Epílogo

9K 421 131
                                    

Una mes después...

Nos encontramos en la casa de Kian aún en Dublín, hemos decidido volver a Milán a tener un nuevo comienzo, la vida no es igual sin Myke y Carlotta, su ausencia se siente en cada rincón de las casa. Kian a puesto su casa en venta, prometiendo que jamás volverá a Dublín, cambio su trabajo nuevamente a Milán.
La policía no levantó cargos ya que Ancel se encargó de todo, a Emily se la llevo Ancel y sus hombres no sabemos que fue de ella y sinceramente no me importa. De los hombres de Ancel desgraciadamente murieron tres, de los de Emily todos.

Los cuerpos de Myke y Carlotta han sido cremados en la funeraria, nos han entregado las urnas de ambos. Las llevaremos a Milán dónde sus restos descansarán en el cementerio monumental cercas de la tumba de Melina y el señor John Rusell. La madre de Carlotta está de acuerdo con la decisión que tomo Kian, ya que ambos amantes quedarán juntos hasta la eternidad.

Kian está destrozado emocionalmente al igual que yo y Gianina, William se limita a qué lo miremos llorar pero siempre miramos sus ojos rojos e hinchados por el llanto, ha pasado un mes pero aún duele como si hubiese sido ayer. El rostro de William demuestra todo lo contrario el sufrimiento que lleva dentro y, ni se diga de Kian, nos dieron donde más nos duele.
Ancel a regresado a Alemania hace dos semanas, argumentando que algún día volverá de visita. Los gemelos están bien no se despegan de su padre y ellos al igual que Kiana son los que nos mantienen fuerte.

─¿Lista Ginebra? el jet nos espera, es hora de regresar a Milán aquí no hay más que hacer. ─ William mira a la nada.

─Lo sé es hora de regresar a nuestro hogar. ─mi casa de campo la he puesto en venta, no pretendo volver a ese lugar lleno de desgracias y muerte, William a mandado los autos de vuelta a Milán.

Termino de colocarme los zapatos últimamente no me he sentido bien, siento náuseas y mareos. Tal vez se deba a qué no me he alimentado bien estos días el estrés de lo que pasó y la ausencia de nuestros amigos ha cambiado nuestras vidas, necesito una revisión medica, tal vez en Milán lo haga.
Cada vez más se siente la ausencia de Myke y Carlotta, los extraño mucho y que diré de mis gemelos ellos preguntan mucho por sus tíos, los tenían muy impuestos con ellos claramente tiene que repercutir la ausencia de ambos.

***

Hace cinco minutos hemos llegado a la pista de aterrizaje, nos encontramos bajando del jet, el viento pega en mi rostro cierro los ojos permitiendo sentir la brisa, volver a respirar el aire de Milán me relaja nuevamente me siento en casa. William lleva a ambos gemelos en sus brazos y yo llevo la maleta de los bebés y mi bolso de mano, mis amigos se despiden y suben a la Audi blanco de Kian, los miro alejarse y se me hace un poco extraña su actitud.

Hace dos días he rentado un apartamento a las afueras de Milán, me gusta la soledad necesito pensar muchas cosas.
William se ha ofrecido a llevarnos, mirarlo tan cariñoso con los gemelos me hace morir de amor por este hombre, nos subimos a la camioneta vamos en silencio.

─Ya sabes a donde. ─le ordena al chófer y este sonríe, pasados diez minutos entramos al área residencial, es la calle que lleva a su mansión.

─William se a equivocado de dirección. ─le digo y este sonríe.

─Vamos a casa no pretendo dejarte sola en ese apartamento, solo quédate en la mansión hasta que te sientas segura no pretendo incomodarte. ─se queda en silencio, no protesto llegamos hasta el portón negro y este se abre. El auto ingresa y aparca frente a los portones de la casa, bajamos de la camioneta y me quedo observando la mansión, sigue siendo la misma me trae tantos recuerdos, el jardín lo han arreglado y plantado nuevas flores, tiene rosales al rededor de esta, pero no es cualquier flor. Sino las rosas que tanto amo las 'Black Baccara'

Sentimientos OcultosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora