—¿Aún no ha salido nadie? —Pregunta Barry a los demás miembros del equipo tras dejar un casto beso sobre la frente de Kailan a modo de saludo.

—No. Seguimos esperando.

—¿Por qué tienes un arma, Kai? —El tono burlón que utiliza Allen logra hacerle rodar los ojos a la nombrada.

—James Jesse nos dejó muy claro que mis poderes se pueden neutralizar fácilmente. —Se acerca un poco a su oído, causándole repentinos escalofríos al castaño—. Hasta que no encontremos a mi humano, esta es la única alternativa que veo para defenderme.

Barry suelta una risa entre dientes antes de colocar a la chica detrás de él—. Quédate ahí.

No pasan ni dos segundos hasta que la fisura prácticamente escupa a alguien fuera de ella. Una silueta con apariencia de hombre cae de cuclillas sobre el suelo con la brecha cerrándose detrás de él, dejando a todos los presentes impacientes y expectantes a la siguiente reacción del invasor. A pesar de todos los nervios volátiles en el aire, Kailan se encuentra tranquila, sintiendo la presencia de aquella figura masculina bastante conocida. Unos segundos pasan hasta que él se pone de pie con las manos alzadas, una máscara obstruyéndole a los miembros del Team Flash la capacidad de ver la identidad del viajero.

Kailan sonríe sin cabida a dudas.

¿Vincent? —Pregunta Kailan, bajando el arma para dejar de apuntar al extraño.

El enmascarado la mira fijamente por unos segundos, como analizando cada facción en ella, antes de él mismo apartar su máscara del rostro y mostrar un rostro sonriente y amable a todos los presentes. Kailan no necesita más tiempo; la pelirroja corre hacia el de cabello platinado y se lanza a sus brazos, permitiéndole a éste alzarla en el aire y darle vueltas en su eje, mareándola un poco. El Team Flash baja la guardia, excepto Barry, quien mira con el ceño fruncido y algo disgustado a aquel desconocido que abraza a su mejor amiga como si fuesen amigos de toda la vida. ¿Quién demonios se creía?

—¡Estás aquí! —Exclama ella cuando el chico fornido la deja sobre el suelo como si fuera una delicada muñeca—. Dios, ¡de verdad estás aquí!

—Te dije que vendría en un mes, rojita. —Vincent coloca un mechón de cabello detrás de su oreja.

Cisco frunce el ceño y abre la boca, indignado—

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Cisco frunce el ceño y abre la boca, indignado—. ¡Ese es mi apodo, viejo!

Kailan lo ignora olímpicamente, tomando entre sus manos las de Vincent—. ¿Tan rápido ya pasó un mes? —Éste carcajea, asintiendo con la cabeza—. No importa... ¡Estás aquí! Lo que yo te he extrañado, Vince.

—También te extrañe, Kailan. —Vuelve a estrecharla entre sus brazos.

Un carraspeo suena por el lugar, obligando a los dos amigos a separarse para observar el ceño fruncido y algo molesto del velocista escarlata. Cruzado de brazos, Barry mira interrogante a Kailan mientras que ésta, sin poder borrar la resplandeciente sonrisa de su rostro, permite que sus mejillas se coloreen de un rojo ligero al caer en la cuenta de la escenita que estaba montando ahí con el de cabello platinado.

BACK FOR YOU » BARRY ALLEN/THE FLASHDonde viven las historias. Descúbrelo ahora