Mystic: The little Avenger

Capítulo 72

Maratón 4/?

Ocho minutos. Ocho minutos en los que la pelinegra había dejado al equipo. Ocho minutos donde Gaia había perdido la batalla contra sus heridas. Los doctores habían hecho todo lo humanamente posible por regresarla a la vida y había dado resultado. La pelinegra se encontraba inconsciente en el área médica, mientras que los demás vengadores se hallaban con semblante serio fuera de la habitación de la ojiazul. Ninguno decía nada, todos sentían que le habían fallado al ayudarla, había sido demasiado tarde. Los vengadores esperaban noticias del estado de Gaia, pues lo último que habían sabido era por Stark, quien había presenciado la noticia de la muerte de la joven. Pronto una de las enfermeras salió de la habitación, junto al médico que atendía a la pelinegra.

-La señorita Gaia se encuentra estable-informó el hombre. Los vengadores suspiraron de alivio al escucharlo-pero se encuentra delicada, la pérdida de sangre ha sido demasiada. Se le han tratado sus heridas, pero su cuerpo necesita una transfusión de sangre de manera urgente-las palabras del doctor daban una pizca de esperanza a los vengadores.

-Yo puedo donarle sangre-mencionó Clint.

-Necesitaremos hacerle un estudio rápido para ver si es compatible con la joven-rápidamente una enfermera se llevó a Barton con ella para poder analizarlo.

Otra enfermera caminó hacia el doctor. Esta traía consigo una bolsa de recolección de sangre.

-Doctor, encontré esto en uno de los refrigeradores del laboratorio-dijo la mujer. El doctor la tomó y encontró que aquella sangre era de la pelinegra, por lo que ordenó que de inmediato comenzaran con la transfusión.

-En cuanto tengamos al agente Barton listo, podremos comenzar la transfusión- informó el hombre, volviendo a entrar a la habitación.

Los vengadores siguieron esperando a que la joven se encontrara fuera de peligro, pero cuando pensaron que todo mejoraba, la vida les mostraba que no debían confiarse. Dentro de la habitación se podía escuchar la urgencia en la voz de las enfermeras y el doctor. El corazón de la pelinegra había comenzado a fallar debido a la baja cantidad de sangre en su cuerpo. Los médicos intentaron a toda costa que la ojiazul se mantuviera con vida, pero era el mismo cuerpo de la joven el que no podía seguir.

El equipo quería entrar a ver qué sucedía, pero sabían que entrar ahí solo sería un problema y una distracción para quienes intentaban mantenerla en el mundo de los vivos. Aquella situación había causado demasiados sentimientos en los vengadores, sobre todo, en aquel que llevaba tiempo debatiendo si sus sentimientos hacia Gaia eran correctos. El capitán sentía que era su culpa, él debía de haber estado para protegerla, pero solo se dedicó a enojarse con ella. Steve sentía que aquello era una alerta del destino para que pusiera en orden sus sentimientos, pues si seguía por ese camino, lo más probable era que la perdiera, incluso para siempre. Pronto Barton regresó hacia donde estaban los demás.

-¿Qué pasó?-preguntó la agente Romanoff.

-No puedo donarle sangre-respondió el arquero con pesar-lo mejor es que todos se hagan el chequeo, no tenemos tiempo-los demás asintieron a las palabras de Barton, y juntos se dirigieron a que las enfermeras analizaran su sangre. Solo quedaron Clint y Banner en la espera de noticias sobre la pelinegra. El doctor Banner sabía que la radiación gamma que había en su sangre podía empeorar la situación de Gaia, por lo que se abstuvo a ir.

Después de unos minutos los demás regresaron, mas estaban en espera de resultados. Momentos más tarde, una enfermera entró a la habitación, donde aún trataban de mantener a Gaia viva. Pronto el doctor salió para hablar con los vengadores.

-¿Y bien?-preguntó Stark, con impaciencia.

-Todos han salido negativos en la prueba-informó el doctor. Los vengadores sintieron su alma caer, hasta que el doctos volvió a hablar-pero hay un plan b-