02. Presentaciones y bienvenidas

Start from the beginning
                                    

Mi mirada recae sobre el señor Zaidi, quien está situado a su derecha con sus manos dentro de los bolsillos de sus pantalones de vestir que se sujetan firmemente a sus caderas gracias a un cinturón azul a juego con en el resto de su ropa.

Luce natural y fresco, con ese aspecto jovial pero formal que le aporta su ropa y ese inicio de barba perfectamente recortado. Cuando vuelvo a posar mis ojos en los suyos, me sorprendo al ver que ahora estos me miran.

Me pellizco el brazo todo lo que puedo, aun a sabiendas de que dejara una buena marca, y muestro una tímida sonrisa cuando este asiente con la cabeza en mi dirección, como felicitándome por mi respuesta.

—Para ser precisos, esta clase es completamente voluntaria.

Ese último comentario, crea quejas y comentarios entre los alumnos, rompiendo la pacífica atmósfera que se había creado, por suerte el señor Zaidi no tarde en mandar callar.

—Guarden silencio —espeta de manera tranquila, pero que causa un gran impacto en todos aquellos que antes mantenían conversaciones, pues un silencio sepulcral se instala nuevamente.

—Vosotros deberéis decidir si necesitáis hablar sobre ciertos temas —retoma su explicación.

—Si es voluntario... Mejor dedicar ese tiempo a asignaturas mas importantes... —murmura a mi oído Chani, sin apartar la mirada de la profesora.

—No sé, los puntos extra nunca vienen mal —le recuerdo.

—También debéis saber que los que asistan, obtendrán una "bonificación" con nota en su expediente a final de año. Y siempre es bueno intentar favorecer las condiciones.

Eso último, parece alentar a los estudiantes, aunque a mis oídos llegan todo tipo de opiniones y puntos de vista muy diferentes unos de otros.

—La plaza esta limitada a la cantidad de estudiantes que hay en clase, y seré yo quien imparta dichas clases —advierte.

—Lástima, hubiera estado bien que se encargara el señor Zaidi... Al menos, uno no se cansa de mirarle.

Su comentario llega a mis oídos y a algunas personas situadas cerca de nosotras que sueltan alguna que otra risa por lo bajo.

—¡Chani!

—No me digas que eres insensible a ese rostro. Hasta yo he sentido un escalofrío cuando he entrado en la clase para matricularme —dice esta vez de manera que solo yo alcance a oírla.

—Reconozco que tiene un "algo" —le digo de manera sincera.

—Aquí termina la presentación. Ha sido más una presentación de este programa que una auténtica reunión de bienvenida —dice, dando por finalizada dicha reunión.

Poco a poco, el comedor se va vaciando mientras los profesores se quedan a charlar con unos alumnos para resolver dudas que seguramente todavía tienen, pues como máximo, lo único que sabemos son las asignaturas que tendremos, y con suerte los profesores que las imparten.

Le echo una última ojeada a mi profesor de Arte Moderno y Contemporáneo que habla de manera calmada con una joven de pelo castaño cuyo rostro no alcanzo a ver.

—Su nombre es Melody, una lambe culos profesional —susurra una chica a mi lado.

Abro mis ojos avergonzada por haber sido pillada infraganti y muerdo mi labio inferior ante el nerviosismo.

Mis ojos se encuentran con una joven de mi edad de piel blanca como la nieve y ojos color arena. Su pelo teñido de un color lila especialmente claro, incluso casi blanco, luce acorde con su vestimenta.

Es preciosa.

—Hola, soy Rosalya —se presenta de manera un tanto eufórica.

—Yo soy Eadlyn, y ella es Chani —nos presento, y ambas le estrechamos la mano.

Su dorada mirada recae sobre Chani, y noto como se encoje a mi lado en espera de algún comentario inapropiado.

—A ti me suena de verte por los pasillos, o al menos por los alrededores, sin embargo estoy segura de que a ti es la primera vez que te veo —me dice girando ligeramente su cabeza hacia un lado de manera muy tierna.

—Es mi primer y último curso en esta Universidad, pues no he podido asistir antes —le explico algo nerviosa ante la seguridad de si misma que hirradia por cada poro de su piel.

—Oh bueno, en ese caso estoy segura de que te va a encantar. Yo estoy estudiando psicología, así que dudo que coincidamos durante las clases, —me informa soltando una suave risa— pero cuando quieras podemos ir juntas a tomar algo y te enseño la ciudad.

Su invitación resulta tentadora, y se ve una persona amable y sincera, por lo que me limito a asentir con mi cabeza, lo que la emociona de sobremanera y provoca que me abrace.

—Uups perdón, bueno yo debo irme pero si queréis os doy mi número y quedamos un día a tomar algo —sus ojos nos miran expectantes y ansiosos en espera de una respuesta, alternando su mirada entre Chani y yo.

—Si claro, anota tu número en mi móvil y a final de clases te envío un mensaje —le respondo al mismo tiempo que extiendo mi móvil para que se agrege su contacto.

—¡Fantástico!

Rayan [en pausa] Where stories live. Discover now