•27•

200 19 64
                                    

Toda la cena nos la hemos pasado hablando del bebé que viene en camino, un bebé que según Isa tiene 3 semanas ya. Es increíble como el amor entre dos personas puede dar paso a crear algo tan frágil como es un niño. Lo hemos comentado y son jóvenes, pero ellos han querido quedarse con el bebé ya que se sienten lo suficientemente maduros para poder formar una familia ya.

-¿Vas a comunicarlo a tus fans?- pregunta Dani curioso.

Mateo mira a Isa de reojo haciendo una mueca, sus fanes pueden llegar a ser muy tóxicas a veces, no todas claro está.

-Wacho tendré que hacerlo aunque no me hace gracia ni pensarlo- susurra Trueno rascándose la nuca.

-Vamos Mateo, ya lo hemos hablado. Me da igual lo que vayan especulando un puñado de niñatas, te quiero y estoy dispuesta a soportar lo que sea con tal de formar la familia que quiero contigo- mí amiga agarra la mano de Trueno acariciándola.

Miro a ambos con lágrimas en los ojos, a veces creo que me paso de sensible pero me he emocionado ante tal acto. Valentín al notar lo me acaricia la pierna suavemente y se apoya en mi hombro sonriendo. Nuestras vidas han cambiado tanto en todos estos meses que aún no me lo creo.

Las conversaciones fluyen sin tapujos, después de los momentos ñoños llega la hora de la fiesta. Cuando pagamos la cena salimos y nos dirigimos a casa, tenemos que prepararnos para partirla en el club.

Isa entra rápido ya que le estaban dando arcadas, los primeros meses es normal y creo que lo va a pasar mal. Cuando está más tranquila unas a otras nos ayudamos a elegir la ropa y cuando estamos listas nos miramos.

-Buenooo pero que amigas más guapas tengo- dice Isa acercándose a nosotras.

-No está mal este conjunto ehh- digo divertida girando sobre mi.

Llevo unos pantalones de cuero negros con un top rojo que me queda realmente bien y eso que no soy de ropa ajustada. Los chicos se pasan a por nosotras, para no coger los coches iremos andando, total no queda lejos de nuestra zona.

Vamos a uno de los clubs más importantes de aquí de Buenos Aires,  dicen que reservaron hace cosa de un mes ya que está muy solicitado. En la entrada dos hombres enormes nos piden las invitaciones, Trueno saca todas las que tiene, justas para entrar todos.

La música retumba por cada rincón del local, la gente baila sin parar de aquí para allá. A estas alturas van todos colocados o muy borrachos, nosotros solo acabamos de empezar. Ya en el reservado me sirvo una copa bien cargada y le paso otra a Lit que está sentado a mí lado.

-No te dije lo linda que estás hoy ¿posta?- dice divertido abrazándome por los hombros.

-Ni tú, ni nadie- respondo mirando a Wos de reojo -Para una vez que me arreglo-

-No seas salame, siempre estás guapa solo que no lo querés ver- añade él encogiéndose de hombros -Che pues estoy conociendo a una mina y la verdad todo va genial-

-¡Mauro! ¿Porqué no me lo has contado antes?- hago un puchero dando otro trago a mí copa -Te mereces ser feliz cariño, pero tengo que darle el visto bueno, si no...-

Él rueda los ojos al escuchar me y seguimos un rato más charlando. Me cuenta que la chcia es muy buena onda y que en menos de un mes lo trae loquito. La verdad es que Lit cuando se pilla por alguien lo hace por la personalidad, por lo más sencillo, como se muestren ante él.

Sorprendentemente me dan ganas de bailar así que tiró de mí mejor amigo hacia la pista y me pego a él comenzando a mover las caderas. Al poco rato siento unas manos sobre mis caderas que me hacen girarme; Valentín.

-Estabas desaparecido- digo rodando los ojos al notar que me mira divertido.

-Si bueno, estuve con Dani y unos conocidos, ya me tenés todo para ti- se acerca a mí pegándome más a él.

Mauro sigue bailando a mis espaldas y los tres comenzamos un bailes muy sensual, como aquel día en la fiesta de Tobi. Sonrió al recordar aquel momento, estábamos los tres solos y aburridos, los demás a lo suyo. Comenzamos a bailar, éramos el club de la soltería y míranos ahora, dos de nosotros estamos en una relación conjunta y el otro está a punto.

-Wacho esto me recuerda a nuestro primer baile juntos- dice Lit de repente haciéndome reír.

-Eso mismo pensé, salvo que ahora no estamos solteros, bueno no todos- sonrío de lado pasando mis manos alrededor del cuello de Wos.

Nuestras miradas conectan al momento y siento esa chispa como cuando lo vi la primera vez. Sus manos se aferran a mis caderas sin perder el ritmo y con movimientos vacilones acabamos bailando más pegados que nunca. Mauro hace rato que se fue, eso de ser sujetavelas no le hace gracia.

Entre movimiento y movimiento nuestros labios se unen, el alcohol está surgiendo efecto. Acaricio su nuca mientras el beso sube de tono. Sus manos ya no están en mis caderas, ahora una acaricia mi culo suavemente mientras la otra sube dejando leves caricias a lo largo de mi cuerpo.

-Cuando lleguemos a casa no te voy a dejar tiempo ni a respirar lo sabés ¿No?- me pregunto divertido cuando nos separamos.

Asiento divertida mientras me muerdo el labio, ni respirar dice, como que yo a él le voy a dejar. Me centro en mi alrededor por unos segundos y me doy cuenta de que se ha formado un corrillo de espectadores mirando algo en el medio de la pista. Agarro la mano de Valentín y tiro de él hacía allí, me abro paso y lo que veo no sé si debe hacerme gracia o acojonarme.

-Hija de puta- grita Isa pegándole de ostias a una chica.

Me acerco rápido y separo a mi amiga intentando tranquilizar la. La chica se levanta de mala gana y sube su pierna justo para darle una patada en el vientre a Isa, al instante reacciono y me interpongo haciendo que me dé a mí.

-Apártate boluda- chilla la chica cuando ve que no ha conseguido lo que esperaba.

-La que se va a apartar eres tú, como no saques tu culo de mi vista en 3 segundos, ella- señalo a Isa -Será tu menor problema-

-¿Te crees que me das miedo? Pero si sos una debilucha. Las españolitas os creéis demasiado amiga- la chica rueda los ojos acercándose a mí.

-Te lo he avisado- me encojo de hombros.

En un rápido movimiento agarro su mano que estaba apunto de tocarme, se la retuerzo y cuando la giro hago presión en su cuello con mi otro brazo.

-¿Que decías?- suelto una carcajada al ver su cara de susto.

La suelto cuando noto las mando de Isa en mis hombros, la chica sale corriendo con sus amigas y yo me giro suspirando. No me gusta tener que ser así, pero no voy a permitir que jodan a mis amigos.

-Gracias Ro- susurra Isa abrazándome -Si me hubiera dado en la barriga...-

-Oh vamos, no pienses en eso, me dió a mí y estoy como una rosa- sonrío ampliamente y miro de reojo a Valentín.

Está muy serio y no deja de mirarme fijamente, me está poniendo nerviosa. Según Isa, la chica esa es una fan de Mateo, se le ha acercado y la ha tratado de mala manera, cosa que ella no ha aguantado. La fama es algo tóxica, sobre todo cuando la gente tiene la posibilidad de saber dónde estás, como eres... Saben todo de ti.

Al salir del club para volver a casa, camino al lado de Valentín, aún no me ha dirigido la palabra y no lo entiendo.

-Oye, ¿qué te pasa?- pregunto algo nerviosa al verlo tan serio.

-¿Porqué hiciste eso?- me pregunta dejandome atónita -Dejaste que esa tipa te diera un golpe-

-Pues claro, antes que a Isa prefiero que me haya dado a mi- me encojo de hombros rodando los ojos -No solo por ella, por el bebé-

-Te preocupas demasiado por la gente..- bufa él mirándome -Aunque realmente eso es lo que más me gusta de ti, eres tan cercana..-

-No te pongas sentimental aceituna- paso mi brazo por su cintura sonriendo.

El camino de regreso fue corto, pero aún así pudimos hablar un poco de todo. Él realmente se preocupa por mí y a veces yo se lo pongo muy difícil.

IṈEҒΔBLE~WOS (EDITANDO)Where stories live. Discover now