¿Qué mierda había pasado? Me gire a ver como ambos demonios sonreían de manera complacida.
-Tenía razón- murmuro Raúl quien me aparto de su pecho dejándome sentada en la baja mesa de centro –Creo que me debes una enorme disculpa y aquel dinerito que acordamos cariño- soltó con una sonrisa reluciente casi como la del gato de Alicia en el país de la maravillas.
-Como odio que siempre tengas la razón- bufo mientras que se metía la mano al bolsillo del pantalón –Yo aún tenía fe en que te golpearía- soltó una risita –Te lo merecías por capullo-
-Lo sé, me merecía por lo menos una tunda- sonrió mientras contaba los billetes en su poder.
¿Habían apostado? Los muy bastardos hijos de sus santas madres había apostado a cuesta de mi muy jodida y platónica relación con Kris, habían arruinado cualquier posibilidad (aunque remota) que hubiese podido tener con el rubio que me había robado el corazón.
-Ustedes par de hijos de…-
-Alto ahí, recuerda que tenemos la misma madre- me detuvo mi “hermana” mientras que se encogía en su asiento.
Podía percibir el miedo de ambos. Estaban sorprendidos, bastante a mi parecer porque ambos se observaban entre ellos como si estuviesen a punto de recibir el peor regaño de su vida. Y no estaban tan equivocados.
No les insulte porque la ira que me carcomía las entrañas era tan profunda que los insultos me parecían demasiado suaves, pero si me encargue de atormentarlos y hacer que reflexionaran sobre su actuar. Aunque una vez eliminada la ira de mi sistema, sentí miedo. No quería ver a Kris a la cara, sentía miedo al rechazo.
-______ de verdad lo siento, jamás debí escuchar a la bruja fea esa, lo siento- gimoteo el moreno mientras tomaba mi mano la cual arranque de golpe y alce la vista para dedicarle una gélida mirada.
-Debiste pensar en las consecuencias- estaba siendo demasiado dura, pero se lo merecían, ambos sabían lo inestable y dañada que estaba, también sabían de mis sentimientos por el chino y aun si se pusieron a jugar con mi rota alma.
-¿Me perdonaras algún día?- mi hermana se estaba mordiendo el labio y sabía que estaba arrepentida de todo lo que hizo.
Quizás estaba aburrida. Quizás quería probar su punto, cualquiera que haya sido. Quizás tan solo quería ver nuestras reacciones, al fin y al cabo había obrado de la misma despiadada manera en que suelo hacerlo yo así que no me debería importar. Pero lamentablemente esta vez sí me importaba.
Suspire agotada –Claro que los perdono, pero eso no quita que hayan jugado con algo que realmente me duele- solté cansada mientras que la desesperanza se apoderaba de mí.
Cogí una pequeña chaqueta y salí en busca del rubio. No lo podía dejar abandonado a su suerte, no en un lugar que él no conocía.
Camine por la oscura noche mientras que intentaba aclarar mi mente. ¿De qué? Ni idea, pero eso era mejor que estar pensando en las mil y un formas de desprecio con las que seguramente Kris me observara de ahora en adelante.
-¿Dónde mierda estas?- vi las volutas de mi aliento subir por el frio viento mientras que sentía como mi cuerpo se congelaba lentamente -¿Por qué demonios no saque el abrigo?
El frio era abrumador, pero el miedo a perder a Kris era aún más grande por lo que continúe caminando por la oscura noche aun a riesgo de terminar con hipotermia.
~~~***~~~
¿Qué mierda me hacia esa mujer? Me volvía loco. Hacía que la sangre me hirviera de mil maneras distintas con el solo posar su vista sobre mí y cada vez que el imbécil que tiene de amigo la tocaba hacia que mis más bajos instintos homicidas afloraran.
Pero lo que es peor es que ella no se da cuenta de nada, ella siempre se encuentra ajena a todo y a la vez está consciente de todo.¡¡¡ ES UNA MALDITA BRUJA!!! Viene y me envuelve con sus enormes y expresivos ojos color plata, recordándome a un día brumoso pero lo que en realidad hace conmigo es una tormenta en donde los celos, angustia y el deseo son los principales protagonistas.
MALDITO IDIOTA- bufe mientras que pateaba una pobre piedra que estaba en mi camino.
Era de noche. No sé qué mierda me paso. Cuando vi como él imbécil tenía a ______ prisionera en sus brazos la sangre me hirvió, necesitaba golpearlo y decirle que quitara sus garras de mi mujer. Pero ella no es mi mujer, ella no es más que mi deseo en estos momentos.
-Maldita sea- sisee mientras que pateaba el basurero que estaba frente a mí.
Vague por bastante tiempo por las desoladas calles, el frio comenzó a hacerse presente pero mi cabeza estaba tan caliente por la ira que podría soportarlo bastante bien, por lo que seguí caminando sin rumbo fijo aun a sabiendas de que me extraviaría.
-Y como el patán que soy la deberé llamar para que me venga a buscar- bufe –Bien Kris pero que autosuficiente eres- volví a bufarme irónicamente a mí mismo mientras me acercaba a una pequeña plaza.
-______ ¿Qué mierda me hiciste? Ahora incluso hablo solo y pienso como una adolescente de película Disney- bufe mientras dejaba caer de golpe todo mi cuerpo en una banca.
Alce la vista y no pude evitar sonreí al ver el hermoso cielo despejado que me daba una vista esplendida de las estrellas –Algo así no se consigue en Seúl-
El tiempo comenzó a avanzar haciéndome sentir vacío y frio. Aún más de lo normal.
–Suho ahora es cuando te necesito- murmure mientras sonreía inconscientemente
-Hey grandulón tu misión era confesarte y conseguir de una vez por todas ser un hombre de verdad- imite la voz de Suho quien supongo habría dicho algo como eso mientras sonreía de manera burlona.
No pude evitar reírme.
Me sentía tan estúpido haciendo esto. Siempre molestaba a los chicos por hablar solos e imitar al resto pensando en cómo los aconsejarían y heme aquí haciendo la misma estupidez que yo crítico.
-Bueno Kris es hora de atenerse al plan, te confesaras esperaras por su respuesta y si es negativa la harás cambiar de opinión- solté mientras golpeaba levemente mi rostro con mis frías palmas.
Me volveré loco si sigo sin poder decirle, pero si le digo me volveré loco de igual manera, porque si lo hago me sentiré a la defensiva y si no lo hago me seguiré sintiendo miserable, celoso e impotente porque no soporto el hecho de que tenga tanta confianza con ese tipo, me hace hervir la sangre el hecho de que ella se sienta a gusto con el pero él no es el único, también siento celos de los chicos, no soporto ver como se secretea con Sehun, como juega con Baek o con Kai, como corre a abrazar a Chanyeol o a Lay, siento celos de Chen y de Suho cuando ella les abraza por la espalda para decirles gracias por todo, siento celos de Luhan y Xiumin que hablan con ella como si se conocieran de toda la vida, hiervo el celos cuando Tao y Kyungsoo están con ella, odio que sean tan cercanos sobre todo con D.O y Sehun que son los que siempre están ahí con ella.
Pero yo era feliz al verla sonreír, a pesar de sentir celos, a pesar de que mi corazón dolía como si lo estuviesen pisoteando porque aun así aquel dolor era placentero.
-¿Cómo mierda lograste meterte debajo de mi piel? ¿Cómo lograste derribar todas mis defensas? ¿Cómo diablos hare para no dejarte ir jamás?- suspire y preferí seguir observando el cielo sin ningún pensamiento rodeándome la cabeza.
Había perdido la noción del tiempo y sentía que con cada segundo que pasaba algo dentro de mí se vaciaba, era extraño pero tenía la esperanza de que ______ saliera en mi busca y que no me abandonara. Pero solo me estaba engañando a mí mismo, ella estaba a gusto con el psicólogo o con los chicos y yo solo parecía alterar su estado de ánimo.
-Mierda- me levante de un salto de la banca porque mis pensamientos se habían vuelto autodestructivos pensando en la hada con alma de bruja.
-Aquí estas- soltó con alivio la suave voz que tanto me gustaba oír –Pensé que no te encontraría jamás-
N/A: les dejo cap atrasado porque no tengo tiempo, nada de nada (de hecho ahora me están retando porque debería estar haciendo un trabajo con mi queridos compañeritos xD) y no sé cuándo vuelva a subir cap (lo haré lo antes posible) porque mi vida en estos momentos es una locura :C
Muchas gracias a tod@ por leerme y besotes para todos *O*
