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Editado 24/01/21 

Después de una semana relativamente tranquila había logrado convencerme de que todo ese fiasco de las notas amenazantes y los mensajes aterradores no era más que una broma pesada. Por eso, al tercer día de que nada fuera de lo normal sucediera le pedí mi teléfono de vuelta a David. 

Mala decisión.

Son las dos de la madrugada y me acaba de llegar un mensaje que me provoca náuseas. Es un archivo adjunto de una fotografía que muestra una ventana de la casa que da hacía la cocina donde se encuentra mamá haciendo algo. Pero  lo que me pone los pelos de punta es la pistola envuelta en el fuerte agarre de una mano resguardada en un guante de cuero negro que apunta hacia ella. 

Debajo de la imagen en texto resaltado dice:

PAGAR LA DEUDA DEBERÁS SI NO QUIERES QUE MAMÁ ENCUENTRE A PAPÁ.

Mi primera reacción al ver aquel espeluznante mensaje es salir corriendo a la habitación de mi hermano.  Así que, con piernas temblorosas y ojos llorosos salgo despavorida de mi encierro sólo para chocar contra alguien en la oscuridad.

Abro la boca para soltar un grito desgarrador, pero antes de que pueda hacer algo una mano se envuelve en mi boca y me impide hacer lo que tenía en mente.

MI corazón está a millón y ya me hago a la idea de que me están secuestrando o de que me van a dar un tiro en la cabeza cuando escucho la voz de David a mis espaldas.

—Tranquila mujer, sólo soy yo —susurra haciendo que una corriente de alivio me recorra.

Con avidez me suelto de su agarre en mi cintura gracias al cual no fui a dar contra el suelo cuando me choqué con él y le lanzo una mirada fulminante. 

—¡Maldición David, casi me matas de un susto!— murmuro jugueteando nerviosamente con el celular entre mis manos.

Él me observa a la cara y por alguna razón me siento cómoda bajo su escrutinio—. ¿Estás llorando? Mierda, Karen. ¿Te hice daño?— Cuestiona alarmado pasando sus ojos preocupados por cada centímetro de mi piel descubierta.

Decido que lo mejor es decirle la verdad así que mientras él me toquetea para revisar que no me ha hecho daño, busco el mensaje y abro la imagen. Sin decir palabra alguna le paso el celular con la pantalla brillando y una vez más los ojos se me llenan de lágrimas.

Él observa la foto con ira y luego le enseño el mensaje. 

—Karen, tu papá debió haberse metido con la gente equivocada antes del accidente —asegura haciendo que me quede helada mientras un recuerdo me avasalla de repente. 

FLASHBACK:

Mamá estaba de turno en el hospital y Axel en un torneo de Soccer así que papá y yo estábamos solos en casa.

Esa mañana yo había despertado enferma y me quedé en cama todo el día hasta que escuché ruidos extraños provenientes del cuarto de mis padres.

Al principio pensé que eran papá y mamá discutiendo, pero cuando entré había una señora con traje de policía observando alarmada como papá sacaba billetes de una caja fuerte dentro del armario y los metía con ansia en una bolsa negra en las que mamá solía sacar la basura.

Preferí no hacer notable mi presencia, así que me coloqué detrás de la pared para que ellos no me pudieran ver.

La mujer parecía preocupada y no dejaba de pasar su mano sobre la pistola asegurada en el cinturón al rededor de su cadera. 

Mi Hermanastro © [✔️] |+18|Where stories live. Discover now