CAPÍTULO 6

155 16 3
                                    

Soo Ah se sentó en la cama de Donghae con la mochila en manos. Sacaba su ropa y su diario para escribir como todos los días. Le pregunto a Donghae si podía usar el baño. El sin pensarlo le dijo que si. Ella entró al baño, se removió su ropa y entró a la ducha luego de haber abierto la regadera y colocar el agua caliente.

Donghae se acerco a la puerta luego descacha algunos sollozos dentro del baño y s preguntaba ahora por qué ella lloraba. La conocía tan bien, sabia que ella se echaba a llorar mucho dentro del baño para evitar que la escucharan, pero él siempre la escucho. Abrió la puerta despacio y vio su hermosa silueta, aquella silueta que tanto había extrañado tener cerca. Cerro la puerta una ves que ella cerro la regadera. Camino hasta el sillón y se sentó, pero unos segundos después se acordó de algo. Donghae se levanto del sofá y camino hasta la nevera. Saco yogur de vainilla, fresas, chocolate, algunas almendras y por su puesto miel. Coloco esos ingredientes en dos platos un poco hondos y los tomo en sus manos una ves listos y esperar a que ella saliera.

—¿Y eso?— pregunto ella una ves salió del baño.

—Es Yogur con fresas, chocolate, almendras y miel— le indico Donghae extendiéndole el plato para que lo tomara.

Donghae vio como ella se relamió los labios.

—¿Como supiste que es mi plato favorito?

—No lo supe... También es mi favorito.

Donghae trago hondo. Quería ver al menos o mejor dicho, quería corroborar si estaba mintiendo. Sus gestos no mienten, el mas que nadie la conocía mejor que nadie.

—¿Porque hace unas horas me dabas una mirada dura?— le pregunto Soo Ah—. Y ahora... ahora no sé lo que veo.

—No se moleste en ver lo que hay mas allá de mi mirada.

—Usted es algo...— se detuvo un segundo.

—¿Algo que?— cuestiono.

—Nada, olvídelo, no es nada... Yo mejor me voy dormir. Mañana una ves me levante me iré.

Donghae asintió.

Jung Ye Ryun

Acostarme y pensar que mi amiga este bien me hace sentir mejor. he conseguido la dirección de su estudio de modas. Estoy emocionada por verla, y aunque sea saber qué paso aquel día. Me quede tan preocupada todo este tiempo que finalmente decidí viajar aquí a Corea. Mi pequeña tiene casi los tres años estoy deseosa de poder ver su reacción cuando la vea. Mañana muy temprano iré a visitarla. Lo único que me tiene preocupada es que escuche algo que no me agrado en lo absoluto y no sé como podré reaccionar a eso.

—Mi amor, tienes que dormir...— le dije a mi pequeña—. Mama tiene que madrugar.

Mi pequeña solo sonreía. Es tan tierna como mi mama. Su padre es un desgraciado que cuando supo que quede embarazada se largo y me dejo sola con ella.

—Vamos mi amor, a dormir, por favor.

No tuve que discutirlo un poco más con ella. Simplemente se acostó a mi lado y tomo su peluche y lo abrazo. Ambas nos acostamos, luego de un rato nos habíamos quedado profundamente dormidas.

Lee Donghae

Daba vueltas en el sofá. Me sentía incómodo, no podía conciliar el sueño. Hace mucho que no estaba en este apartamento y me sentía extraño, pero ala misma ves siento como si todo hubiera vuelto a la normalidad, pero no es así. Desaparecí todos aquellos pensamientos y me levanté e hice ejercicio para mantener mi mente ocupada con otras cosas. No quería tenerla en mi cabeza 24/7, así que debía hace cualquier cosa por sacarla de allí.

Más allá de tu miradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora