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Claramente parecía que la vida ésta semana había querido tratar de conspirar, ya fuera con una u otra cosa. Suspiré mientras buscaba mi celular entre las sábanas pero antes de poder revisarlo la puerta de mi habitación se abrió de golpe, mi entrecejo se frunció ante la visita de Seokjin, pero a diferencia de ayer parecía más tranquilo, por decirlo así. Me sente en la cama con Yeontan sobre mis piernas y abrí un poco la cortina que estaba detrás de mi.

-¿Algo que pueda hacer?— Seokjin pareció pensarse lo que iba a decir, sólo tomó asiento en la silla que estaba frente a mí escritorio y jugó con sus dedos.

-¿De dónde conoces a Jeon? Yo... Escuche que dijiste su apellido

-Facultad. Estudia conmigo pero en otra área, ¿por qué?— jugué con las patitas de Yeontan mientras esperaba oír a Seokjin.

-Es que, ése chico es problemático— sonreí tratando de contener mi risa, la cual no tenía idea de dónde venía, negué mientras lo veía

-Por dios, es la persona más borracha que conozco, quizás sea un cabezota pero es... Un buen chico— me encogi de hombros mientras dejaba que Tan bajará de la cama y fuera a tomar agua

-Lo dices porque ves lo que él quiere que veas, pero, sólo, no sé, te ¿advierto?, es un consejo para que sepas con quién juntarte y con quién no— lo mire un poco irritado, saque mis pies de la cama y los metí en unas pantuflas

-Te voy a decir una cosa,— estire mis brazos y deje una de mis manos en mi cadera— bueno, varias, así que préstame atención, ¿si? Me da un poco de repelus tu consideración por mí a este punto, es algo hipócrita considerando lo que ha pasado, lo siguiente, yo sabré si me junto con él o no después de conocerlo, ¿soy claro?. En resumen, no te metas donde no te lo pido— palmee su hombro, tome la correa de mi perro y salí de mi habitación.

Tomé a Yeontan y enganché la correo en la pequeña argolla de su collar, salí de mi casa mientras cerraba la puerta y veía a ambos lados de la calle para luego cruzar corriendo, eran cerca de las tres de la tarde, hace una hora habían empezado las visitas para ver a Namjoon, dirigí mis pasos hacia el hospital mientras observaba lo cambiado que Daegu estaba a cuando era niño. Las tiendas que solía concurrir no estaban más, en su lugar sólo había casas enormes y bastante bonitas. Me detuve de golpe cuando al otro lado de la calle el rojo de su cabello destacaba, aunque hacía un poco de calor, llevaba puesta una chaqueta de cuero negra y en una de sus manos tenía la gorra que siempre usaba. Sus ojos se posaron en mí como si me hubiese estado buscando, por detrás de él llegó Eunwoo mientras parecía decirle algo con urgencia, Jungkook lo miró con el ceño frunció y después le dijo algo hasta que su mirada cayó en mí. ¿Qué hacía él aquí? Cruce corriendo la calle hasta que llegue a ellos.

-Vinieron en un muy buen momento— las cejas de Eunwoo se elevaron sugestivas, lo rodee para seguir mi camino al hospital, Jungkook llegó a mi lado sin decir nada.

-¿Qué haces aquí? ¿Me seguiste?— de reojo pude ver que comenzó a negar rápidamente

-No sabía que estabas aquí sinceramente, pensé que quizás te habías perdido por ahí con Hoseok y ni quiso decírmelo— asentí y volvimos a quedarnos en silencio, lo vi de reojo –de nuevo– acomodar su cabello mientras volteaba hacia atrás, hice lo mismo viendo a Eunwoo quitar la vista de nosotros con rapidez

-¿De dónde conoces a Eunwoo?

-Viejo amigo de familia

-¿Vas al hospital o sólo me estás siguiendo?

-Dulzura, no te estoy siguiendo,— sonrió mientras quitaba de entre mi mano la correa de Yeontan— también tengo familia aquí, aparte de Busan— miro a Yeontan olfatear una ramita y sonrió— lindo cachorro— asentí torpemente mientras metía mis manos a las bolsas de la chamarra que llevaba puesta. Nos detuvimos en la entrada y Jungkook sonrió.

»Entra tú, me quedaré aquí cuidando a tu cachorro— me regalo una pequeña sonrisa y antes de que pudiera entrar volvió a hablar— y esperándote.

Next Door ¦ jjk + kthDonde viven las historias. Descúbrelo ahora