❝Capítulo cuatro.❞

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Bajaba las escaleras de la casa con un paso tranquilo, recién despertado con sus manos sobando sus ojos para desperezarse. Su pelo estaba despeinado y bajo sus ojos unas terribles ojeras descansaban. Detrás de él, un pequeño cachorro iba al igual que su padre, con un paso tranquilo y sujetando un peluche con una mano.

Taehyung vió la estampa familiar enternecido y sonrió mientras tomaba un sorbo de su café.

-Buenos días, Yugy, hijo-saludó el omega viendo como el niño saltó de dos en dos los escalones para llegar cuanto antes a la mesa y por fin rellenar su estómago.-JeongYun cariño, no bajes tan rápido, te harás daño.-regañó a su nieto con una sonrisa en sus labios.

-¿Los niños no han bajado aún? ¿Ningún sirviente les ha despertado todavía? Tienen clase...-preguntó curioso YuGyeom viendo como el asiento de los gemelos estaba vacío. TaeHyung quien todavía sonreía negó con calma.

-Les dije a todos los trabajadores que no les despertaran por ahora, les puedo llevar yo hoy a clase. Así pueden descansar un poco más.-YuGyeom le miró con la ceja alzada, ¿De dónde había sacado su padre toda esa felicidad de repente?

-¿Por qué estás tan contento?-se sentó en una silla y sentando a JeongYun en la trona para que el niño comenzara a comer, tenía cuatro años, todavía no llegaba a la alta mesa del comedor.

Hoseok apareció por el umbral de la puerta con unas gafas de pasta y un gran montón de papeles en su mano.-Tu padre ha encontrado a un omega para que "cuide a los niños", ya sabes...-se sentó en la mesa también no sin antes acariciar la melena castaña de su pequeño nieto. YuGyeom se levantó de la mesa tenso y mirando incrédulo a su padre.

-¿En serio? ¡¿De verdad?!-se agarró de su mata de pelo despeinada con estrés, JeongYun lo miraba con un pucherito por los repentinos gritos, TaeHyung miró a su hijo sosegado y Hoseok pensaba que había metido la pata hasta el fondo.-No me puedo creer que hayas sido capaz de hacerme esto, por la madre Luna, papá, no puedes buscarme una pareja, no estamos en el siglo dieciséis...-pegó una patada a la silla en la que se había sentado antes y JeongYun pegó un leve saltito del susto.

YuGyeom comenzó a dar vueltas por todo el comedor, de un lado a otro, balbuceando cosas sin sentido, agobiado y estresado, decepcionado y asustado.

-YuGyeom hijo, tu padre no te va a obligar a salir con ese omeg-

-¿¡Ah no?! ¡Pues parece que ya lo ha hecho, ha contratado a un omega para que lo enamore! ¡Si eso no es obligar y presionar entonces...! ¿Qué es papá?-miró a su padre alfa quien se había quitado las gafas y miraba todo con el ceño fruncido. TaeHyung se acercó a una sirvienta y le dijo que se llevaría a JeongYun de allí, que lo vistiera y lo dejara arriba junto con sus hermanos.

-¡YuGyeom! ¡Controla ese tonito, a mí no me grites! Escúchame porque te lo voy a decir una sola vez. Ahora no sólo es un capricho de tu padre-se levantó y se acercó a su hijo con el dedo índice apuntándolo-Ahora es una orden, ahora te exhorto a que enamores a ese omega, que tengas a alguien a quién mimar y que te regule cuando estés trabajando. Me da igual que seas mayor de edad, que tengas tres hijos maravillosos, me da igual que seas mi hijo. Eres el futuro líder de la manada y como tal necesitas tener un omega. Necesitas a alguien que cuide de tus cachorros y sea un referente materno para ellos. Así que, cállate, aguanta, tienes todo el tiempo del mundo para asumir que ese omega va a ser tu futura pareja, pero quiero que seas su pareja, que lo enamores. ¡Y no se discute más! No voy a pagar casi 5.224.800 de wones* para nada. Lo vas a hacer y punto-El pecho de ambos alfas subía y bajaba por el enfado que contenía ambos, los ojos de Hoseok parecían echar llamas y la cara de YuGyeom era un cuadro. Sus aromas se habían cambiado a uno que indicaba peligro para cualquier otro alfa u omega.

Omega a sueldo. [YugKook, omegaverse]Where stories live. Discover now