Capitulo 38

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La cena resultó tranquila, no silenciosa como se acostumbraba en Gusu Lan pues en parte la celebración era tomada como una oportunidad diplomática que rara vez se daba, pero si lo suficientemente calmada como para generar paz entre los comensales. Algunos de los discípulos ya estaban enterados del asesinato gracias a sus respectivos líderes y aunque aparentaban calma en realidad se encontraban alerta a cualquier movimiento sospechoso por parte de cualquiera, Wen Rouhan se divertía viendo las reacciones de algunos discípulos jóvenes, inexpertos o simplemente temerosos, incluso noto como un discípulo joven y de una secta pequeña se quedaba viendo a Madame Yu (quien se encontraba al otro lado del comedor con el resto de las mujeres) cuando esta ponía expresiones especialmente rudas o amenazantes, casi se le escapa una carcajada al verlo tensarse cuando la mujer tomo un cuchillo para cortar sus vegetales.
Jin Guangshan mantenía sus labios ocultos con el abanico, parecía esconder su forma de comer cuando en realidad reía en silencio por las reacciones del discípulo. Fengmian en cambio comía tranquilamente ayudando de vez en cuando a Wen Xu a cortar los vegetales o prometiéndole algún premio a cambio de que se terminara su amarga sopa, el hombre realmente no hacia caso a lo que sucedía a su alrededor por estar al pendiente del niño y de su hija quien se encontraba sentada en la mesa de mujeres. Si alguien los miraba parecían totalmente relajados y para nada sospechosos. Conforme avanzaba el tiempo las personas se retiraban del comedor para respetar el toque de queda, Yanli se acerco a su padre antes de que su madre la llevara al pabellón femenino y tomo su mano fuertemente.
Cuando quedaban solo unas pocas personas dentro del comedor algunos miembros del concejo de la secta Wen se acercaron a Rouhan quien instintivamente poso sus brazos sobre su vientre de forma protectora, mientras Jin Guangshan y Jiang Fengmian ponían expresiones serias pero ligeramente amenazantes sin apartarse demasiado y colocando discretamente a Wen Xu detrás de ellos.

-Líder Wen- saluda uno de los ancianos con un tono notoriamente forzado y una reverencia sin ganas.

-¿Qué sucede?- pregunta Rouhan en un tono firme.

-Esta mañana se nos informó lo sucedido con Wen Kong- explica el anciano -Nos pareció curioso que usted no nos informara nada-.

-Ayer por la noche Qingheng-Jun pidió que guardáramos el secreto para evitar el pánico- dice Rouhan retando al anciano con la mirada.

-Mmmm... bien, solo esperamos que la próxima vez nos informe de las cosas relacionadas a la secta- dice el anciano poniendo una mueca de inconformidad -Y más si se trata de uno de nuestros compañeros- menciona antes de hacer una última reverencia y salir del comedor seguido de otros tres ancianos.

-Hipócrita- masculló Rouhan molesto por lo obvio que resultó el anciano al ni siquiera intentar seriamente ocultar su descontento -Y ni siquiera es un buen actor-.

-Ignóralos A-Rou- dice Guangshan a sus espaldas -No les des más alas o jamás te los quitarás de encima, créeme-.

-¿Te encuentras bien A-Xu?- pregunta Fengmian al notar como la mano del pequeño tiembla ligeramente.

-Ese señor le da miedo a A-Xu- murmura el niño -Grita mucho-.

-No te preocupes A-Xu- dice Rouhan -No volverá a molestarte- le asegura a su hijo y de forma indirecta le indica a los otros dos adultos quien es el siguiente objetivo.

Los tres adultos se dirigen a sus aposentos para cambiar y acostar a sus hijos o en el caso de Jin Guangshan asegurarse de que este siga dormido como lo dejó antes de partir a la cena.
No tardan demasiado en limpiar, cambiar y acostar a Yanli, pero con Wen Xu tardan un poco más pues el niño se encuentra muy inquieto desde el encuentro con el anciano, no se calma hasta después de casi media hora en la que Rouhan tarareo dulcemente una vieja canción de cuna que sabía gracias a la Wen Qing de su vida anterior pertenecía a la secta Wen <Gracias A-Qing> pensó aliviado de saber al menos algo del clan Wen.
Una vez los niños se encuentran dormidos ellos mismos se dirigen a la habitación de Rouhan y se preparan para descansar.

























Cerca de media noche, cuando las patrullas de vigilancia eran bajas pues la mayoría de los discípulos de Gusu Lan yase habían retirado a descansar, una sombra se abrió paso rápida y sigilosamente por los amplios pasillos del pabellón de invitados.
Sabiendo de antemano que sección pertenecía a la secta de Quishan Wen no tuvo ningún problema en llegar, sobre todo con la información que tenía de los patrones de vigilancia de los pocos discípulos que aún quedaban despiertos.
Una vez llego a la sección de los Wen busco entre las habitaciones la que en palabras de su "informante" se encontraría marcada con un pequeño raspón en la puerta, al encontrarla casi  al fondo del pasillo la abrió lentamente para entrar y acercarse silenciosamente a la cama, usando el método acordado sacó un cuchillo común de sus mangas y apuñalo directamente el corazón del anciano hombre que dormía en la habitación, ni siquiera abrió los ojos o dejo salir un lamento siendo una muerte rápida y probablemente indolora (para disgusto de la sombra quien consideraba había sido injusto no darle ni un pequeño castigo antes de morir al hombre).
Limpio el arma sin orden alguno en las sabanas que empezaban a mancharse de rojo y nuevamente lo guardo entre sus ropas, dejo una pequeña nota escrita con premeditación y se apresuro a salir tan discretamente como entró y cerró la puerta lentamente para no hacer ningún ruido, regreso sobre sus pasos aprovechándose de las sombras que la noche producía para pasar desapercibido a los vigilantes, que si bien tenían un buen entrenamiento la sombra los superaba bastante.
Apresuro el paso hasta un pequeño e insignificante bosquesillo de bambú que se encontraba cerca de su destino y dejo el arma del crimen justo en medio tal y como se acordó antes de continuar con su camino y perderse entre las diversas habitaciones de invitados para finalmente descansar como el resto de los visitantes.

Cambiando el destino del SolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora