Capítulo 9

50 2 1
                                    

Cuatro días, por cuatro días estuvimos actuando como idiotas.

Fue nuestra primera "pelea" oficial como amigos y ahora me da muchísima risa por lo estúpidos que podíamos llegar a ser.

Fue gracioso porque seguíamos hablándonos pero de una manera cortante pero me tranquilizaba la idea de saber que los dos estábamos en la misma sintonía de «estoy enojado porque te enojaste pero tampoco quiero perder tu amistad por una estupidez. Ah, y hazte para allá porque no te quiero ver pero recuerda que te quiero mucho.» mientras Ezra nos miraba sin entender una mierda.

Como de costumbre subí al carro de Ezra, del lado del copiloto y cerré la puerta, y honestamente no lo hice con la intención de dar un fuerte portazo pero tú, tú malvado imbécil, casi a la par te habías subido en la parte de atrás y tu portazo fue aún más fuerte que el portazo que yo había dado. El carro no era mío, Ed.

Lo peor fue que nos quisimos disculpar al mismo tiempo.

-Per...

-Lo si...

-¿Qué les sucede a ustedes dos? —Ezra se rascó el cuello y encendió el motor. Podía sentir que nos volteaba a ver a ratos.

Y como ninguno le contestó decidiste poner la radio, así que te asomaste entre en medio de Ezra y yo para alcanzar el radiocasete y jurgarle los botones, mientras tanto, me tuve que aguantar la sensación de tu respiración en el cuello.

Estaba sonando More Than Words de Extreme.

-Ni me mires así, —le dije a Ezra porque su mirada decía algo como «Qué le hiciste...» - pregúntale a él.

-Te dije que no había sido nada —sonaste tranquilo pero no porque lo estuvieras sino porque no querías hablar de ello. Miré a Ezra con cara de «Ves, te lo estoy diciendo.»

-Mmmm... —y aún no muy convencido nuestro amigo recargó su brazo en la ventanilla, adoptando su posición de pensativo -pero tú estás enojada y ni lo niegues porque tu...

Suspiré.

-No estoy enojada.

-¿A no? —espetaste irónicamente, asomándote de nuevo entre en medio de  los dos.

-No. Hasta donde entendí el que estaba enojado eras tú —saqué una revista que Ezra tenía por ahí. No quería seguir discutiendo contigo, Ed.

-Te fuiste.

-¡Porque creí que querías que me fuera! —cerré la revista de golpe. Me acomodé para tratar de verte de frente y a pesar de que intentaste interrumpirme no te dejé - Y cállate, que aunque no lo dijiste actuaste como si te hubieras arrepentido... —mi voz se fue apagando.

-¡No eras tú, tonta!

-Y cómo saberlo si nunca me lo dijiste.

Pero tú no querías que Ezra supiera el porqué estabamos molestos, ¿tampoco estabas siendo sincero con él, Ed?

-Ya olvídalo —te quejaste para luego dejarte caer en el asiento trasero de nuevo.

-Vuélveme a decir que lo olvide —y sin pensarlo enrollé la revista.

-Ed, si vuelves a decir "olvídalo" y tú, Morin, si si sigues enrollando mi revista, los encierro en la cajuela. Me vale un queso. —dijo Ezra tan tranquilo y me quitó la revista.

Lo miré y me dio unas palmaditas en la pierna.

-Es que es de este mes —me guiñó un ojo.

-Lo que sea, olvídenlo —murmuré. Me di cuenta que realmente no tenía sentido hablar de algo que no quería ser hablado.

No me lo confieses [Ed Sheeran]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora