Nuestro Destino ( Sasusaku)

El Anillo

Sasuke se mantenía firme con su sharingan vivo de un color rojo muy fulgurante al igual que su pronunciado rinnegan.

La niebla era muy espesa. El ambiente estaba inmerso en las tinieblas, no se podía apreciar nada, ni la tierra, ni los árboles, ni el cielo. Los ojos sobresalientes de Sasuke eran los únicos capaces de ser distinguidos junto con el susano. Aquel enorme monstruo de chakra morado que protegía fieramente a Ryu y a Sakura, quienes se encontraban en el suelo.

A pesar de que la niebla no dejaba ver nada. Sasuke podía percibir el chakra de sus enemigos y sus movimientos. Agradecía profundamente haber aprendido a desarrollar esa habilidad de sus ojos. Tenía la ventaja de atacar a sus enemigos sin verlos, sino con tan sólo percibirlos.

Sasuke estaba esperando la señal de Naruto para comenzar con la estrategia. Su chakra era el más fuerte e inminente de todos, y se acercaba a toda velocidad como un rayo.

Pocos fueron los segundos que pasaron para que Naruto llegase finalmente al punto donde Sasuke le había indicado.

Él cerró sus ojos y se concentró. Trató de ubicar el chakra más débil de sus enemigos, había localizado al "capo" del grupo desde hace ya rato, monitorando y controlando sus movimientos. Él era la prioridad en ese momento.

Sasuke abrió sus ojos y localizó en pocos segundos a el ninja que buscaba en el punto exacto. Era hora de movilizar el plan.

- Naruto ¿ me escuchas?

- fuerte y claro Sasuke.

Sus voces eran el único contacto ya qué, la neblina era fuerte y no podían distinguirse.

- espera a que te indique.

El punto de chakra que quería localizar se movia de un lado a otro. El ninja parecía conocer la habilidad de Sasuke y quería burlar su orientación, aumentando sus movimientos.

- ¿ crees que no sé que estas esperando a que me acerque para decirle a tu amigo que me ataque? No funcionará - se escuchaba únicamente su voz un poco distorsionada.

Sasuke no respondía, ni se inmutaba, su semblante era más frío y sombrío que la niebla. Su concentración era inquebrantable; él no dejaba que las provocaciones lo desconcentrasen de su objetivo.

Otros dos chakras estaban merodeando de un lado a otro, queriendo confundir su orientación.... Así qué, primero lo primero, después tomarían al pez más gordo.

-Naruto desde allí en donde te encuentras a las dos en punto. ¡ AHORA!

Naruto no responde, ni se distingue entre la neblina. Pasó un segundo y fue más que suficiente para el poseedor del zorro.

El estruendo y un grito masculino se pudo escuchar, siendo acompañado del sonido de un cuerpo inerte caer hacia el suelo.

Sasuke esboza una media sonrisa con ímpetu, pues el plan estaba marchando bien.

- Naruto. El próximo se acerca hacia tu derecha a unos 160 grados.

Pasó poco tiempo para percatarse de que el otro ninja había terminado como su compañero anterior. Su cuerpo cayó al suelo causando un fuerte ruido y un lamento de dolor.

-el próximo eres tu - espetó.

- no me subestimes, no soy imprudente como mis compañeros - se escuchaba la voz masculina.

- Hmph. Eso lo veremos - responde mientras se concentraba en el único chakra enemigo.

- ocultarte en la niebla no servirá de nada ante estos ojos - hablaba con frivolidad en sus palabras.