Capítulo 77: Días fríos

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-¿Sakura?

La ojiverde giró de inmediato y Kaito también lo hizo al escuchar aquel llamado.
Era Shaoran quien había estado esperando a su novia todo este tiempo, en la puerta de la escuela en medio de la oscuridad.

Los ojos miel del castaño se enfocaron de inmediato en aquel apuesto chico que llevaba el maletín rosado de su novia colgado del hombro.
Simplemente no toleraba verlo cerca de ella.

-¿A dónde crees que vas? - preguntó el castaño dirigiéndose a Kaito.

- ¿Estás ciego? - replicó el ojiazul, anteponiendose delante de la chica - Nos estábamos yendo juntos a casa, ¿Qué no ves?

Sakura no podía ocultar su expresión asustada al verlos hablar con esa actitud poco amistosa. Más aun con los precedentes entre ambos.

-¿Por qué mejor no te largas con esas pobres chicas a las que manipulas todo el tiempo? ¿Eh? - insistió Shaoran cada vez más fastidiado con la presencia del otro

-A ellas no necesito llevarlas a casa, idiota...

-¡Tú eres el idiota! - agregó el chino levantando la voz - Sakura es mi novia y seré yo quien la cuide

-La pregunta es ¿Hasta cuando? - murmuró el ojiazul con evidente sarcasmo

-¿Qué insinuas?

-Sakura se merece lo mejor... Es cuestión de tiempo para que abra los ojos... ¿Verdad princesa? - dijo volteando a verla.

La castaña solo atinó a negar con la cabeza, presa de sus nervios.
Estaban afuera de la escuela y le carcomía el miedo de que ellos dos empiecen a pelear en plena calle. Probablemente iban a salir lastimados, y no solo eso, se iban a meter en serios problemas.

-Oye, ¿¡Quién te crees!? - exclamó el castaño mientras empujaba bruscamente al otro - ¡Deja de llamarla así! ¿No ves que la pones incómoda?

-¿En serio? Yo creo que le agrada... - respondió Kaito sonriendo

-¿Qué dijiste? - dijo Shaoran, quien volvió a empujar al ojiazul del 2-A con todas sus fuerzas, ya harto de sus tonterías.

-¡Vamos pégame! ¡Hazlo! Deja que Sakura vea que eres un niñato inseguro y engreído, y veamos a cual de los dos elige... ¡Ya tiene como compararnos!

-¿De qué mierda estás hablando?

-¡Ahhh! ¿No te lo ha dicho? - preguntó Kaito con una carita inocente e incrédula.

-¡Kaito, basta por favor!

Shaoran giró hacia su novia, sorprendido al oirla intervenir.
La vió suplicándole a ese odioso sujeto, con los ojos brillantes a punto de inundarse.

Algo andaba mal.

Shaoran volteó de nuevo hacia el inglés y lo sujetó del cuello de la camisa dispuesto a golpearlo por lo que sea que le haya hecho a su novia. Ya no estaba dispuesto a seguir aguantando sus idioteces.

Kaito, sin embargo, no se intimidó en absoluto. Mantuvo sus ojos firmes en los de su rival y el mentón en alto mientras calculaba cómo deshacerse de Li de una buena vez.

-Sakura ya sabe que la quiero... Le confesé lo que siento y nos besamos... ¡Wow! No tienes idea... ¡Fue increíble! ¡Jamás había disfrutado tanto!

Shaoran por un momento no creyó semejante atrocidad, pero al ver a Sakura avergonzada, sollozando con las manos en el rostro, se dió cuenta de que Kaito no le había mentido.
El corazón se le resquebrajó en cientos de pedacitos y un nudo se formó en su garganta porque su novia, su pequeña Sakura, no estaba negando nada.
¿Acaso ella aceptó sus sentimientos?

Un nuevo comienzo ~ Sakura y ShaoranWhere stories live. Discover now