Capitulo 18

1K 59 1
                                    

MIA O'CONNER.

¿Nunca sintieron esa necesidad de contarle a alguien lo que les pasa?

¿De sacarlo de dentro tuyo porque sentis que no hablándolo te va a asfixiar?

Bueno me estaría pasando en este preciso momento.

De alguna manera no lo puedo hablar con Maia, Liam o Noah, defienden a mi papá pero ninguno se pone en mi lugar, ninguno ve lo que me está pasando, ninguno ve como siento.

No sé si lo estaré haciendo bien o si después me voy a arrepentir de esto pero necesito hablarlo con alguien ahora porque siento que voy a explotar.

—No sé por donde empezar—admito.

—Por donde creas que es donde surgió el problema—me aconseja.

Respiro ondo ya que siento que mi garganta se cierra de a poco.

—¿Te cuento algo raro?—le digo sonriendo sarcásticamente con la vista al frente—. No le tengo miedo a nada.

No estoy segura si habré arrancado bien pero ya está.

—¿Nada?, ¿bichos, payasos, oscuridad?—me pregunta algo divertido.

—Nada. En realidad si... al abandono—digo esta vez mirándolo.

—¿Cómo?, ¿por qué?

—Cuando tenía 5 años mi mamá me abandonó, sin dejar una carta, un aviso, nada. Simplemente se fue, nos dejo y sin dar un porque—se me cae una lagrima pero al instante la limpio—. Crecí sin papas de alguna manera.

—¿Pero y tu papá?

—Trabajando, siempre trabajando. Nunca nos prestan atención, era como si también nos hubiese dejado ya que no existíamos para él—siento como me voy rompiendo de a poco nuevamente—. Por suerte lo tenía a Liam. Él teniendo siete años me protegía, me hacía reír, me cuidaba, me contaba cuentos a la noche—digo recordando—. Parte de mi infancia fue feliz gracias a mi hermano. Él se quedaba despierto para contarme alguna historia y se quedaba esperando a que yo me durmiera. Pero muchas veces se dormía antes que yo, sin leerme nada.

—¿Y qué hacías para dormirte?—me pregunta sin niguna expresión en el rostro.

Supongo que sabe que no me gusta dar lastima y prefiere demostrar que no le doy, cuando en realidad sé que si. Pero de alguna forma eso no me detiene a seguir contando.

—Inventaba historias.

—¿Sobre?

—Porque mi mamá nos abandono. Trataba de buscar muchas razones para entender lo que había pasado. Algunas eran felices y otras tristes. Por ejemplo, una feliz era que ella era re buena y que nos adoraba pero tuvo un accidente y murió.

—Tampoco que sea feliz eso.

—Si lo es porque eso quiere decir que nos amaba, nos queria.

—¿Y una triste?

—Una de esas era donde era mala, no nos quería y nos abandonó. Pero más que nada por mi.

—¿Y por qué vos?—dice confundido.

—No lo sé, es lo que siempre sentí. Que de alguna forma le cause problemas o algo y eso hizo que por mi culpa Liam se quedara sin una mamá.

Nos quedamos en silencio unos pocos minutos.

—¿Nunca la buscaste?

—Si lo hice. Les pague a detectives de todos los países para que averigüen en hospitales, hoteles, casas, hasta bajo de una piedra, en cualquier sector. Pero no encontré nada, como si no existiera. A veces me ponía a pensar ¿y si se cambio el nombre para que nunca la encuentre?—escucho como mi voz se va rompiendo poco a poco pero de todas formas trago el nudo de la garganta y trato de seguir—. Casi toda mi vida la busqué. Yo necesitaba saber que cuento era el real porque me habré inventando miles pero los que más me recordaba eran esos dos. De todas formas ella no fue la única que me dejó, fue la primera pero no la última. En mi vida habré tenido varios amigos pero de la misma forma, de un día para el otro se alejaron de mi sin dar una razón, solo me dejaron de lado. Y lo peor es que eso me hacía creer que la historia triste que me inventaba sobre mi mamá tenía sentido y que también me pasaba con mis amigos.

Narco Barbie ✔️Where stories live. Discover now