¿UN AMOR DE MENTIRA? FORTHBEAM

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— ¿Qué quieres decir con remodelación?— pregunto viendo a mi padre.

— Hay algunas cosas que quiero cambiar de la mansión y he decidido remodelarla por completo— dice antes de llevar comida a su boca.

— Creo que todo está bien tal como está— digo sin poder creer que mi padre quiera prácticamente rehacer la casa.

— Ya me he puesto en contacto con la mejor compañía de arquitectura del país — dice viéndome.

— ¿Estas consiente de que si hacer eso tendremos que salir de casa por lo que demore la dichosa remodelación?— pregunto viéndolo antes de mirar a Yo quien no dice nada.

— Yo iré con P'Pha, de igual forma papá tiene un viaje de negocios — dice por fin el menor.

— ¿Saben lo difícil que es conseguir un lugar en estos momentos?— pregunto pensando en si lograre conseguir un buen lugar, no puedo ir con Phana y Kit pues mantiene prácticamente con Ming así que tampoco es opción.

— Veré que con....— antes de que papá termine de hablar alguien entra al comedor.

— Con permiso, tiene una visita— miro hacia donde está la ama de llaves encontrándome con el abuelo.

— Abuelo— me pongo de pie de inmediato.

— Oh que sorpresa— dice mi padre igual saludando al mayor.

— ¿Sucede algo abuelo?— pregunto al hombre mayor, frunzo el ceño al ver que sostiene una bastón.

— Permítanme sentarme — dice el mayor, rápidamente le hacemos un espacio.

— Por favor prepara un té — digo al ama de llaves.

— Enseguida— dice antes de irse.

— No se ve bien— dice Yo haciendo que entre en pánico.

— Abuelo ¿Estas bien? ¿Qué sucede?— pregunto poniéndome de cuclillas a su lado.

— Ya... ya no aguanto a ese muchacho, va a lograr que muera — dice haciendo que frunza el ceño.

— ¿Qué sucede con el?— pregunto.

— Nunca está en casa, siempre se olvida de mí, y nunca puedo tomar mi medicina a tiempo— dice entre molesto y lamentándose.

— ¿Qué sucede con el personal de su casa?— pregunto.

— Solo estamos la encargada y yo, el resto solo va cuando se requiere— responde.

— Perdón por interrumpir, aquí está el té— tomo la taza de té y se la doy al abuelo quien me sonríe.

— Se ve algo pálido, déjeme medir su presión arterial— digo viendo a Yo quien asiente y va por mi maletín ¿Qué rayos le pasa a Forth? Siempre ha tenido a su abuelo como el centro de su mundo y ahora lo descuida de esta manera, quisiera golpearlo en la cabeza.

— Estoy bien— dice el abuelo.

— Creo que debería encontrar alguien con conocimiento y experiencia para que cuide de usted un poco mejor— miro a mi padre cuando dice eso, no sería una mala idea encontrar un buena enfermera, pero... hay enfermeras que parecen ser buenas y después descuidan.... No sería malo.

— Hagamos esto ¿Qué le parece si voy con usted a casa por un tiempo? Soy su médico y podre monitorearlo mejor, puedo organizar las cosas en el hospital y tener tiempo para cuidar del abuelo— porongo.