología y agh, ni si quiera me lo he mirado.
Y si no dediqué más tiempo al capítulo fue por que volví tarde de ‘caritativa’ ¿Alguna sabéis que es o ha ido?
Para las que no lo sepan, en mi caso, es un grupo de gente que va a una residencia de ancianos para pasar el rato con ellos y entretenerles.
Es bonito por una parte, porque ves sus caras de alegrías y les regalas un momento de felicidad y entretenimiento, además es muy satisfactorio saber que ayudas a una persona con tan sólo escucharla, ¿no es fascinante?
Y por otro lado es bastante ‘duro’ ya que hay casos en los que no tienen familia, o sus hijos no los van a ver y pasan las 24h del día durante toda la semana, todos los días del mes, en el mismo lado haciendo…nada. Ni si quiera los dejan salir a la calle por miedo a que cojan un resfriado. Además hay ancianos que lo han pasado verdaderamente mal en la vida y aún que sea difícil escuchar sus historias sin derrumbarse te enseñan a que no hay que rendirse, es como un azote de humildad ¿entendéis?
Realmente se aprende mucho en estos sitios y aún que no lo parezca, aportas mucho para esas personas, pero más te aportan ellos como persona.
Bueno, después de mi discurso y tal pues podéis comentar sobre el tema y esas cosas, ¡me gusta leer y escuchar a la gente!
OS LANZO LAS PREGUUUUUUUUUUUUNTAS!!!
- ¿Qué será lo que pasa con Liam? ¿Porqué Ash puede ver los cristales rotos si Liam es una imaginación de _______?
- ¿A qué se refiere Liam con ‘otra vez’?
- ¿Porqué se pone tan nervioso?
Bueno, pues ahí están las preguntas e intentaré subir un capítulo más pero no os prometo nada, estoy muerta de cansancio!!
BESOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOTES Y ABRAZOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOTES LLENOS DE AMOOOOOOOOOOOOOOOOR
PD: Aprovecho para deciros que he sacado una nueva novela, esta vez de Louis, para quién quiera leerla, la estoy escribiendo para una amiga pero creo que la trama está 'divertida' pasaros y me contáis que tal!!
BESOS DE NUEEEEEEEVO!
Atte: Marta ✌