Se tardó unos segundos en responder —No, pero estoy segura que debe de suponer. Es una mujer muy lista.

Reí sin poder evitarlo —Claro.— El sarcasmo en mi voz se podía escuchar a kilómetros.

Fijo su mirada unos segundos antes de volver a mirar al frente —Ella es buena persona...no tienes que tratarla así.

—Lo siento, me olvidé que ella fue la mujer que te engaño con uno de tus únicos amigos.— Mi boca no paraba de decir tonterías. —Sí, muy buena la chica.

—Ya basta. No estoy de humor para pelear contigo.— Podía ver como apretaba la mandíbula.

—Y yo no estoy de humor para venir a uno de estos estúpido desfiles ¿No podemos volver?— pregunte mirándolo triste.

—¿Y decepcionar a tu madre? Ni hablar. No pasará nada, no tienes que preocuparte. Además, estamos casi por llegar, solo faltan 10 minutos, sería un desperdicio de gasolina si solo doy la vuelta con todo el tramo que hemos hecho.


Hablaba con tanta tranquilidad que me exasperaba más, me cruce de brazos y me callé en todo lo que quedaba del viaje. Harry no dijo nada por mi arrebato y siguió manejando.


¿Es que acaso no se da cuenta que no quiero fingir ser su novia de nuevo? Todo esto es un error.


—Llegamos.— Anuncio mientras apagaba el motor. No espere que él me abra la puerta y baje del auto.


Mire a mi alrededor y sentí un nudo en mi garganta. Siempre quise estar aquí desde que tengo memoria pero ahora, solo quiero desaparecer de este lugar, me trae mucho recuerdos, recuerdos que he tratado de reprimir todos estos últimos años.


—Oye ¿Estas bien?— sentí la mano de Harry acariciar mi mejilla.

—Sí.— Baje mi rostro para que no mire mis ojos que estaban brillosos pero no iba a permitirme llorar ahora. —Solo fue muchos sentimientos encontrados, no es nada.


No sabía si él realmente creyó todo lo que dije pero me ofreció su brazo.


—¿Listo?— pregunte mientras entrelazaba nuestros brazos y lo miraba con una ceja arqueada.

—Yo nací listo, cariño.— Me guiño un ojo y no pude evitar reír.


Los dos caminamos juntos fingiendo ser una pareja real, casi lo mismo que en New York solo que en diferentes escenarios. El lugar era en campo abierto, el día era hermoso y había miles de flores decorando todo el lugar. Mucha gente con largos vestidos y ropa de diseñador estaban en cada esquina, flashes en cada lugar que ibas, esto era como el paraíso como siempre quise ir.


—Aquí están, justo a tiempo. El desfile empieza pronto.— escuché la voz fría de mi madre y los dos volteamos a saludarla. —¿Llegaron bien?

—Sí, todo fue tranquilo.— Respondió Harry mientras un mesero se nos acercó y nos ofreció una copa de Champagne para los dos.

—¿Y?— pregunto emocionada, solo esto la pondría de este humor —¿Qué les parece el lugar?

—Es hermoso.— Respondí.

—¿Cómo siempre pensaste que sería?— alzo una ceja y yo la miré frunciendo los labios.

The Proposal. {h.s}Where stories live. Discover now