Sin perder un segundo, Dylan y Billy lo levantaron y lo llevaron a tomar refugio detrás de unas cajas, donde todos se ocultaron momentáneamente hasta que las cajas comenzaron a estallar por los balazos. El grupo corrió hacia un contenedor y ahí se resguardaron, disparando de cada extremo cuando podían.

-¡Nos superan en número! -gritó Jon, alzando su voz sobre el fragor de la batalla y disparando a tres poseídos que se acercaban- ¡Nos van a masacrar!

Luego de recuperarse por el impacto, Scott se volvió a parar y a atacar a la gran multitud de enemigos que los rodeaba.

-Necesitamos llegar a dentro -priorizó Alex, luego tomó a un escorpión de la cabeza y puso el cañón en su garganta, haciendo que al disparar la bala saliera por el cráneo.

Dylan se acercó a su grupo y llamó la atención de cada uno.

-Steve, te quedas conmigo, cuidaremos las espaldas de Blue Night junto la de Scott y Billy mientras intentan infiltrarse dentro.

-Y yo y el niño los cuidaremos a todos ustedes -dijo Jon, recargando su rifle junto a Matt, listos para servir.

Todos estuvieron de acuerdo. Scott tomó su escopeta con firmeza y salió a la delantera, disparando a todo aquel que se le pusiera en frente. Billy hizo lo mismo mientras que Alex corría derribando a los más cercanos con sus bastones electrificados.

Matt y Jon les cubrían la espalda a los demás con sus rifles de gran precisión, aún estando detrás del contenedor.

Dylan, junto a Steve, dispararon a los que podían, pero rápidamente tuvieron que resguardarse ante las ráfagas de balas de los otros.

Se escondieron detrás de unas cajas, que para su sorpresa, contenían dinamita, la cual Dylan supuso debieron usar para hacer más rápida la excavación.

-Tengo una idea muy riesgoza y muy alocada -habló por su radio, comunicandose con los demás-. Hagamos explotar el edificio, quedará enterrado lo que sea que hayan buscado bajo toneladas de escombro.

-Es un genial plan -admitió Matt, siendo secundado por Scott, quien se le escuchaba jadeante.

Dylan y Steve tomaron varia dinamita. Para luego salir de su escondite y volver a la batalla. El grupo de los escorpiones estaba siendo diezmado, pero aún así era complicado avanzar.

Alexander golpeaba a cada uno de sus contrincantes sin cesar, mientras sus compañeros disparaban a diestra y siniestra. Se estaban acercando demasiado ya como para retroceder.

Dylan corrió junto a Steve, pero los poseídos no tardaron en atentar contra ellos. El oficial Turner tiró su dinamita y sacó su arma reglamentaria para devolver el fuego, pero Steve no tuvo la misma suerte.

-¡Dylan, corre...! -alcanzó a decir, antes que una bala atravesara su cuello de lado a lado- Dyl...

-¡Steve, no! -gritó el oficial, corriendo hacia su amigo, pero justo en ese momento una bala impacto directo en la dinamita que aún sus manos cargaban, haciéndolo explotar en miles de pedazitos y mandando a volar a Dylan varios metros por los aires.

Todos quedaron anonadados mientras las fuerzas de White Demon volvían a atacar con fuerza. Uno de los poseídos aprovecho la distracción para tomar un explosivo y lanzarlo contra el contenedor que los mantenía a cubierto a Jon y a Matt.

El anciano oficial se dio cuenta de esto y lo primero que hizo fue empujar fuera a Matt, dejándolo desprotegido. Cuando éste cayó al suelo, el escorpión disparó hacia la dinamita, haciéndola explotar y empujando el contenedor para adelante, aplastando al viejo Jon por completo.

Tres de aquellos monstruos se acercaron al indefenso Matt, quien apenas se estaba levantando, y lo molieron a golpes sin compasión alguna.

Billy gritó de rabia, al borde de las lágrimas por su hermano, que no dudo en disparar contra los que atacaban a su hermano.

Alexander se acercó al golpeado Matt, para notar que aun seguía vivo. Lo levantó poniendo un brazo debajo del suyo y se acerco a reducido grupo.

-Blue Night debe entrar allí y detener al imbécil causante de todo esto antes de que sea medianoche -dijo Dylan, agarrando a Matt, quien tenía moretones y rasguños en su cara hinchada-. Nosotros pondremos los explosivos y cuando él salga, lo hacemos volar, enterrándolo.

Alexander asintió y miró a su grupo.

-Les daré todo el tiempo posible -Salió corriendo hacia la entrada y derribó a dos escorpiones que se acercaban-. No me esperen para hacer explotar el edificio. Sólo haganlo.

Scott tomó a Matt y lo encerró en un contenedor, dejándolo fuera de todo.

-Estarás bien ahí. Ya hiciste suficiente.

El pelirrojo golpeó el contenedor con ira e impotencia al quedarse atrapado sin poder hacer nada. Su hermano apoyó una mano en el frío metal.

-Estarás bien, tranquilo -Y con eso último, Billy se separó del contenedor y se fue, dejándolo ahí atrapado, seguro entre paredes de metal.

Alexander acabó con varios poseídos antes de poder entrar. Al llegar frente al edificio, entró sin titubear, para encontrarse con una gran excavación, con varios metros de profundidad, como un fozo, como un cráter, donde en el fondo se encontraba una gigantezca escotilla circular, de doble hoja, hecha de piedra antigua con un anillo alrededor que contenía símbolos extraños. Y a algunos metros, un pilar de dos metros, con una hendidura más a lo bajo. Y junto a todo esto, una figura blanquesina que estaba parada, mirando fijamente ha Alexander con sus ojos carmesí.

-Bienvenido, Smith, a La Puerta -dijo, refiriéndose a la gran estructura que estaba en el suelo-. Y el pilar de acá, es la cerradura -Levantó un poco su brazo para admirarlo y su mano se convirtió en una especie de garra, que era negra con venas rojas, que llegaban hasta el codo-. Y esto... Esto es la llave. Yo soy La Llave.

Blue Night: El inicio de un héroeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora