09

1.9K 338 356
                                    


— Tu hijo.

— Mi... hijo.

Ni él mismo se lo está creyendo, ¿cómo quiere convencer a su propio hermano de que dice la verdad? Una persona que conoce desde siempre, que ha crecido contigo y ha visto todo de ti, quien debe conocer hasta el más mínimo gesto. Soltar una mentira tan fuerte no ha sido una buena idea, bien podría haber escogido una nueva historia que no impactara tanto y que fuera más creíble porque sí, estoy seguro de que no va a tragarse semejante respuesta.

— ¡¿Me estás jodiendo?! —exclama, con los ojos casi saliendo de sus cuencas— ¡Yo tenía razón! —espera... ¿qué?— ¡Sabía que me estabas mintiendo sobre este niño! ¡Por Dios, Jimin, ¿un hijo?! ¡¿En serio?! ¡¿Cuánto tiempo llevas ocultándome esto?! ¡El chico no es un bebé! —se lleva las manos a la cabeza desesperado.

¿Se lo ha creído? ¿De verdad se ha creído que soy el hijo de Jimin? ¡Pero si no había más que duda en su voz! ¿Cómo puede su propio hermano no darse cuenta?

— Ey, te lo puedo explicar, ¿vale? —intenta Jimin tranquilizar al chico alto que cada vez está más irritado. Dice que puede explicarlo pero no continúa hablando y eso hace que ChanYeol se altere incluso más.

¿Debería intervenir?

— ¡No me esperaba esto de ti, ¿sabes?! ¡Mucho menos que me lo ocultaras tanto tiempo! —el chico señala a su hermano como si le estuviera dando la mayor reprimenda de su vida, subiéndose cada vez más a medida que la cabeza de Jimin no hace más que bajar.

Esto no puede acabar bien.

— Perdone —musito, cortando las palabras de ChanYeol—, ¿podría no gritar? —intento ser lo más tierno posible para ablandarlo antes de que la vena pronunciada de su sien estalle— Me... me está asustando —me acerco al cuerpo de Jimin y agarro su mano entre las mías mientras que me oculto detrás suyo, tan sólo dejando mi cabeza expuesta.

Los dos Park me observan desde ángulos distintos, uno sintiéndose algo mal por la reacción que está teniendo frente a un niño y el otro más aliviado por la tregua que le he proporcionado, aunque no sé por cuánto tiempo. De momento ninguno parece querer gastar saliva, ni siquiera se miran y han dejado de mirarme a mí, incluso. Es Jimin quien, después de algunos minutos, decide moverse aunque no hablar, sostiene mi mano con más fuerza y me lleva hasta el sofá donde me pide que me siente y espere ahí.

Incluso ahora, sabiendo que no soy más que un adulto atrapado en el cuerpo de un niño, no deja de tratarme con dulzura y delicadeza. Es más, pretende que me quede aquí sentado mientras él se marcha con su hermano a la habitación de éste para hablar sobre el tema, de alguna forma, protegiéndome para no escuchar algo hiriente. Pero, es estúpido si cree que voy a quedarme aquí de brazos cruzados mientras me pierdo su intensa conversación, así que, una vez cierran la puerta de la habitación, me bajo del sofá y camino despacio sin hacer ruido. Una vez me arrodillo frente a la puerta, pego mi oreja y sonrío triunfante al poder escuchar bien sus voces.

— Tiene ocho años —es lo primero que escucho de la conversación.

— ¡Ocho años! ¡Jimin, no me jodas, ¿has dejado a una chica embarazada cuando sólo tenías dieciséis años?! —palmeo mi frente cuando aún no comprendo porque Jimin no salva la situación e inventa otra cosa. Él sigue con la idea de su primera respuesta.

— Eso parece...

— ¿No lo sabías?

— Eh... no.

— ¿Cómo es posible que no lo supieras?

— Fue hace mucho tiempo.

— ¿Y cómo estás tan seguro de que es tu hijo? —hay un largo silencio antes de que Jimin responda.

The Little( ̶B̶i̶g̶) Cookie [JiKook]Where stories live. Discover now