A nada de estar juntos

3.6K 317 67
                                    

- No sé de qué hablas - mencionó firme aunque claramente avergonzado Daniel.

- Sabes a lo que me refiero, gatito - agregó con una sonrisa mientras bebía de su vino. No llevaban mucho desde que Nath invitó de imprevisto a cenar a Daniel. Para el beta habría sido una salida cualquiera de no haber pasado lo que pasó hace un par de noches atrás - Quiero saber si realmente te gusto

El beta se encontraba totalmente rojo, evitando el contacto con los ojos del alfa.

- ¡Claro que no! Esto siempre fue un juego, una estrategia para conseguir a Susan... ¿no?

- Así no es como lo percibo - comenzó intentando evitar el golpe bajo de hace un rato - No seré médico, pero tengo entendido que los beta no pueden verse afectados por los celos de los alfas y omegas...Por tanto, me pregunto a qué se debía tu entusiasmo de esa noche

La mirada inquisitiva y victoriosa de Nath se enfrentó a la conflictiva y avergonzada de Dani. El alfa notaba que el beta comenzaba a verse molesto, pero no sabía si eso era algo malo o si simplemente significaba que estaba en lo correcto.

- ¡Eres odioso! ¡Todo siempre tiene que girar en torno a ti! ¡¿No es así?! ¡Pues déjame decirte que yo no soy de los que caen fácilmente! ¡Como con los omegas que te has acostado! - gritó levantándose de la mesa, su rostro estaba tan rojo al gritar que Nath no podía saber si se debía a lo avergonzado o a lo enojado que estaba. Le dio un última mirada para luego marcharse del restaurante.

El peliturquesa soltó un gran suspiro mientras apoyaba la frente con pesar en la mesa.

"Al menos no me ha dicho que no"

....

No paso mucho tiempo para que Edd y Kevin volvieran a tener otra cita.

Es más, tan solo el día siguiente Kevin había invitado a Edd nuevamente a la cafetería. Conversaron tranquilamente sobre su día para así, cuando ya estaba oscuro, conversar acerca de sus sentimientos y como se sintieron esos días separados. Al par de días, un día viernes, decidieron ir a un parque de diversiones. Ya no recordaban cuando fue la última vez a la que fueron a una.

Se subieron a diversos juegos y conversaron mas acerca de esos días en los que no estuvieron juntos y, por sobre todo, aprovecharon al máximo su compañía, como si no se hubiesen visto en años. 

- ¡¿Tu madre vino a verte?! - exclamó luego de haber escuchado de la "agradable" visita de la madre de su omega - Lamento tanto no haber estado allí para apoyarte - mencionó esta vez triste.

- No te preocupes, al final logré convencerla de marcharse - dijo en un tono agridulce el cual no convencía del todo a Kevin.

Hubo un momento de silencio incomodo. El alfa realmente se sentía mal por haber dejado a su omega a solas con su madre. Siempre detestó como esta lo trataba cada vez que lo veía.

- ¿Y tu padre? - preguntó precavido.

- Pues...hace bastante que no sé de él... Por ahora no quisiera hablar de eso... ¿Cómo ha estado Nath? - preguntó intentando cambiar el tema.

- Pues no muy bien - le siguió rápidamente Kevin - Al parecer tuvo un problema con Daniel y quiere solucionarlo

- ¿De verdad? Espero que pronto se reconcilien... - exclamo preocupado, pensando el porque su amigo no le ha comentado ese asunto.

- Pero no hablemos de ellos...Enfoquemonos en nosotros - dijo Kevin siendo esta vez él quien cambiaba el tema de conversación, tomando la cintura del omega y apegándolo hacia él - No falta mucho para volver a estar completamente juntos...Ya empecé a empacar

Mi omegaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora