Prólogo

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Pov Calle.

Una vez alguien me dijo que si deseabas algo debías dejarlo ir, que si ese algo era tuyo volvería a tú lado, y si no volvía no valía la pena.

Nunca había puesto atención a esas palabras, ahora que iba en un autobús buscando lo que realmente amaba, sonreía al saber que eso era cierto, bajé mi vista y vi aquél objeto que tenía entre mis dedos.

Una moneda.

Una moneda que en una noche había puesto mi mundo de cabeza.

¿Raro? Puede ser, pero para mí significaba mucho más.

Aunque la había visto en las manos de quién me la entregó, jamás la había observado con atención, al darle la vuelta sin querer solté una risita.

La moneda tenía la misma insignia del otro lado.

«Jamás pierdo» recordé sus palabras y lo bien que quedaban con el momento.

Miré por la ventana del autobús y vi que había llegado a mi destino, me levanté del asiento y me dirigí a la salida, observé aquél muelle que había sido una de las mejores anécdotas en mi vida, con la última esperanza dentro de mi pecho fui en busca a lo que me pertenecía.

El día estába nublado, había un poco de frío ya que había llovido recientemente, mis manos sudaban frío, mi corazón palpitaba con velocidad, mis dedos no dejaban de jugar con nerviosismo con aquélla moneda.

Entonces ahí estaba...

Entre la neblina que yacía en el lugar con una ligera ventisca de sensación cálida, con sus codos apoyados en las rodillas viendo a la nada, cuándo podía observar aquél inmenso mundo de agua que tenía enfrente.

En silencio fui y me senté en el otro lado de la banca de madera color gris que había en el muelle, pequeños fragmentos de recuerdos vinieron a mi memoria.

Salí de mis recuerdos, no me atrevía a decir nada, los nervios me comían y la persona al otro lado podría ser cualquier otra persona, pero tenía la esperanza de que no fuera así.

— ¿Alguna vez te he dicho qué te amo?— susurré.

Pegué mi mejilla a la madera esperando una respuesta.

— No, nunca. — dijo su voz, sonreí sintiendo miles de sensaciones en mi cuerpo.

— Pues así es. — contesté.

Coloqué mi mano arriba de mi cabeza esperando para sentir su tacto y así pasó, porque sentí cómo sus dedos rozaban los míos entrelazándolos al final.

Sonreí sabiendo que esto era un nuevo comienzo.

El comienzo de un camino que faltaba recorrer, sí, ahora sabía el significado de las palabras que dije anteriormente. Ahí en un muelle con historia para mí, lo descubrí con la persona correcta y con una historia que nadie lo vería normal.

¿Pero en realidad hay qué ser normal?

No, claro que no, lo diferente es mejor que cualquier otra cosa en el mundo, y eso me pasó a mí.























































¡He vuelto!

Quiero decir tres cosas sobre este fic.

1). El fanfic es corto y es una adaptación sobre una película (se llama igual al fanfic, la recomiendo si no la han visto), solo que con un toque de mis ideas.

2). Este fic tenía mucho tiempo de haberse subido, pero por algún motivo me la bajaron, así que aproveché eso y la edité para resubirla nuevamente.

3). Disfruten la corta lectura cómo yo lo hice al leerla y editarla.

Propuesta Indecorosa || TerminadaWhere stories live. Discover now