11.Elizabeth Cáliz, es..."WhiteBird"

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CAPITULO 11
ELIZABETH

La Confución, la tristeza, el desconcierto, el amor y el miedo, bailaban en mi interior removiendolo todo a su paso.

Sin palabras, sin aliento..., así era como estaba, de esa manera me sentía. ¿Cómo era posible que él me haya amado todo este tiempo y no me lo haya dicho nunca?.

El enojo pasó a formar parte de la danza de sentimientos en mi interior.

Egoísta, él había sido un total egoísta al amarme en secreto todos estos años sin hacer nada al respecto, pero ya no había nada que pudiera hacer para volver el tiempo atrás, lo único seguro ahora es el presente.

Después de haber escuchado su declaración de amor.... Después de haberlo besado, no había sido capaz de decir nada más. Lo amo estoy segura, pero también sé que el miedo que siento dentro es más fuerte que cualquier otro sentimiento. Lo sé, soy una cobarde y quizás un tanto estúpida..., pero es que no hay forma de sacar todos estos sentimientos fuera de mi. Definitivamente la vida era mejor cuando nada pasaba en ella, cuando sólo fuimos mi computador y yo.

—Lizy, hija ¿Cómo te fue en la escuela? —Me preguntó mi madre sonriente al verme entrar por la puerta de la casa—. Te retrasaste un poco ¿Todo bien? te noto un poco pálida.

—Estoy bien. —Le mentí tragándome las lágrimas, que sabian amargas. Subí directamente hasta mi habitacion sin darle más tiempo a mi madre de seguir cuestionandome.

Cerré la puerta de un duro golpe y arrojé mi mochila por alguna esquina sin percatarme realmente de donde había caído. Me senté en mi cama y tomé un largo respiro mientras dejaba salir de mi las lágrimas de dolor contenidas dentro de mis ojos.

—¿Cómo es posible que tú siendo mi más hermoso recuerdo a la vez seas el más doloroso?—Pregunté mirando la foto de Nicole encima de mi mesita de noche—. Es un extraño sentimiento, porque yo no quiero olvidarte, no puedo hacerlo ¿Cómo olvidar las mejores cosas de mi vida? Lo único que quiero es que tu recuerdo deje de doler tanto ¿Llegaría el día en que eso pase? —Me quedé mirando su foto un momento más como si existiera alguna posibilidad de que ella contestara, pero era obvio que no lo haría.

Luego de estar unos minutos desahogando mi interior, decidí darme un baño y pensar.... Como si pensar fuera a hacer alguna diferencia ¿Qué se supone que debo hacer ahora? ¿Como voy a poder vivir sabiendo el hecho de Mason "Me ama"? Después de ducharme, comer algo y estudiar para matar un poco el tiempo, decidí irme hasta casa de Sophia, con alguien debia de hablar sobre el tema, y ese alguien es definitivamente ella.

—Voy a casa de Sophia. —Le avisé a mi madre.

Eran aproximadamente las 5:30 de la tarde y empezaba a caer la noche acompañada de una oleada de frío.

Me tomó un rato y un poco de esfuerzo pero al fin pude conseguir un taxi que me llevó hasta sophia.

—¿Hola? —dije después de tocar el timbre en casa de Sophia— ¿Está Sophia en casa? —Un hombre de unos veinte o veinticinco años de edad fue quien abrio la puerta... Claro de seguro debe de ser Danilo.

—No no está, pero no debe de tardar en llegar ¿Quieres esperarla? entra. —Su voz estaba llena de amabilidad y me pareció genuina y sincera. El chico de cabello y ojos tan negros como la noche, y estatura alta y fornida me guió hasta la sala de la casa.

—¿No está la madre de Sophia? —pregunté una vez estuvimos dentro y sentados en la sala.

—No, está aún en el trabajo, solo estoy yo en casa, pero no te preocupes no tardan en llegar, por cierto, mi nombre es Danilo.

—Ah, cierto tu eres "Dani" el "Padrastro" de Sophia —dije en un tono un tanto sarcástico o hasta irónico.

—Sí, soy yo, aunque pues, no me gusta que me llamen "Padrastro", estoy cansado de decirle a Verónica que por favor no me llame así... Sé que no le caigo para nada bien a Sophia, ella piensa que solo quiero aprovecharme de su madre pero eso no es cierto, yo sí la amo. —Lo miré directo a los ojos y efectivamente pude notar sinceridad en ellos.

—Sí, estás en lo cierto Sophia no te quiere para nada, pero debes de entender que es duro para ella tenerte cerca, sinceramente creo que quizás ella piensa que tú le vas a robar el cariño de su madre.

—Sí, la entiendo, pero también quiero que ella nos entienda a su madre y a mí, en serio amo a Verónica y me gustaría poder llevarme al menos un poco mejor con Sophia

—Pues, debo decir que no eres tan super ogro como te imaginaba, a lo mejor Sophia sólo necesita tiempo para conocerte mejor y al menos llegar a tolerarte.

—Eso es lo que más quisiera, ella no me ha dado la oportunidad de explicarle lo mucho que amo a su madre. Sophia solo me evade cada vez que tiene tiempo de hecho ahora mismo no está en la casa simplemente por no estar conmigo. A estado saliendo todas las tardes a estas horas con un tipo solo para evitarme.

—¿Con un tipo? ¿Qué tipo? —pregunté descocertada.

—No lo sé, creo que su nombre es... Brandon o algo así.

—No puede ser. —Danilo me miró con el ceño fruncido un momento mientras que yo trataba de asimilar lo que acababa de escuchar.

—¿Que pasa? —Preguntó.

—No, no es nada, es solo que me parece extraño que Sophia no me haya dicho que salía con ese tipo, digo, con eso de que somos "Mejores amigas" pensé que debiamos de contarnos todo, pero ahora me doy cuenta de que no es así.

—Lo siento, no debí decirte... Sophia me va a odiar más ahora que sepa que hable de más.

—No, no te preocupes,no hablaste de más... Mas bien ella hablo de menos. —Sonreí sin humor, mientas que Danilo sonrió nervioso.

—¿Quieres algo de tomar en lo que la esperas? —Preguntó y se paró en dirección a la cocina.

—Sí, solo un vaso con agua —dije sintiendo como la ira me llenaba... Sophia ¿Cómo es posible que esté aún con ese tipo y no me lo haya contado? Mientras que Danilo buscaba el agua en la cocina, la puerta de la casa se abrió y pude ver a la pelirroja atravesar la puerta.

—¿Lizy? ¿Qué haces aquí? —dijo evidentemente sorprendida.

—Nada, solo pase a tomar el té con "Dani" —dije con un poco de sarcasmo.

—¿Fué un chiste o algo? ¿O en serio conociste a ese fanfarrón? —dijo Sophia mientras se sentaba a mi lado en el sofá, dejando caer su bolso de forma ruidosa sobre la mesita del centro.

—No es tan fanfarrón, o al menos es buen actor... Deberías de darle una oportunidad.

—¿Estás drogada o algo? ¿Oportunidad? ¿En serio?

—Es buena gente, te lo digo en serio Sophia, conócelo un poco ¿Sí?

—No prometo nada.

—Aquí está tu agua —dijo Danilo entrando en la sala nuevamente con un vaso de cristal lleno de agua fría. Pude notar un poco de nerviosismo y sorpresa al ver a Sophia

—Hola Sophia.

—Hola —respondio sophia sin mirarlo siquiera.

—Gracias por el agua. —Le contesté y tomé el vaso tratando de ser amable con él. Danilo se sentó en uno de los muebles de la sala quedando de frente a Sophia.

—¿No tienes algo que decir Sophi? —Pregunté y la miré mientras tomaba un nuevo trago de agua.

—¿De qué hablas?

—Pensé que le dirías algo a Danilo... ¿Cierto que vas a intentar conocerlo y llevarte mejor con él?

—Lo intentaré —dijo ella pero no sin antes fulminarme con la mirada.

—¿Podemos ir a hablar a mi habitación?

—Sí, tengo mucho que hablar contigo...

Me puse de pie para seguirla hasta su habitacion

—Fue un placer Danilo —dije y él sonrío en respuesta.

Entramos en la habitación e inmediatamente me senté en su cama y la miré fijamente, mientras que ella se miraba al espejo.

—¿Cuando pensabas decirmelo? —Le pregunté de repente.

—¿Que cosa? —respondio sin dejar de mirarse al espejo.

—¿Qué cosa? ¿Tienes el descaro de preguntar "Qué cosa"?

—No tengo idea de lo que estás hablando Cáliz.

—Tú y Brandon ¿Cuando me lo ibas a decir? —Al escuchar su nombre sé que se puso nerviosa y dejó de jugar con su cabello y su reflejo en el espejo.

—Lizy, yo... —Ella empezó a acercarse hacia mi, hasta sentarse a mi lado en una esquina de la cama.

—¿Tú qué? —dije fríamente.

—No consideré importante decírtelo.

—¿No consideraste importante decirle a tu supuesta mejor amiga que sigues viéndote con un tipo que te drogó y te abandonó en un bar a tu suerte?

—Es que no tiene mucha importancia Lizy, además sabía que te ibas a enojar si te decía.

—No, mas bien estoy enojada porque no confiaste en mi Sophia... Esta es la razón por la cual no quería tener amigas. Me gusta que confíen en mi y tú no lo hiciste.

—Lizy...Tú si eres mi mejor amiga y confío en tí... Pero una amistad no sé trata de saber todo lo que hace el otro, sé trata de respetar las decisiones de los demás y apoyarlos siempre y cuando esa persona desee ser apoyada. Brandon me explicó que esa noche se dejo influenciar por sus amigos, él tampoco tomaba drogas y lo hizo esa noche así que se puso tan mal que tuvieron que llevarlo a su casa, por eso es que me dejó en el bar. Al día siguiente de la fiesta él me llamó y me explicó todo, al principio no le quise creer, pero sé que está siendo honesto Lizy, y quiero al menos conocerlo antes de juzgarlo. ¿Me entiendes ahora?

La miré un segundo reflexionando un poco acerca lo que dijo. Quizás ella tiene razon yo no soy una experta en amistades, quizás si deba de darle su espacio y no rendirme ante el primer obstáculo, después de todo la vida no es color de rosa.

—¿Estás segura de que te dijo la verdad?

—Sí, Lizy, lo estoy, sé que él fue sincero, se asustó mucho cuando me vio tan mal y no tuvo más remedio que salir corriendo, pero sé que es una buena persona.

—Pudieron haberte hecho mucho daño ese día de no haber sido por mí.

—Lo sé —dijo y me abrazó—. Y por eso eres lo que más quiero... Dale una oportunidad a Brandon y yo se la daré a Danilo ¿Estamos?

—Bien es un trato. —La abracé devuelta, Mientras la abrazabá, algunos recuerdos llegaban a mi mente, recuerdos de momentos en los que había sido feliz. imagenes de Nicole y yo, riendo, jugando... Abrazándonos y apoyandonos. Por otro lado mi mente vagó por lo recuerdos de esta tarde. Los labios de Mason en los mios, la manera en que se había sentido había sido increíble e indescriptible. Empecé a llorar en el hombro de Sophía.

—Lo amo... —Susurré.

—¿Qué? —dijo Sophia, soltándome y mirándome a la cara.

—Amo a Mason Wolf, y no quiero amarlo, no quiero. —Casi grité perdiendo el aliento

—No entiendo nada ¿Porqué no quieres? ¿qué pasó?

—Él me dijo que me ama, que lo ha hecho desde hace años pero no había tenido el valor para decírmelo... Sé que tambien lo amo, pero me asusta quererlo tanto, tengo miedo al sufrimiento.

—Sé que él no sería capaz de dañarte Lizy... Siendo sinceras yo siempre noté que él estaba enamorado de tí, es casi un secreto a voces ¿cómo es que no lo notaste?

—No lo sé, jamás se me paso por la cabeza algo así... No quiero amarlo, porque si lo amo estoy segura que dolerá tanto cuando lo pierda.

—No tienes porque perderlo ¿O pretendes estar sola toda la vida consumiéndote en tu dolor?

—No lo sé, lo único que sé es que no puedo amar a nadie hasta no olvidarla por completo, o al menos aprender a recordarla sin que duela tanto.

—¿Olvidar a quien?

Tomé aire y comencé a contarle a Sophia toda mi historia con Nicole...Todo, desde cuando la conocí, los planes que hicimos juntas, el momento en que se fué, hasta lo de mis terapias para poder "Superar su partida", se lo conté todo mientras ella escuchaba con atención e interfería en algunas ocasiones.

MASON

Las letras rojas de su apellido escritas en el sobre amarillo, resplandecían encima del escritorio de mi habitacion... No, aún no había tenido el valor de abrirlo.

Me había pasado horas tratando de convencerme de que sería buena idea leer lo que decía pero ¿Y si eso solo hace que se enoje conmigo? No creo que a ella le guste mucho la idea de alguien metiéndose en sus asuntos más íntimos pero ¿Y si puediera ayudarla?

Me paré de la cama como impulsado por una fuerza mayor, y tomé el sobre en mis manos. Lo abrí y observé su contenido detenidamente. En la parte superior y sujetada con una grapa, estaba una foto de Elizabeth y no pude evitar sonreír al verla.

Me senté en mi cama con el sobre en las manos y tomé la primera hoja para empezar a leerla. Me tomó aproximadamente dos horas poder leer y entender todo el diagnostico... En resumidas cuentas, la razón por la que llevaron a Lizy al psicólogo se debía justamente a la partida de su amiga..., Nicole. Ella se había ido sin siquiera despedirse de Lizy, cuando apenas tenían unos trece o doce años de edad, después de haber sido amigas toda la vida, después de haber vivido un monton de años juntas, y no solo años sino mas bien, momentos.

Entonces fue cuando pude entender su comportamiento a lo largo de los años... Ella había vivido todo este tiempo con miedo a sufrir, miedo a querer a la gente, con miedo a que la destruyan. Al leer el diagnostico pude comprender el porque de sus acciones y su comportamiento hace unas horas en el parque... Claro antes de abrir un nuevo ciclo en su vida, debía de cerrar uno que le había causado ya mucho daño.

Me quedé un momento más reflexionando lo leído y me juré a mi mismo que eliminaría en ella todos los miedos y le demostraría que la vida está hecha de decepciones, pero también de momentos felices, que somos hijos tanto de la tristeza como de la alegría, que así como lloramos tambien debemos reír, que así como amamos tenemos derecho a ser amados... Sin miedo, sin temor alguno.

—Te voy a dar tanto amor que será imposible que tu corazón abarque otro sentimiento...Te voy a demostrar que sí puedes ser feliz entregándole amor a alguien. —Susurré mirando su foto, como si ella fuera a escucharme.

 Yo me encargaría de enseñarle a Lizy las cosas que tiene la vida, las bellas y las horribles, todo... Después de todo yo soy un experto en decepciones y aun así sigo creyendo que hay oportunidad de recibir amor.

Mi celular sonó y fuí a contestar alejando de mis ojos las ganas de llorar.

—¿Qué pasa Jake? ¿Todo bien?

—Sí, solo quería saber si estás bien ¿Ya tienes alguna idea de lo que le pasa a Lizy?

—Sí... Ya lo sé y creo que sé como puedo ayudarla.

—¿Cómo?

—Luego te explico ¿Sí?

—Bueno, está bien. Hablamos después, estoy de camino a casa de Cath.

—Dale saludos de mi parte —dije antes de colgar.

Guardé los papeles en uno de los cajones de mi mesita de noche y me dirigí hasta la cocina en busca de algo de cena. Al llegar encontré a mi padre preparando algo... Me sorprendí de verlo allí por lo general a esta hora, aproximadamente las diez de la noche, él ya está en su cuarto dormido, pero más me sorprendió ver que estaba cocinado algo y que no eran macarrones.

—¿Nueva receta? —Pregunté mientras me sentaba.

—Compré algunas cosas para cocinar —dijo sin mirarme—. Ya me harté de los macarrones desabridos. —No pude evitar reir un poco.

—Yo también —contesté.

Mi padre puso un plato de sopa en frente de mí y luego se sentó también en la mesa. Probé la sopa y debo admitir que sabía estupendo.

—Mason... No sé si lo notaste pero ayer cuando me dijiste que si dentro de mi había al menos un poco de amor por tí te lo demostrara callándome y dejandote en paz... —Hizo una pausa y comió un poco de sopa—. Yo Callé y te deje en paz...

***

—¿Ahora si me contaras cual es tu plan para ayudar a Lizy? —me preguntó Jake al día siguiente mientras íbamos de camino a la escuela.

Le conté acerca de Nicole y de porqué Lizy temía tanto querer a la gente... Por miedo a ser lastimada.

—¿Y cual es tu plan?

—Necesito encontrar a Nicole.

—¿Para qué?

—Estube investigando en Internet toda la noche y llegué a la conclusión de que es lo mejor, ella necesita hablar las cosas con Nicole, necesita cerrar ese ciclo para seguir adelante.

—¿Y como se supone que la vas a encontrar? Según lo que dices ella se mudó fuera del país y tu no tienes ni idea de donde está, solo sabes su nombre y nada más. Va a ser muy difícil.

—Nadie dijo que sería fácil, pero sé que lo puedo lograr Jake... La voy a encontrar, estoy seguro.

***
El resto de la semana había sido un total tormento, había cruzado muy pocas palabras con Lizy, y no la había visto fuera de la escuela. Casi no había dormido buscando en internet alguna señal de Nicole pero nada aparecía.Tampoco había sabido nada de "WhiteBird".

Era ya sábado en la mañana y decidí comunicarme con Sophia... Quizás ella me podría ayudar en algo, quizás si le contaba mis planes ella me ayudaría a llevarlos a cabo.

El timbre sonó y fui a abrir la puerta.

—Hola Mase —dijo Sophia cuando abrí la puerta. Su cabello se veía casi como fuego iluminado por el sol. Le sonreí y la hice pasar.

—¿Cómo estás Sophi? —Pregunté mientras nos sentábamos en el sofá.

—Pues la verdad estoy muy intrigada ¿Para que me pediste que viniera?

—Bien iré al grano ¿Lizy te ha contado algo sobre mi?

—Pues... —Ella dudó un poco.

—Confía en mi.

—Pues sí... Me lo contó todo, y debo decir que note tu amor por ella desde el día en que los ví juntos por primera vez. —Sonreí un poco antes de hablar nuevamente.

—Sophia, yo sé que Elizabeth tiene miedo de que le haga daño pero también sé que no es su culpa estar así... Ella tiene un problema y eso solo va a resolverse en el momento en que ella cierre su ciclo con Nicole, solo va a resolverse cuando la vuelva a ver.

—¿Sabes acerca de Nicole?

—Leí unos papeles sobre Lizy, los papeles y archivos que guardaba la madre de Jake, con eso de que Lizy era su paciente. —Me daba un poco de pena admitir en voz alta el hecho de haber violado la intimidad de Lizy.

—Eso no estuvo bien Mase.

—Lo sé pero fue la única manera que encontré... Sé que puedo ayudarla pero para eso necesito que me ayudes a encontrar a Nicole... Necesito que averigües todo lo que puedas sobre Nicole, preguntale a Lizy en que país fue que se mudo y todo lo que puedas por favor. ¿Me ayudaras?

—Está bien... Haré lo que pueda. —Contestó luego de un momento.

—Gracias.

—Bueno ya me voy —dijo—. No te preocupes, sé que ayudaremos a Lizy a superar todo esto... ¿Escuchaste eso?

—¿Que cosa? —dije e hice silencio para escuchar, era el sonido de mi celular probablemente avisándome que tenía un nuevo mensaje.

—Creo que es tu celular.

—No te preocupes seguro es solo un mensaje en palabras para ti.

—¿Palabras para ti? —dijo ella y noté como se puso pálida.

—Sí, es una página no muy famosa, seguro por eso no la conoces se trata sobre...

—¿Como es tu usuario? —Me interrumpió bruscamente.

—¿Mi usuario?

—Si, por favor dímelo. —Me rogó

—"BrokenWings" pero porque lo quieres sab...

—No puede ser —exclamó con una sorrisa incrédula—. Es increíble.

—¿Qué? —Sí, Sophia solía ser rara pero nunca tanto como lo estaba siendo ahora.

—¿Sueles hablar con "WhiteBird" cierto? —Bien ahora sí, estoo era demasiado extraño.

—Si. —Respondí. Ella sonrio enormemente y me miró un rato antes de hablar.

—Elizabeth Cáliz, es... "WhiteBird"

Una extraña sensación hizo que mis ojos se abrieran con asombro y mi rodillas temblaron ante sus palabras...

Palabras para ti.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora