La Guardería

¿Corazón roto o suceso necesario para cumplir tu destino?

Ese año fue de muchos cambios, cambió sus lentes por lentillas de contacto para las presentaciones, tenía una muy importante para finalizar el año en la clase de danza contemporánea, Jimin deseaba tanto seguir su sueño que practicaba y estudiaba todos los días, y le pedía a su maestra de danza tips para mejorar sus pasos y su presencia en escena, sabía que faltaba poco para solicitar un espacio en la escuela de artes.

Tae y Cookie por su parte practicaban más relajadamente, Cookie había entrado a competencias deportivas en su escuela y le iba muy bien, por las tardes libres visitaba a Tae y practicaban pasos de baile y jugaban videojuegos, a veces cuando Jimin podía visitaba a Tae y pasaba un rato con ellos.

Faltando un par de meses para terminar el año enviaron sus solicitudes.

Cuando estaba por terminar el año volvieron a encontrarse con Hobi que visitaba a su familia. Tae estaba feliz, ahora que le faltaba tan poco para ir a la capital podría vivir con él, para su sorpresa Hoseok se portó distante y no parecía tener interés en darle de su tiempo, Tae se preguntaba si ya no quería estar con él y mientras más insistía en hablar con el Hoseok esté más parecía alejarse.

Una vez que Hoseok subió a su cuarto supieron por su hermana que ahora estaba comprometido con una Omega de su campus, los tres se sorprendieron bastante pero antes de poder reaccionar Tae corrió a su casa al escuchar la noticia.

- ¿estás seguro que fue lo mejor? Se veía muy triste- le preguntó la chica a Hoseok cuando se marcharon los chicos, esté asintió - no me siento aún listo para tomar un Omega, no tengo que ofrecerle, he cuidado de no marcarle para que no sea peor, sé que quiere irse a la capital conmigo pero no es posible aún, si en verdad estamos destinados así será, nuestros caminos volverán a encontrarse. - ella lo miró con desaprobación, no estába de acuerdo en mentir y tomar una decisión tan egoísta y definitivamente no le sería fácil olvidar el rostro de ese pequeño omega con sus ojos vidriosos y su boca rojiza tratando de contener un inminente llanto ante la inesperada noticia.

Para Tae todo su mundo parecía derrumbarse, ni siquiera se dió cuenta de que Cookie lo seguía para tratar de consolarlo.