Mafia Game - SEVENTEEN

Capitulo 03. Helpless

Una enorme pared de color café cubierta de notas de periódico. Mientras aquel sujeto tomaba una copa de vino con las piernas cruzadas sentado en el hermoso sillón de cuero. Teniendo el audio de las pláticas de fondo, un hermoso fondo que le daba la sensación a desesperación y confusión.

La nota que tenía en manos del periódico, mostraba la fecha de hace seis meses.

"Profesor de clases en academia de canto, fue acusado de violación a 21 menores de edad"

—Debí apostar por Lee Jihoon en el momento que esto comenzó, aunque, en realidad, Seungcheol y Jihoon hacen una grandiosa pareja.

"Las personas que tienes a tu alrededor te mirarán, y no pienses en decir que no, sabes que la respuesta es sí cuando se trata de traición."

Era lo que la tarjeta de Joshua decía, había leído en secreto mientras que Jihoon tratan de explicar lo que la tarjeta principal decía.

—Hablo de que estas tarjetas, dicen cosas relacionadas a nosotros, estoy un cincuenta por ciento seguro de eso. –señaló su propia tarjeta dejándola en la mesa.– No es '¿Por qué?' la pregunta, si no una respuesta a nuestras dudas.

—¿Por qué estás tan seguro de eso? Estás hablando de un cincuenta por ciento. –señaló Jun su propia tarjeta comenzando a leer de ella.– "Las mentiras de unos, son las respuestas de otros, mientras tanto intentes saber, no sabrás la respuesta correcta" –su mirada viajó a Vernon, en ese momento, él se sintió intimidado.

Jihoon no sabía que responder aquello, ¿Era verdad que aquel tipo sabía de ellos, o todo esto era una coincidencia? No lo sabía, pero sin duda, todo le sabía mal.

—¿Y bien? –Joshua llamó la atención de todos.– Será que comencemos a comer, ¿No es así? Si seguimos buscando respuestas, comenzaremos a desesperarnos sin antes comer.

—¿Y si la comida está envenenada? –preguntó Wonwoo, se levantó de su asiento.– Yo paso. –y se retiró de ahí bajo la mirada de todos.

—Yo... no tengo hambre. –dijo Chan en voz baja, Seungkwan lo había escuchado, así que acarició su cabello tratando de reconfortar.

—Yo tampoco tengo hambre, podemos evitar hacerlo. –murmuró Seungkwan.– No te preocupes, yo estaré de tu lado, tampoco creo que lo haya hecho.

—Me quiero ir a casa. –Chan miró la tarjeta que tenía en la mano, quería llorar en ese momento.– ¿Qué es lo que dice tu tarjeta? Yo... no creo confiar en Jihoon.

—"No seas cobarde y asume tus acciones, cuando ellos te inculpen, di la verdad aunque parezca mentira." –dijo con un tono de desánimo.– Jihoon tiene razón, las tarjetas están relacionadas con nuestro pasado. Cuando todo el escándalo sucedió, yo quise aclararlo todo, pero mi empresa no me creyó, y me prohibió decir algo.

—Oigan. –la voz de Vernon llamó la atención de ambos.– ¿Y si formamos un equipo? Es decir, Seungcheol y Jihoon se ven muy sospechosos, y ni se diga Wonwoo, tal vez si nos unimos, podemos sacarlos de la jugada.

—¿Estás loco? Si hacemos algo así, ellos van a matarnos. –declaró Seungkwan.

—No, me refiero a que si la mayoría escoge a uno de ellos, y votan, nosotros también votaremos, en caso de que se vayan contra uno de nosotros, trataremos de defendernos entre nosotros para salir vivos. ¿Qué les parece? –Seungkwan estaba dudando de aquello, pero lo que escuchaba parecía buena idea.

—Esta bien. –y terminó aceptando, Chan no sabia que decir, pero confiaba mucho en Seungkwan, a pesar de que Seungcheol les prohibió confiar en los demás, era inevitable para él.

Había una cuarta persona que estaba escuchando su plática, Mingyu había estado prestando atención a todo mientras los demás seguían discutiendo sobre las tarjetas. Sabía lo que los tres tenían en mente gracias a la idea de Vernon, debía prestar atención a sus movimientos.

—Voy a comer. –llamó la atención Mingyu, comenzando a servir la comida en su plato bajo la mirada de todos. Wonwoo pudo tener razón, la persona que los encerró ahí los quería muertos, y ponerle veneno a la comida era lo más factible.– ¿Qué? –fue lo que dijo cuando puso atención a qué todos lo miraban.

—Nada, adelante, come. –dijo Jeonghan esperando que algo pasará, mientras Jun soltaba una risa por su comentario.

Mingyu comenzó a comer la comida, esperando que hubiera algo en ella fue todo lo contrario, pues el sabor era demasiado bueno, la comida estaba bien preparada. Y eso, fue señal para que los demás comenzaran a imitar su acción.

—Bien, ¿Y que esperamos? –dijo finalmente Jun.

Wonwoo estaba desordenado la habitación donde se había quedado a dormir, buscando entre los cajones y bajo las sábanas alguna de las tarjetas que podrían estar escondidas. Había desordenado todo, y se detuvo al no encontrar nada. Llevó las manos a su cintura, pues el calor de la habitación era inevitable, estaba sudando y su respiración era pesada por el cansancio.

Tomó uno de los libros de la habitación, y la aventó a la ventana que dejaba mostrar el bello amanecer. El libro simplemente chocó contra la ventana sin hacer algún daño, y cayó al suelo. Era inútil hacer algo para intentar escapar de ahí.

—Wonwoo. –La voz de Mingyu se escuchó por la habitación, y el mayor por inercia sacó un arma para apuntarle a la cabeza. Mingyu se asustó y casi tiraba lo que traía en la bandeja.

—Joder, toca primero. –bajó el arma y la guardó, Mingyu soltó un suspiro al ver que estaba desarmado.– ¿Qué haces aquí? Creí que todos estaban en el comedor.

—Fuiste el único que no comió, así que decidí prepararte algo diferente. –Mingyu estiró la bandeja de la comida.– Además, Jihoon convenció a los demás a buscar pistas, algo como las tarjetas. –Wonwoo se acercó a Mingyu tomando la bandeja y dejándola en un pequeño mueble.

—Genial, puedes irte, yo trabajo solo. –Wonwoo lo quiso empujar fuera de la habitación pero Mingyu lo evitó.

—Espera, Wonwoo. –Él lo miró con fastidió.– Tengo algo que contarte, Chan, Seungkwan y Vernon están planeando algo entre ellos, sacarte a ti y a Seungcheol de la jugada. –confesó. Wonwoo mantuvo una sonrisa al escuchar aquello.

—¿Por qué debería creerte?

—Porque yo que creo que tú no eres la Mafia. –Wonwoo se quedó callado ante su confesión.– También pienso que Seungcheol lo hizo, todo esto, por poder sabiendo que no podemos escogerlo.

—Me convenciste. –Tomó a Mingyu del hombro para meterlo dentro de la habitación.– Tenemos que hacer algo para sacar a Seungcheol y a Jihoon, ambos se llevan bien, y puedo estar seguro que algo traman. Lo mejor será sacar a esos tres escuincles o ponerlos a nuestro favor, si argumentamos contra esos dos, los niños nos apoyaran.

—¿Cómo haremos eso? Los chicos están comenzando a confiar en esos dos. –Wonwoo notó algo, en la pared había un recuadro con un sobre blanco.

—Lo haremos con esto. –avanzó a la pared tomando el recuadro y sacando el sobre del vidrio. Abrió el sobre con la tarjeta.– Estoy seguro, que hay más notas en la mansión, en el estudio, en la biblioteca, en las habitación, en el baño y en la misma sala, comedor y cocina. –comenzó a leer el contenido de está.– "Las mentiras resuenan, no puedes confiar en nadie, pero él te pedirá confianza. Cuando creas que has obtenido al correcto, la jugada se volteará en tu contra, debes ser más listo que las mil palabras de los demás."

—¿Que significa eso? –Wonwoo lo analizó.

—Habla de la Mafia, ellos buscarán nuestra confianza, y cuando votemos por alguien, ellos nos lanzaran contra los demás. –declaró Wonwoo pensando en la tarjeta que tenía en sus manos.– Las tarjetas sueltas son pistas, mientras las que tienen nuestro nombre tienen algo de nosotros. Si logramos quitarles a los demás o saber lo que sus tarjetas dicen, podemos saber quién es la Mafia.