Capítulo 66: Días en Hong Kong

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Los recién llegados descendieron de aquel auto negro que los trajo desde el aeropuerto de Hong Kong e ingresaron a la hermosa e imponente mansión de la familia Li.

Los ojos verdes de Sakura estaban abiertos de par en par por todo lo que veía frente a ella. ¿Realmente su novio vivía en este lugar tan bonito?

Salió de dudas cuando un grupo de chicas de unos veinte o veintiún años se acercaron corriendo hacia donde ellos estaban a toda prisa. Por algún motivo se les veía muy emocionadas.

- Ay no... - Murmuró Shaoran en voz bajita al ver a aquellas señoritas acercarse en medio de un alboroto.

- ¡¡¡Shaoran!!! - exclamaron las cuatro jóvenes al unísono y a viva voz. Parecía que no lo habían visto en años por tan efusiva bienvenida.

El castaño solo sonrió nervioso al tenerlas a todas encima suyo. No le quedó otra que quedarse quieto para recibir los cientos de abrazos y besos que esas chicas tenían para él.

- ¡Hermanito precioso, bienvenido! - dijo Fanren Li, la mayor de sus hermanas que aprovechaba para jalarle los cachetes al jovencito.

- ¡Shaoran qué guapo estás! - agregó su hermana Feimei, quien lo tenía abrazado del cuello.

- ¡Siiii estás más alto que antes! - exclamó Fuutie, la tercera de sus hermanas mientras que comparaba su altura con la de él.

- ¡Nuestro bebé es ahora un príncipe! - exclamó Shiefa, la cuarta hija, quien besó a su hermanito en la frente dejándole marcado su lápiz labial rojo en la piel.

- ¡Ahhh! ¡¡Ya dejen de decir esas cosas!! ¡¿Qué no ven que nos están viendo?! - reclamó Shaoran sin poder moverse y totalmente sonrojado porque esta vez había alguien especial observándolos, aparte de todos sus empleados que ya estaban acostumbrados.

Las cuatro jovencitas se dieron la vuelta ante el comentario de su hermano y notaron la presencia de una niña que aparentaba tener casi la misma edad que él. Era delgada, un poco pequeña de estatura, de cabello castaño corto y unos brillantes ojos esmeralda.

Sakura sonrió tímidamente al sentirse observada por las cuatro chicas y justo cuando estuvo de a punto de decir "hola", todas ellas se le abalanzaron encima tal y como lo habían hecho un minuto antes con su novio.

- ¡Es muy linda! - exclamaron todas mientras le tocaban la cara y el pelo a la sonrojada ojiverde.

- Siiii ¡Parece una muñeca!

- ¡Oh por dios! ¡Podemos cuidarla como si fuera nuestra hermana pequeña!

- ¡Siiiii, vamos a peinarla y cambiarla!

- E...esperen un momento... - tartamudeó Shaoran para al menos intentar presentar a su novia ante sus hermanas pero ellas ni lo escucharon.

Las cuatro se llevaron a Sakura muy emocionadas y en medio de un alboroto en dirección a la habitación de invitados en el segundo piso.


Shaoran soltó un suspiro porque ya se temía que algo podía suceder.

Sus hermanas eran demasiado efusivas a veces y no se controlaban.

En fin... Al menos habían recibido a Sakura con alegría y eso era bueno.

...

Un buen rato después, el hijo menor de los Li ya había logrado instalarse en su recámara ubicada en el segundo piso de la mansión. Se tomó su tiempo para tomar un baño tibio en su bañera, pues realmente lo necesitaba para relajarse después del vuelo desde Tokio. Tomó una toalla para secar su cabello húmedo y abrió una de las ventanas de la habitación para que le dé un poco de aire. El clima de Hong Kong siempre era muy cálido y húmedo.

Un nuevo comienzo ~ Sakura y Shaoranحيث تعيش القصص. اكتشف الآن