-Ya cuando quieras podes soltarme. Si no es que queres pasar toda la noche así conmigo. A mí no importaría eh.
Confundida dejé de abrazarle y bajé de la moto. En el mismo sitio de antes, debajo del árbol. Estiré mi falda y coloqué mis zapatos, luego levanté la vista y otra vez me estaba observando curioso. Fruncí el seño y se encontró con mi mirada.
-Debo admitir, que ese uniforme te sienta bien.
-¿Qué? - pregunté atónita. Su boca se fue curvando, formando una risa algo pícara.
-Hay Maslow, Maslow…que ingenua eres. – carcajeó rosando mi hombro mientras caminaba en sentido contrario a mí. Un pequeño escalofrío.
-¿A qué juegas? – me giré rápidamente.
-¿A qué juego? – giró.
-Eso te he preguntado. – asentí mirándole a los ojos.
-Yo no juego a nada. – avanzó un paso. - ¿Y vos? – elevó una ceja.
-¿Vos crees que yo querría jugar a algo con vos Maslow?
-¿Y vos crees que yo dejaría que jugaras conmigo Styles?
Harry se quedó observándome nuevamente, con aquel rostro con el que miraba a las charlas. Un rostro totalmente extraño que no encajaba para nada entre él y yo. Lo observé seriamente y luego, comencé a caminar a paso ligero.
-Vamos por aquí. – dijo tirando de mi brazo una vez más.
-Me va a terminar saliendo un cardenal. – solté su mano y lo miré con furia. Él rió falsamente.
-¿Se puede saber a dónde vamos? – pregunté. Caminábamos sin rumbo y en torno a otra dirección que no era la entrada de la universidad.
-¿No querrás entrar por la entrada no? – me miró. – Nos verían.
-¿Y a donde vamos?
-¿Por qué haces tantas preguntas?
Respiré hondo, resignada y le seguí. Era de noche, aquello estaba muy oscuro y Harry caminaba rápido.
-¡Podes esperar!
-¡Queres caminar más rápido!
-¡Dios Harry!
-¿¡Qué!?
-¡Las clases de piano!
-¿Y eso a que viene ahora? – paró.
-¿Nos la cargaremos? – pregunté asustada.
-No. – sonrió. – Anda, vamos. – Volvió a tirar de mi brazo.
Caminamos por un pasto, que apenas se podía ver. Las plantas me hacían daño en mis piernas desnudas, algunas llegándome a picar.
-¡Auch! – grité y llevé la mano a mi rodilla.
-¿Qué pasa? – preguntó alarmado acercándose.
-Nada. – lo observé.
Miré mi rodilla y la acaricié. Volví a mirarlo y seguí caminando aguantando el escozor mientras el bufaba algo que no logré escuchar. Caminamos unos cuatro minutos más, hasta encontrarnos una gran valla. Lo miré.
-¿Te ayudo? – preguntó.
-¿Qué? – pregunté alarmada.
-Supongo que necesitarás ayuda para subir. - carcajeó. Miré la valla. Casi dos metros.
-Vos estás loco si pensas que voy a dejar que me cargues. – me observó con interrogante. Volví a mirar la valla. – Llevo falda.
-Dios, déjate de bobadas, nos van a pillar al final. – colocó un pie sobre la valla.
![](https://img.wattpad.com/cover/20857278-288-k353224.jpg)
YOU ARE READING
Desafío al Corazón
Teen FictionUna de mis novelas favoritas. Al principio parece figurita repetida de muchas novelas que puede haber en wattpad. Pero la historia es muy linda.