Capítulo 28 - Un nuevo amanecer

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En este punto creer que de alguna manera nuestras vidas pueden acabar, sería mentirnos a nosotros mismos. Las cosas que hemos pasado jamás creí que llegasen a ocurrir, pero claro, debo aceptar que deseé un fin del mundo donde pudiera sobrevivir.
Ahí estábamos los dos, moribundos, en medio de una carretera en Rusia.
Las luces que alcancé a ver, eran de un auto, pero mis ojos se cerraron y mi cuerpo cayó junto con el de Laura.
Desperté.
Me encontraba en un lugar muy familiar, demasiado para mi parecer, y, estaba acostado junto a Laura. Ninguno de los dos estaba conectado a alguna cosa, era como si tan sólo nos hubiéramos ido a dormir.
Me paré asustado, alarmado. Toqué a Laura, pero no despertó, así que salí de la habitación, y claro, no era de esperarse, pero, estábamos en casa. Habían muchas cosas cambiadas respecto a la infraestructura del lugar.
En eso, cuando iba a entrar de nuevo a la habitación, se interpuso Chloe.

-Oye, oye, no entiendo...

-Sólo... Philip, Miguel ha despertado. -Dijo ella por radio-.

Entré a la habitación porque Laura me había llamado, es decir, ya había despertado.
Ella ya sabía un poco más de esto, ya que ella estaba consciente desde hacía un mes. Estuve un mes en ese estado, efectivamente.
Laura se sentó en la cama, y me dijo que me sentara para ella ponerme en contexto.
Ella estaba muy agradecida, porque según ella, gracias a que mi cuerpo cayó aquella vez sobre el de ella, no le permitió morir de hipotermia. Yo por en cambio, tuve las pulsaciones muy bajas durante un par de días, al punto de tener que usar medidas que ella mencionó, pero que no entendí.
Estábamos vivos, supongo que eso era lo importante.
Entró Philip a la habitación con Alisson, aquella chica que nos encontramos en Rusia. Él me terminó de contar la historia. Yo sinceramente no tenía palabras.
Al final, todos los que pudieron subieron en un avión reconstruido, y pudieron traernos hasta casa.
Querían dejarnos, a Laura y a mí, por razones obvias, pero Philip y Briana no dejaron que fuera así. Y, aquí estamos, contando nuevamente la historia.
Ellos salieron del cuarto, y me quedé con Laura. Hablamos de todo.

-Oye, vamos a comer algo. Lo de alimentarte por tubos creo que no era muy agradable. Ven, vamos por un poco de comida. -Me dijo Laura-.

Comimos entonces, pero luego ella quiso otra cosa. Me tomó de la mano, y quiso llevarme a un lugar desconocido para mí. Era el anochecer. Pensé en algún momento que sería un rato romántico, y, Laura también lo creyó así, pero, la desgracia nos perseguía.

Nos sentamos en el techo del lugar, de las manos agarradas, su cabeza en mi hombro. Era el plan perfecto, y no necesitaba más.

Hablamos de todo un poco, incluso reímos un rato. Era ese momento que nunca pudimos tener estando en Rusia, ni siquiera antes de habernos ido.
Emma nos llamó, diciendo que Philip necesitaba hablar con nosotros dos, y tuvimos que bajar.
Nos reunimos con Philip, Briana, Emma y Chloe.

-Es... quiero ir al punto. Pasaron muchas cosas en su ausencia, la mayoría buenas, pero como siempre, las malas se hacen notar mucho. El gobierno aún existe, pero eso no es nada. Crearon otra cosa parecida a lo que ustedes detuvieron. Sí, nos enteramos de todo, pero ese no es el punto. Es sinceramente sólo un rumor, escuchado por un guardia un día que salió a por comida.

Teníamos que prepararnos para un segundo ataque. Supuse que, esto no sería nada en comparación con todo lo que pudimos detener.
Mandamos a gente para que quizás encontraran información, y nosotros hicimos lo mismo.
Alisson salió con Emma y Chloe, y Laura y yo con Briana y Philip. Unos chicos relativamente nuevos, nos hablaron, y dijeron que querían ayudar. Nicolas y Derek, dos chicos que habían sobrevivido a todo esto por su cuenta. Les dimos la oportunidad, y se fueron en nuestro grupo.
Salimos a la mañana siguiente.
Nos dividimos, y, en caso de algo negativo, nos comunicaríamos por radio.

-Es como si no hubiera estado durmiendo por más de un mes. Sigo sintiéndome cansado, pero el deber llama, o eso creo. -Dije en voz alta-

-Hoy iremos por una dirección a la que nunca desde que llegamos nos hemos dirigido. Quedan avisados. -Exclamó Laura, mientras miraba el mapa en sus manos-.

Llegamos a un lugar que nunca habíamos visto, era muy extraño. Había gente por doquier, tranquila, y se veían amables.
Nos pararon los hombres del lugar.

-Por favor bajen de sus autos, con las manos totalmente visibles, por favor. -Dijo un señor de más o menos 70 años de edad, mientras cargaba una escopeta en sus manos-.

Nos hicieron unas cuantas preguntas respecto a nuestras identidades, y luego, muy amablemente nos dejaron pasar. Incluso nos dieron un tour por el lugar.
Estábamos terminando dicho tour, y a mí me da por desviarme, y, estuve a punto de abrir una puerta que tenía candado, pero, un tipo del lugar me detuvo muy nervioso.

-Sigue tu camino, hijo. -Dijo el hombre, quien frunció el ceño-.

Derek y Nicolas dijeron que se mezclarían y harían vida social con la gente, para ver qué son y qué y cómo hacen para sobrevivir y tener viva a tanta gente.
Laura y yo investigaríamos el lugar.
Íbamos de camino a la puerta, pero, sonó una voz en un megáfono.

-Citamos a toda la gente de... ¿Cómo era?, ah, sí, no tenemos nombre. Los citamos a todos a reunirnos ya mismo en la plaza central, habrá un espectáculo.

Nos dirigimos, y nos dimos cuenta de que iban a matar a alguien a través de la guillotina, pero, ¿Por qué? A parte de que esas eran las reglas en este lugar, resulta que a aquella persona la habían acusado de traición.
El tipo se negaba a ser decapitado.
Su rostro era familiar. Le comenté a Laura, y una expresión de rabia y tristeza la atropelló. Era Félix.
Teníamos que ayudarlo, ¿Que por qué? Al fin y al cabo era al único al que conocíamos acá, y claro, puede que yo ya lo haya superado y que acepte que quizás esté con nosotros, pero Laura no quería hacerlo, aún tenía rabia con él por todo lo que me había hecho, por el daño que le hizo al grupo, por todas esas mentiras. La calmé, le dije que al fin y al cabo, si no hubiera sido por él, ella y yo no nos conoceríamos y no estaríamos donde estamos. Ahí, ella se relajó un poco, y accedió solamente a que lo sacáramos de ahí, dijo que después de eso, él se las arreglaría para seguir sobreviviendo.
No sé la razón de haber 'perdonado' a Félix, quizás al final, el tiempo sí lo cura todo.
Teníamos que idear un plan. ¿Cómo sacaríamos a Félix de acá sin armar alboroto? No había forma, y por eso necesitábamos apoyo.
Fui al auto a sacar los rifles, mientras Laura llamaba a Alisson, Chloe y Emma para que vinieran a ayudarnos.
Un tipo a lo lejos me vio las intenciones, y en seguida salió corriendo para alertar a todos, pero, Laura lo alcanzó a ver, corrió hacia él, y lo mató con un cuchillo sigilosamente. Ella tenía rabia, estaba enojada. Sacó el cuerpo de ahí, y estratégicamente lo puso en un lugar visible, para que la gente se distrajera y pudiéramos sacar a Félix de ahí.
Eso pasó.
Se formó el alboroto, la gente estaba distraída, pero entonces una mujer vio y acusó a Laura. Ahora, sólo podía decidir, o salvaba a Félix, o iba a ayudar a Laura.

 Ahora, sólo podía decidir, o salvaba a Félix, o iba a ayudar a Laura

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The InfectionWo Geschichten leben. Entdecke jetzt