El mafioso #1 (Harry Styles)

Capítulo 32

HARRY'S POV

Aquel chaval de la bandana roja... ¿Cómo se llamaba? Comenzaba por A, al menos eso creo... ¿Ashton? Sí, Ashton. El amiguito de Luke, ya me comenzaba a cansar aquel tema, ¿qué hacía aquí?

-¿Qué quieres?

-Nada, a decir verdad, ya me iba –Comentó Ashton mirando a Valerie de arriba abajo, aquello me molestó bastante.

-No la mires así –Intervine.

-Perdóname –Contestó sarcástico.

-Lárgate –Ashton le lanzó una mirada desafiadora a Harry y se marchó. Miré a Valerie y ella me sonrió cálidamente, era capaz de  tranquilizarme con una simple sonrisa.

En aquel momento apareció la mujer que trabajaba en el local para tomar los pedidos. Era una mujer gorda y con una cara redonda, tenía una agradable sonrisa marcada en sus labios. Ambos decidimos tomar unos pancakes con chocolate.

-Tienes autoridad para hablar, ¿eh? –Comentó ella con una sonrisa, como habitualmente.

-Sí, podría decirse –Contesté, me preguntaba qué haría Ashton en aquel pueblo, que yo supiese, él vivía junto con Christian en las afueras de Londres. Quizá me equivocaba. O probablemente me vigilasen, si yo era el objetivo, tenía sentido.

-¿En qué piensas? –Preguntó Valerie con una curiosa mirada. Me sacó inmediatamente de mis sentimientos.

-Me pregunto qué hacía Ashton aquí...

-Yo creo que te vigilan, Haz –Murmuró ella, y yo asentí. Ella había llegado exactamente a la misma conclusión que yo, era una respuesta demasiado probable.

-Tranquila, lo he pensado... -Valerie dirigió su mirada a la calle, era un agradable pueblo. Había pocas personas en la calle, pero las que había, caminaban con bolsas de la compra por la calle. Parecía el típico pueblo familiar, donde todos los habitantes parecen conocerse.

-Ahora estaba dándole la vuelta a unas cosas –Comentó ella, yo la miraba atentamente-. Si me vas a dar ese dinero, podría dejar de trabajar, ¿cierto?

-Podrías. Puedes vivir toda tu vida con ese dinero –Contesté-. Solamente espero que no comiences a hacer compras compulsivas, entonces, no tendrías dinero suficiente.

-No será problema para mí –Su sonrisa no desaparecía de su rostro. La mujer del local apareció con las tortitas americanas-. Muchas gracias –Agradeció ella. Cuando la mujer se marchó, Valerie añadió-. ¿Sabes? Nunca pensé en llevarme bien con una persona... ya sabes... como tú.

-¿Criminal?

-Exactamente –Contestó-. ¿No te molesta esa etiqueta?

-Ciertamente no, menos cuando es la realidad. Yo soy así.

-Harry, no es cierto –Dijo ella, mientras cortaba con el cuchillo una de las tortitas-. Yo sé que no es así, si creyese que eres tan mala persona, no estaría aquí contigo. Algo en mi ha cambiado, ya no te veo igual.

-Lo acepto si es en el buen sentido.

-Claro que sí, tonto –Dijo ella adorablemente-. Tú no eres como los demás, ya sabes, los demás son malos. Pero hay algo en ti, que me dice que no eres así.

-¿Es un halago?

-Probablemente.

-Entonces, gracias –Agradecí, y Valerie asintió de forma modesta.

-Harry, ¿nunca has pensado en huir de este país? Quiero decir, huir de todo lo que está sucediendo ahora mismo...

-Claro que sí, pero no es tan fácil. No cuando se trata de la mafia, es un mundo complicado, ¿sabes? –Tomé aire y miré por la ventana-. Me arrepiento de haberme metido en este mundo, no puedo huir. No hay lugar dónde no me puedan encontrar...