Subimos las dos escaleras que había antes de entrar y varias personas nos empujaron para que pasáramos rápido y el ruido de la música no se pudiera escuchar desde fuera.
Toda la sala de teatro estaba hecha una locura. La sillas estaban volcadas y las mesas apartadas cerca de las paredes, llenas de bebidas alcohólicas. Pude localizar Ron, Valentine's, Whisky, Vodcka, Ginebra... Todo estaba lleno de vasos de colores, copas y cubiteras con hielo.
La gente bailaba encima del pequeño escenario que había en la sala de teatro, hacían círculos en el suelo y los más atrevidos bailaban dentro. Incluso los más borrachos había comenzado a ponerse los disfraces que utilizaban para ensayar las obras.
La música estaba alta y las luces confundían la vista. Añadiendo el profundo olor a marihuana y otras drogas que estarían consumiendo toda esta cantidad de gente. Resultaba inquietante saber que estaba haciendo algo ilegal y que si nos pillaran nos caería una buena.
La canción "Bang Bang" de Jessie J, Ariana Grande y Nicki Minaj (Poner canción) sonaba fuerte, haciendo a todo el mundo estallar en bailes. Lisa y Rebecca llegaron con vasos y me dieron uno a mí también. Comenzamos a bailar de una forma alocada y divertida aquella movida canción. Moviendo las caderas, agachándonos sensualmente y riéndonos como nunca.
Habíamos pasado una hora entera bailando y bailando, riendo y divirtiéndonos. Creo que esta había sido la segunda buena fiesta que había tenido desde que llegué a New York. El toque de risa de Ryan, la diversión de Rebecca, la locura de Lissa y la simpatía y encanto de Marco, y toda la demás gente que, gracias a que el alcohol hacía mella en ellos, estaban mucho más simpáticos. Pero... faltaba el toque sarcástico de Justin. ¿Donde estaba? no, mejor aún, ¿Que hacía pensado en él? Como siempre andaba molestándome, cuando no lo hacía parecía extraño.
-Ey, ¿Donde esta tu best friend forever? -le pregunté a Ryan, con burla y una pequeña risa.
Me miró sonriendo de lado y me quitó la copa de la mano.
-Deja de beber, anda.
-No insinúes que voy mal porque no. -le miré mal, provocando su risa descarada y segundos después la mía.
-Justin debe de estar por ahí perdido con Amanda, yo que sé, luego vendrá. -le dio un trago a su copa de Ginebra.
No le presté atención a lo que me había dicho y continué bailando y pasándolo en grande con la siguiente canción junto a Lisa y Rebecca. Una canción mucho mas movida y con un ritmo que daba pie a movimientos más sensuales empezó a sonar. Cuando Rebecca volvió con nuestras copas cargadas nos faltó tiempo para que las tres empezáramos a bailar. Perdimos de vista a los chicos y ni siquiera nos dimos cuenta debido a lo bien lo que estábamos pasando.
El estribillo más motivador de la canción vino y comencé a mover las caderas de un lado a otro sensualmente, deslizándome levemente hacía abajo mientras movía mis brazos. El calor se hacía presente en mi cuerpo, la música en mis oídos, las ganas de bailar. No paraba de mover la cintura sensualmente cuando escuché tras mi espalda un sonoro "Chs, chs" que aclamaba mi atención y me giré. Pude ver a Ryan con una enorme sonrisa divertida y justo a su lado estaba Justin, con una sexy y encandiladora sonrisa de lado, y sus brazos cruzados sobre su pecho mientras gesticulaba un "Guau" divertido y encandilador, refiriéndose a mi baile. Sabía que mis mejillas habían tomado color cuando seguidamente guiñó un ojo y lo único que pude hacer para disimular fue rodarle los ojos de forma divertida.
Me giré y, sabiendo que podía provocarle de nuevo, comencé a bailar al ritmo de la música igual que antes. Cuando me quise dar cuenta sus manos se había posado en la parte alta de mi cintura y su cabeza se había encajado en mi cuello.
Capítulo 11.
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