Capítulo 23

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Durante los últimos días, el ambiente dentro de la Cuidad Fantasma era bastante tenso. No había nadie que se atreviera a decir una palabra fuera de lugar, sobre todo cuando corrían el riesgo de que el Rey Fantasma los escuchara.

La Mansión Paraíso no era diferente, de hecho, parecía ser incluso peor. No andaban sirvientes, incluso Yin Yu ya no solía verse tan seguido como antes, solo cuando era necesario.

En los largos e incontables pasillos reinaba el profundo silencio, excepto en uno.

Era una habitación grande, prácticamente parecía estar aislada de las demás. En el centro, una cama, con todas las comodidades habidas por haber; tenía una almohada rellena de plumas y mantas hechas de la mejor tela, brillantes y cómodas.

Al costado, un asiento pequeño.

Allí, había una persona vestida con largas túnicas rojas, su mirada estaba baja y sus manos cerradas en un puño apretado mientras se presionaban con fuerza sobre sus rodillas.

El murmuró, “Una vez más, fui incapaz de proteger-…”

Su voz se cortó, pero en su interior, su mente se burlaba descaradamente.

Hua Cheng, eres tan inútil, no puedes cuidar bien de las personas que quieres.

Afortunadamente, ese día, antes de que el cuerpo espiritual de Wei WuXian desapareciera por completo, Luo Binghe había aparecido de la nada y con una bolsa atrapa almas logró captúralo.

Mientras tanto, Hua Cheng había estado enfrentando a Bai Gu Jing que después de un tiempo, ya no estaba en muy buenas condiciones.

Cuando Hua Cheng recién había llegado fue atacada por una enorme energía demoníaca. Por un momento se sintió que estaba envuelta en las hirvientes llamas rojas del infierno y solo ese ataque fue suficiente para que la máscara en su rostro cayera.

Después de eso, estaba apenas manteniéndose en pie, con su rodilla derecha y su puño izquierdo afirmado contra suelo. Alzó su rostro, revelando que también estaba formado por huesos, y observó a través de la vacía oscuridad, donde deberían estar sus ojos, a Hua Cheng.

Hua Cheng por su parte, sus ojos solo reflejaban tristeza, pero sus movimientos y ataques, estaban llenos de ira.

¿Cómo pudo permitir que algo así sucediera otra vez?

Del otro lado, Luo Binghe ya había guardado en sus mangas la bolsa atrapa almas y un pequeño frasco que había caído al suelo cuando el cuerpo se desvaneció. Más tarde se encargaría de entregárselo a Hua Cheng.

Se giró y vio como una cantidad de criaturas óseas con horrible aspecto se acercaban en montón hacia él, tanto por aire como por tierra. Escuchó a Hua Cheng gritar: “¡Protege a Wei Ying!”

Pero cuando estas palabras llegaron a sus oídos, Luo Binghe ya tenía en mano una enorme espada negra y estaba listo para luchar.

Se puso en posición de combate y se abalanzó blandiendo su espada, cortando por la mitad y destruyendo a cada demonio que se cruzaba en su camino.

No era necesario que Hua Cheng le pidiera que protegiera a Wei Ying. Él también tenía una persona especial y sabía lo doloroso que era perderla frente a sus propios ojos.

En ese momento, hubo un segundo estallido y un sinfín de energía demoníaca se acumuló en el lugar. La risa de Hua Cheng fue casi aterradora cuando alzó una mano en dirección a Bai Gu Jing y ella se elevó por el aire.
Era como si algo estuviera apretando su garganta, haciéndola incapaz de hablar. Lo único que podía hacer era jadear y luchar en vano por liberarse. Estaba asustada y desesperada ante repentino giro que habían tomado las cosas, todo había estado saliendo de maravilla hace solo un momento.

“No debiste haberlo tocado.” Su voz estaba llena de furia y su fría mirada apuñalaba a través de ella.

E-Ming se movió sola y fue directo hacia su pecho, atravesando su corazón y tórax. Cuando el filo salió del otro lado, estaba manchado de sangre.

“Así que tenías corazón después de todo.” Hua Cheng se burló.

Una vez más, Bai Gu Jing intentó liberarse, pero de la nada, Luo Binghe apareció sobre ella.

“Te atreviste a usar el nombre de mi Shizun para persuadirme y alejarme, además, lastimaste a un compañero.” Dijo casi gritando, estaba claro que no la perdonaría, y con un rápido movimiento, cortó su cuello.

Cuando la cabeza cayó al suelo, recién pudo emitir un sonido. Bai Gu Jing había comenzado a gritar, “¡No pueden matarme aún! ¡No he obtenido mi paga, no he termina-…!” E-Ming atravesó el cráneo desde arriba, su empuñadura firmemente tomada por la mano de su dueño. Y como si no fuera suficiente, Hua Cheng ejerció más fuerza sobre la grieta, hasta que los huesos se astillaron.

Después de un largo rato en silencio, Hua Cheng levantó la mirada, ahora, frente a él había una cama con una roja barrera rodeándola. En el interior, una pequeña llama.

Sabía muy bien que su alma tomaría tiempo en volver a su forma original, pero Wei WuXian estaba tan herido, que probablemente tardaría más de lo normal.

A pesar de que estaba constantemente transfiriéndole energía y había creado una barrera para mantenerlo a salvo, la llama de su alma seguía siendo muy pequeña e inquieta. Incapaz de calmarse.

Luego de pensarlo un rato, tomó una decisión.

Necesitaba a alguien que pudiera cuidar a Wei Ying mientras no estaba.

Luo Binghe en ese entonces ya había vuelto a su palacio, sabía que tenía sus propias cosas con las que lidiar, así que no lo detuvo. Solo podía confiar en Yin Yu.

Se levantó de la silla donde había estado los últimos días y salió.

Antes de irse, formó la barrera que solía instalar cuando Wei WuXian dormía. Solo de esa manera estaría alejado de los constantes llamados de los mortales, protegiéndolo ante cualquier hechizo que buscara su alma.

Esto era algo que había comenzado a usar cuando Wei WuXian recién había llegado a la Ciudad Fantasma. Ese día, escuchó como la melodía de un Guqin intentaba buscarlo. No sabía si era con buenas o malas intenciones, así que lo alejó para prevenir. Más tarde notaría que la persona detrás del sonido de esas cuerdas no era la única que intentaba rastrearlo, así que tomó la decisión de crear barreras para protegerlo, sobre todo durante la noche.

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Para finalizar este capítulo, quiero mostrarles un fanart que RenMin99 encontró en internet. Aunque no se pudo dar con el/la artista, por supuesto que merece sus respectivos créditos.

 Aunque no se pudo dar con el/la artista, por supuesto que merece sus respectivos créditos

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FUGAZ [Wei Ying x Hua Cheng]Where stories live. Discover now