Press Start 🎮 Mail "Matt" Jeevas

🎮 XI: Seguimiento

Tn estaba en clase, con su cabeza recargada en una de sus manos, se encontraba aburrida. Su teléfono comenzó a vibrar en su bolso, llamando su atención; lo tomó y observó la pantalla.

«¡¿Mello?!», pensó con algo de sorpresa.

Se levantó rápidamente y salió del salón, en medio de la explicación del profesor; cerró la puerta tras de sí y contestó.

– Mello.

– Tn, ¿Dónde estás?

– Ahm. En clase, salí para atenderte. ¿Por qué?

– Matt no me contesta el teléfono, seguro se quedó dormido o está entretenido con algún juego –chasqueó la lengua.– Los necesito, a ambos.

– Al fin. De eso quería hablarte.

– ¿Ah?

– Tú te fuiste, nos dejaste atrás. Se supone que somos un equipo, debemos trabajar juntos.

– ...Lo sé –suspiró.– Ahora sí trabajaremos como equipo.

– ¿Ah, si? –levantó una ceja.

– Sí. Volveré a Los Ángeles, estoy siguiendo a los japoneses. Los quiero a ambos en el aeropuerto en seis horas.

– ...Entendido.

– Dile al imbécil de tu novio que lleve su auto.

– ¿Algo más?

– No. Nos vemos en unas horas.

La llamada finalizó. La japonesa suspiró y volvió dentro del salón, tomando asiento otra vez; guardó su teléfono en su bolso y tomó su bolígrafo, para escribir lo que el profesor había anotado en su ausencia.

[Más tarde]

Tn salió de la universidad, siendo interceptada por algunas de las chicas de su hermandad.

– Tn, pensábamos ir de compras, ¿Qué dices?

– Podemos ir a tomar algo luego –guiñó un ojo.

– Pero antes, almorzaremos juntas –sonrió.

– Ah...Lo siento, chicas. Tengo algo qué hacer.

– ¡¿Ahh?! ¡Pero no salimos hace mucho!

– ¡Es verdad, estás distraída o con tu novio!

– ¡No puedes cambiarnos así por un pene!

– Chicas, no es eso. Tiene...que ver con mi familia –bajó la mirada.– Lo siento, no puedo contarles nada –las miró.– Debo irme. Dejaré mis cosas y saldré.

– ...Está bien, supongo...

– Cuídate.

– Eso...

– Gracias, chicas –giró, caminando de espaldas para mirarlas bien.– ¡Las recompensaré por el tiempo perdido, lo prometo! –sonrió.

Tn giró y comenzó a correr hacia el edificio de su hermandad.

[Depto de Matt]

El timbre sonaba insistentemente y alguien llamaba a la puerta con furia. Matt roncó y giró, cayendo del sofá.

– Ugh. Mierda... –murmuró.

Se incorporó y miró a la puerta, mientras sobaba su cabeza.