Depresión

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Hoy fue el día mundial de la prevención del suicidio y por tanto, les regalo un maratón ❤️ esta historia está fundamentada por varios daños psicológicos y psicosociales como ya se habrán dado cuenta y es importante hablarlo.

Por último, mi chat siempre está abierto para ustedes que leen, Facebook, Instagram y Wattpad, si necesitan a alguien con quién hablar, contarle algo y no se sienten seguros con sus alrededores, cuenten conmigo.

Sin más por el momento comenzamos 1/3

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Oh mi niña—, llegó gritando mi tía a la comisaría, había visto minutos atrás como se llevaban a Charles esposado hacía otro lado, quise llamarlo pero algo me dijo que sería mejor no hacerlo.

—Tía—, respondí y ella sonrió abrazándome, hasta sus abrazos se sentían falsos.

—Te llevaremos a casa en cuanto esto termine—, continuo hablando y el miedo me invadió, ellos querían llevarme lejos, si eso sucedía Callaghan no volvería a encontrarme y me alejarían de Charles.

—No quiero ir a casa—, me separé de ella.

—Cariño, sé que lo que te hizo ese detective fue... despreciable, pero te ayudaremos a superarlo—. Dijo y sentí asco.

—¡Charles jamás me dañaría!— grité llamando la atención de los demás agentes que estaban a mi alrededor.

—Señora Buhana ¿no es así?— mi tía asintió con una mueca, una de vergüenza ante mi grito al hombre que antes estuvo con el sargento—. Soy El Capitan George Maddison, me he enterado de lo sucedido con su sobrina y he venido inmediatamente...

—¿Así que es todo? ¿Mi niña fue abusada por el hombre que la cuidaba y usted está aquí presentándose ante mi?— lo interrumpió mi tía.

—El detective Anderson no abuso de mi—, enfaticé.

—Señora se está haciendo todo lo posible por obtener la información pertinente, la denuncia fue anónima y aunque venía con algunos papeles no sabemos si sólo es para dañar a mi detective—, defendió El Capitan que ahora me caía mejor.

—No quiero volverlo a ver cerca de Isabel—, mi piel se erizó ante el simple pensamiento de no volver a ver a Charles.

—Eso está arreglado, en cuanto el juicio termine, positivo o negativo, ustedes podrán llevar a Isabel a casa—, estaba asustada, no quería ir con ellos, jamás fueron buenos conmigo o con mis padres, sólo iban a rogar por dinero y luego se lo gastaban en apuestas y juegos, necesitaba que Charles viniera a salvarme de nuevo.

Charles.

Vi a Isabel en la silla de la comisaría, la cabeza baja y los ojos más tristes aún si es que eso era posible, su mirada se posó brevemente en mi y la bajo de inmediato, ¿les habrá dicho la verdad? Estaba aterrado, todo lo que había hecho mal me estaba cayendo encima, sólo podía pensar en que Sandy había hablado pero, aunque ese fuera el caso, yo ya estaría en la cárcel y no estarían tomándose la molestia de interrogarme sobre lo sucedido.

—¿Qué mierda es esto, Charles?— preguntó el sargento mirándome decepcionado.

—No lo sé—, respondí sereno, mirándolo.

—Son notas de Sandy y Heidy... donde aseguran que abusas de Isabel—, aventó el folder hacia mi y lo abrí.

—No tengo nada que decir, señor, jamás he abusado de Isabel, intento ayudarla—, aseguré y no era del todo mentira, yo no había abusado de ella, quizá sí la pregunta fuera diferente, tendríamos problemas—. Ella, me llama Callaghan a veces, creo que podría ser el problema principal de esta confusión—, dije mientras El Capitan Maddison entraba en la habitación.

Ojos tristesWhere stories live. Discover now