Terminemos [°kookmin°]

Capítulo 4.

Dos semanas después Jimin poco a poco había ido contándoles a sus amigos que su relación con Jungkook había llegado a su fin.

Las reacciones fueron diversas, preocupación, confusión, sin embargo el apoyo estuvo ahí y Jimin lo agradeció.

Un día en especial Namjoon se acercó a el en la universidad y le invitó un café en el receso. Se sentaron en la cafetería y el pelirubio carraspeó antes de hablar.

-Uh...este sábado Jin y yo planeamos pasar el rato junto a los demas en nuestro departamento, por si querías ir.-Namjoon se quedó en silencio ahí y Jimin se preguntó si eso era todo lo que tenía que decirle. Sin embargo le respondió.

-Está bien, estaré ahí. ¿A qué hora?-pregunto con una suave sonrisa mientras bebía de su café.

Namjoon suspiró pesadamente y le miró a los ojos.

-Estará jungkook.

Jimin bajo la mirada aún sonriendo.

-Lo sé.

Namjoon asintió comprendiendo. Pero eso no era todo.

-El...irá con alguien.

En ese instante Jimin levantó la mirada y se encontró con los ojos de namjoon que le miraban de una forma indescifrable. Ese malestar volvio a instalarse en su pecho como si fuera una gran roca, sin embargo jimin no sintió nada más.

-Lo sé.-volvió a contestar, manteniendo la sonrisa.

Namjoon pareció confundido.

-¿Lo sabes? ¿Jungkook te lo dijo? ¿Estás bien con eso?-Namjoon lucía confundido y un poco molesto.

Jimin suspiro y bajo la mirada hasta sus pequeñas manos sosteniendo el cafe entre sus dedos. Debatiendo consigo mismo.

-Los vi.

-¿Qué?-Namjoon no daba crédito.

Y Jimin decidió contarle al mayor todo lo que sucedió, no podía mentirle, era con quien mas se sentía cómodo. A medida que decía pudo notar como el ceño de Namjoon se juntaba cada vez mas y mas y la mirada de sus ojos se endurecía.

-Jimin, ¿Por que ahora me estas diciendo esto luego de tanto tiempo?-Namjoon le reclamó, sin dejar de mirarle.

-Lo siento, no lo sé, mis pensamientos últimamente me consumen.-respondió sin mirarle a los ojos.

Namjoon se pasó las manos por la cara frustrado. Bufando se paró y sentó al lado del mas bajito y tiró de el hasta su pecho dándole un reconfortante abrazo.

-Si sabes que se comportó como un bastardo cobarde, ¿no?-susurró namjoon mientras le acariciaba el cabello.

Jimin sonrió.

-Si, lo sé.

Namjoon suspiró.

-No entiendo Jimin, de verdad no entiendo como puedes estar tan tranquilo después de que ese imbécil hiciera todo eso. Como si fueras poca cosa. ¡Ni siquiera te valoró o respetó¡. Te lo juro, yo le hubiese sacado las bolas. Y para añadir es un maldito descarado que quiere llevar a ese chico para presentarlo, ¿no crees que se está pasando? Con los chicos estamos preocupados por eso, y decidí que debía hablarlo contigo primero. La verdad es que no queríamos que llevara a ese tal Jaehyun por ti, ya que era todo muy reciente y podía ser incómodo o doloroso, cabe decir que todos somos amigos y tampoco queremos terminar peleados o divididos pero ahora que sé todo esto solo quiero romper su cara y...-

Jimin en todo momento sonrió y abrazó fuerte al mayor antes de separarse.

-Namjoon Hyung.-Jimin le tomó la mano.

Este se calló abruptamente y le miró.

-¿Sí?

-Lo sé. Pero ya soy un adulto sabes? Se qué jungkook fue un auténtico idiota, pero también sé que di todo de mi para hacer que las cosas funcionaran. Jamás pensé que terminar una relación llevaría un proceso de pensamientos y decisiones tan arduo. Estoy tranquilo por un lado al saber que reconocí mi error y lo intenté, también sé que puedo exigir una justificación digna al menos, pero ya no tengo fuerzas para eso, el ya es una persona adulta y no puedo hacerle ver sus errores porque no soy su padre. Y si lo hiciera, se que las cosas terminarían mal entre nosotros porque también sé que para jungkook ya todo está terminado desde hace meses, y lo que es injusto e importante para mi o para ti, para él no lo es. No puedes obligar a alguien a hacer algo que no quiere, tampoco tengo la energía para hacerlo. Solo quiero estar en paz.-Jimin le sonrió, con ojos aguados.

Jimin lo sabía, mas que nadie, y si no quería exigir algo que estaba en su derecho es porque no se sentía preparado, no tenía la fuerza suficiente. Namjoon en ese momento lo miró con pesar.

-No me mires así, Hyung.

-¿En que momento maduraste tanto, pequeño?-murmuró mientras secaba las lágrimas que iban cayendo por las mejillas rechonchitas de Jimin.

Éste solo le sonrió.

-Estoy bien, Namjoon Hyung.

Y por primera vez, Namjoon dudó de la palabra de Jimin.