parte 32

1.2K 29 0
                                    


Ya en la estación de mi casa Javi me esperaba en la puerta.

- tranquilo pequeño, todo saldrá bien.

- no lo sé Javi, tengo ganas de ir a tu casa y quedarme hay.

-sabes que no podemos hacer eso, tienes que hacer frente a esto, si lo evades será peor.

Me agarré de su brazo como si fuera un niño asustado en su primer día de clases.
Javi freno y me abrazo con gentilesa, el calor de su pecho es tan reconfortante. Quiero que me alse como bebé en sus brazos. Pero estamos en medio de la calle.

-ven, sigueme, ya se que te va a calmar.

Javi tomo mi mano y me guío hasta un callejón vacío. Caminamos hasta el fondo y el me alzó como bebé en brazos. Mis piernas rodearon su torso y mis brazos su cuello.
Comenzó a caminar de un lado a otro acariciando mi espalda.
Tras un rato llendo y viniendo me entraron ganas de hacer caca, el deseo de hacer era muy punzante y repentino. Sentía que me aria allí mismo.

-Javi.

- si, pequeño?

- tengo ganas de hacer ...del dos, y es urgente.

Javi me bajo y me acerco a una esquina, y de un momento para otro el bajo mis pantalones y mis calzones, alzó mis piernas en el aire y se agachó  con migo en brazos. Estaba en la misma posición en que un padre pone a su hijo cuando le pide de hacer pipi en un árbol.

- has tranquilo, el contenedor te tapa.

Comense a hacer fuerza, Javi estaba viendo mi entrepierna por sobre mi hombro. Cuando salió la primera caca también me salió un chorro de pis largo. Podía escuchar la respiración de Javi en mi oreja, estaba un poco quejoso. Como si estuviera contándole aguantar algo.

-Javi, ya casi termino.

-esta bien mmm no te preocupes.

-que tienes? Peso mucho verdad?

-jaja para nada pequeño, es sólo que ... ahhh... tengo que hacer... y está posición oprime mi vejiga.

-ya termine Javi.

Saco de su bolsillo unos panuelitos descartables me incorporo y me limpio. Incluso me subió el calzón y el pantalón.

-vamos pequeño.

-espera Javi, no tienes que hacer tu también.

- yo... pequeño, no te lo dije antes pero, sufro de vejiga tímida y me cuesta orinar en la calle, sólo puedo orinar en mi baño con total tranquilidad.

-pero, esa noche que yo te estaba viendo.

-era en mi casa y me sentía... tu sabes... cómodo, no creo poder hacer aquí.

-inténtalo, yo me quedo de espaldas así tienes más privacidad.

Javi dibago, pero pude notar que tenía muchas ganas.

- ok lo intentaré-Javi se puso bien en la esquina mientras que yo miraba a la calle. Estuvo un rato- no puedo, no hay caso, debo ir a un baño pribado o no podré hacer.

-Javi relajate, ya saldrá, a demás no hay nadie que te este presionando a hacerlo ya, tomate tu tiempo.

Luego de otro rato Javi salió de la esquina, tomo mi brazo y comenzó a caminar a paso rápido. En menos de dos minutos estábamos en la puerta de su casa.
Mientras el sacaba la llave podía verlo luchando por aguantar.
Una de sus manos estaba en su entrepierna y la otra dándole vuelta a la llaves.

Cuando entramos el apenas podía caminar.

Se dirigió a la cosina y se agachó en una pequeña rejilla, saco su miembro y liberó todo el pis junto con una cara de alivio. Mientras lo veía hacer mi miembro se puso duro.
Me agache junto a él y mientras orinaba comense a acariciarle su miembro.

-pequeño no hagas eso, es peligroso.

En cuestión de segundos su miembro estaba tan duro que corto el chorro de pis.
Javi se volteó a verme y entre jadeos con una sola mano comenzó a acariciar mi entrepierna con mucha delicadeza. Mientras yo le seguía masturbando. Precione un poco la punta con los dedos y eso lo hizo reaccionar más.
El con su mano sigue frotando mi entrepierna pasando por mi miembro y mis testículos. La alejó y se pasó por la lengua su dedo índice y medio.
Luego introdujo dentro de mi calzón su mano mojada, tocando mis testículos con la palma y poco a poco masajeando mi ano con mucho cuidado son sus dedos mojados.
Javi se acercó y me empezó a besar. Sus besos son tan profundos y ricos.
Sin darme cuenta ni sentir dolor el ya había introducido ambos dedos en mi ano. 

-Javi... metela... ahhh.

Javi saco sus dedos, me saco de un tirón la ropa eh introdujo su miembro despacio pero seguro.

-te duele?

-ahhh no, quiero más.

Javi metió todo su miembro y aumento la intensidad de sus embestidas.

-Javi ... ahhhhhh me vengo.

- yo... también ... pequeño.

Acabe primero, y Javi me siguió, pude sentir como acababa dentro mio, no sólo eso, también estaba orinando dentro. Trato de salir lo más pronto posible pero lo retube,  no me molestaba que se orinara dentro mio.

Nos mantuvimos en esa posición un buen rato. Hasta que Javi dijo que era mejor ir llendo a mi casa o se preocuparan. Cuando el salió de mi interior salió también su pis mojando parte del suelo.
Javi me alzó a upa y me llevo al baño donde abrió la ducha.

-será mejor que nos bañemos juntos, así ahorraremos tiempo.

- Si así aremos más rápido.

Ambos nos metimos en la ducha, Javi me enjabono todo el cuerpo y yo le enjabone el sullo.
Mientras me estaba enjuagando pise una parte resbalosa de la bañadera, caí y me golpe el codo contra el borde.

-pequeño, estas bien- me duele mucho el codo y la verdad me están entrando ganas de llorar- tranquilo, ya pasó, no es nada, ya pasó- dijo Javi abrasandome y masageando mi codo lastimado.

-me duele-

-ya ya, no es nada, ya pasará.

El me beso el codo y lo siguió masageando hasta que el dolor se disipo casi por completo.

Luego del susto Javi y yo nos cambiamos y fuimos a paso veloz para mí casa. Al llegar y estar frente a la puerta me paralice. No quería enfrentarme a mis padres, pero sabía que debía hacerlo.
Respire ondo y abrí la puerta.
Ambos estaban parados delante de la mesa, de brazos cruzados y con cara de preocupados más que de enfado.

-hijo, ven, quiero que te sientes a la mesa, queremos hablar con tigo- dijo mi padre

Trage saliva y me senté a la mesa con ellos. Javi se quedó parado sin saber que hacer.

-Javi tu puedes ir a su cuarto, queremos hablar con el en pribado.

Javi paso por detrás mío froto uno de mis hombros y subió las escaleras.

historia omorashi /abdlWhere stories live. Discover now