Capitulo 7

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"A quien corresponda. Escribo esta carta, con la intención de demostrarles que si me aceptan en su universidad, voy a ser una alumna comprometida e innovadora" 

No, mejor primero me presento. Pensé borrando lo que llevaba escrito y volviendo a redactar la carta. 

Estaba comenzando a escribir mi carta de admisión para la universidad de artes plásticas en Chicago. La escribía con el único propósito de que me dieran la oportunidad de mandarles una obra mía y si esta les gustaba, me entrevistaran para ver si me aceptaban en la universidad o no. 

Toda mi vida había soñado con ir en esta universidad, era una de las mejores de todo el país, habían muy buenas en Inglaterra, pero yo quería quedarme en Estados Unidos y esta me había enamorado desde que había leído sobre ella. 

Hoy era el ultimo día para mandar la solicitud de admisión, sin embargo, no me salían las palabras. Estaba tan nerviosa que estaba bloqueada. Quería que fuera la mejor carta que recibieran. Deseaba con toda mi alma estudiar en esa universidad, cada vez que estudiaba para un examen, era con la única intención de tener buen promedio para que me aceptaran en esta universidad. 

Quite mi pelo de la cara  y recargue mi espalda en la silla desesperada. Voltee a ver hacia la ventana de mi habitación, viendo como el aire hacía que las ramas de los arboles bailaran, con hojas flotando a su alrededor. Libres, volaban por todos lados. 

Voltee a ver hacia mi computadora, viendo la pagina en blanco. Acomode mis dedos sobre el teclado y deje que mis dedos se convirtieran en hojas, moviéndose por todos lados, libres de escribir lo que en realidad sentía. 

Dos horas después, mi carta estuvo lista. Escribí el correo de la universidad y pique el botón que decía enviar. Lo único que quedaba era esperar.

Me levante de la silla y salí de mi cuarto, buscando a mis abuelos.

El aroma a galletas recién horneadas me llego una vez estuve  en la planta de abajo.  Llegue hasta la cocina y vi a mi abuela sirviendo las galletas en un plato. 

_Que ricas se ven.- dije acercándome a agarrar una. 

_¿Ya acabaste de escribir la carta?- Pregunto mi abuelo entrando a la cocina. 

Asentí dandole un gran mordisco a la galleta. Amaba los sábados de postres. Todos los sábados mi abuela se dedicaba a cocinar algún postre nuevo. 

_Tu abuelo y yo estamos seguros que te van a aceptar. - Dijo mi abuela entregándome un vaso lleno de leche. 

_Gracias abuela. En verdad lo deseo.-

_Por supuesto que sí, ¿Quien no querría tener a mi nieta de alumna? Ademas de talentosa, hermosa.- Me alagó mi abuelo, comiendo dos galletas de un solo bocado.

_Tom.- lo regaño mi abuela.

El solo levanto las manos haciéndose el inocente, haciéndome reír.

_Pues ya mande la carta. Espero que me contesten rápido. - dije tomando otra galleta. 

_Vas a ver que lo van a hacer. Mientras eso pasa, yo rezaré para que, sin importar lo que te contesten, sea lo mejor para ti. - dijo mi abuela abrazándome. 

Sonreí y la abrace. Abrazo al cual, mi abuelo se unió unos segundos después. 

_Todavía no se que obra les voy a enseñar si me aceptan. Deje casi todos mis bocetos en Londres. - dije separándome del abrazo. 

_Algo se te va a ocurrir. Ahora ve al supermercado por lo que te pedí.- me ordeno mi abuela.

Bufe y la vi suplicante. Tenía mucha flojera. 

Just one breathWo Geschichten leben. Entdecke jetzt