𝐻𝑒𝑟𝑚𝑎𝑛𝑎𝑠𝑡𝑟𝑜 || MarkSon ✓

catorce.

Al transcurso de esos dos días había llegado la hora de ir a casa. Estaban algo tristes porque tenían que irse. Pero aún así iban a volver de alguna manera u otra, ya estaba dicho.

- ¿Crees que se irán pronto? -preguntó Mark curioso mientras se colocaba el cinturón de seguridad.

Jackson sólo suspiró y se encogió de hombros, hecho andar el auto para finalmente partir de una vez por todas.

- No lo sé, pero no creo que se queden por mucho tiempo. ¿Ya quieres que se vayan? -sonrió algo divertido por la actitud que estaba teniendo.

El pequeño no quería ver a su papá, aunque la señora Sophie fuera amable con él. Realmente no era lo mismo, anhelaba para que algún día el que tuviera esas actitudes fuera más que todo su padre. La indiferencia duele y Mark era testigo de ello.

- Simplemente quiero pasar más días como estos con usted, es...relajante hyung -abulto los labios.

- Te lo dije Markie, vamos a venir más veces, es una promesa y tú sabes que lo cumpliré -guiñó un ojo relamiendo sus labios en el acto.

Eso era lo que esperaba el más bajito, solamente quería pasar tiempo con Jackson.

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Los rostros de los cuatro al reencontrarse despues de un tiempo eran de "felicidad" sonreían de oreja a oreja o al menos más Jackson, Mark y Sophie porque el señor Tuan... tenía más una mueca que otra cosa.

Estuvieron una hora sentados en el sofá contándose todo lo que habían hecho, los padres de ambos chicos hacían preguntas por lo que éstos dos no tenían ningún problema con contar todo, todo a excepción de lo que ellos dos hacían. Jackson estaba seguro que sí mencionaba algo al respecto, al menos una mínima referencia la cara de su madre sería todo un poema. Aún así, no dejaba de acariciar al menor, corresponder los abrazos que le daba a cada momento o sonreírle de vuelta cuando Mark lo hacía.

- Veo que finalmente han logrado llevarse bien, me alegra ver eso -dijo la señora Sophie con una amplia sonrisa en sus labios mientras se ponía de pié para ir a encargarse de la cocina.

Jackson se giró rápidamente con intención de responderle con algo de travesura. Después de todo divertirse un rato no venía mal, ¿O sí?

- Más bien de lo que crees, Markie es un experto para muchas cosas mamá. ¿Porqué no me lo dijiste? Ahora...me arrepiento tanto de haber perdido el tiempo llevándome mal con él -hizo un puchero.

Su madre volteó lentamente con su rostro inexpresivo, aunque sonrió levemente y finalmente rió antes de responder.

- ¿A sí? Mira tú...-murmuró.

Solamente dijo aquello para volver a su objetivo. El ambiente de una cierta manera se tensó por el silencio que quedó en el lugar. Pero el señor Raymond decidió en romper el silencio:

- ¿Qué hicieron mientras que nosotros no estábamos? -preguntó interesado y alzó una ceja.

Mark de inmediato se emocionó por la pregunta de su padre, eso significaba que le importaba como le había ido despues de todo.

- Lo que dijo Jackson hyung antes, pero ¡Estuvo genial! Nos divertimos mucho, había pasado tiempo desde que fuí a un lugar tan maravilloso como la playa papi, un día también deberíamos ir, todos juntos, ¡Sería demasiado divertido! -exclamó con entusiasmo dando pequeños aplausos ensanchando la sonrisa que provocó que mostrará todos sus perfectos y blanquecinos dientes.