Capitulo 6

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De forma cuidadosa el muñeco de papel se dejaba guiar por las ligeras corrientes de aire que había dentro del palacio de la ciudad sin noche, intentaba hallar la sala del consejo para averiguar algo o mínimamente localizar a uno de los ancianos, pero de tanto dar vueltas se sentía cada vez más y más perdido. Los amplios pasillos lucían prácticamente iguales, lo único que había aprendido a identificar eran los cambios de pabellón, pues las puertas o arcos que sirven de entrada para cada uno son adornadas con piedras preciosas específicas si forman parte de las áreas habitadas por los miembros importantes de la secta, en cambio las áreas comunes son simplemente señaladas por piezas de cristal rojo y blanco en la parte alta de las entradas y las áreas pertenecientes a la servidumbre simplemente cuentan con piedras de río y podrían encontrarse en mejor estado. Ahora mismo Rouhan no sabría decir si la servidumbre lo odia porque son fieles al concejo o estos son los inicios de el descontento de ciertos grupos de la secta debido a las claras diferencias del palacio, lo que si puede definir es que el palacio fue diseñado y decorado para dejar en claro el poderío de Quishan Wen sobre el resto de las sectas.
Otro aspecto positivo es que ahora sabe donde se encuentran el comedor y las áreas comunes, así que no tendrá que preguntar dónde están cuando Wen Ling le permita salir de su habitación ahorrándose las seguras miradas de extrañeza.
Ya esta por rendirse y regresar su conciencia a su cuerpo cuando escucha unas voces en el pasillo de al lado así que decide acercarse con la esperanza de escuchar mejor lo que dicen.

-No se que esta planeando, mira que embarazarse por segunda vez sin estar casado- dice una de las voces haciendo que se acerque aún más prestando su total atención -Solo hará que la secta pierda cara-.

-Ninguno de los responsable dirá nada- responde la otra voz -Sus sectas también perderían cara, sobretodo el estirado del Lan o el benévolo del Jiang cuya esposa acaba de anunciar su segundo embarazo-.

-Pero el líder Jin si podría hablar, después de todo no es ningún secreto que ya cuenta con un bastardo mayor que su heredero legítimo- dice la primera voz con impaciencia.

-Dudo que el acepte algo- dice la otra voz -De todas formas ya encontré como arreglar este asunto- asegura totalmente tranquilo -No permitiré que Wen Rouhan se vuelva aún más desobediente, después del nacimiento de Wen Xu se volvió más terco, pero en ese entonces solo era un mocoso de quince años fácil de manipular, ahora es mayor y cada vez es menos fácil moldearlo, con una advertencia volverá a ser sumiso respecto a nuestras ordenes-.

Las voces se alejan y aunque a Rouhan le encantaría seguirlas sabe que con lo que ha escuchado es más que suficiente para confirmar sus sospechas, ahora puede afirmar con total certeza que el concejo no es de fiar y que lo mejor que puede hacer es andar con cuidado, aunque para su fortuna el día y medio restante para que lleguen los líderes puede pasarlo encerrado en la habitación junto con Wen Xu justo como hizo hoy justificándose con las ordenes que Wen Ling le dio como su médico. Con cuidado y algunas dificultades al no recordar muy bien por donde vino el pequeño hombre de papel vuelve al pabellón personal de Wen Rouhan y su descendencia para posteriormente volver a su habitación y regresar finalmente a su cuerpo, le toma unos minutos recobrar todas las funciones de su organismo y cuando finalmente recupera el control total intenta procesar la información que descubrió hace unos minutos.

<Así que el nacimiento de Wen Xu volvió rebelde a Wen Rouhan y por eso el concejo teme la llegada de otro bebé> piensa Rouhan <Me preocupa el hecho de que uno de esos ancianos estuviera tan seguro de que los otros líderes guardarán silencio, ¿eso fue lo qué pasó antes? ¿no dijeron nada al respecto o simplemente ignoraron el hecho?, tal vez inclusive fueron los de el concejo quienes convencieron a Wen Rouhan de no decir nada, ese anciano dijo que él tenía una forma de controlarlo>. Mira a un costado suyo notando como el pequeño Wen Xu duerme pacíficamente sin ser consciente de toda la estrategia que se genera en su contra <No me separaré de ti a menos que sea estrictamente necesario, no dejare que te dañen> piensa decidido antes de dirigir una mano a su vientre <Ni a ti tampoco>.

La noche pasa lentamente para Rouhan quien se queda despierto hasta tarde ideando estrategias para evitar cualquier daño a sus hijo y para convencer a los líderes de que le brinden su ayuda de forma mínima incluso si no desean reconocer a sus hijos. Para cuando se da cuenta ya esta amaneciendo y el no ha dormido ni un poco por lo que finalmente cierra los ojos decidido a descansar un rato, ya usara la excusa de haberse sentido mal durante la noche debido al bebé para que lo dejen dormir un poco más. Unas horas más tarde cuando Wen Ling llego para checarlo después de que una sirvienta le avisara del estado del joven líder este simplemente le inca que descanse mientras el se lleva a Wen Xu para que juegue con Wen Qing, no muy convencido Rouhan lo deja ir y solamente lo hace por tratarse del padre de dos de las personas más honorables que pudo conocer en su vida anterior, por lo que el niño pasa el día jugando mientras el descansa en cama.
La cosa no cambia demasiado para el día siguiente, excepto que esta vez su hijo no está dispuesto a dejarlo por lo que se pasa el día entero con el tumbado en la cama siendo entretenido por Rouhan quien le cuenta diversas historias fantásticas.
Para la noche de ese día (el último antes de la llegada de los líderes) Rouhan ya tiene un plan que si bien no es perfecto puede servir como una excusa suficiente para sacarlo a el y a Wen Xu de la secta de forma temporal, al menos hasta que el periodo peligroso del embarazo termine y sea más seguro comenzar con su... limpieza del consejo de Quishan Wen.

Cambiando el destino del SolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora