Fall For a Trouble.

Capítulo veintidos.

-¡Feliz Cumpleaños!- la voz de papá lleno mis oídos.

Me volví en la cama intentando cubrirme del día que hoy era.

No era algo como el grinch de los cumpleaños, quiero decir, a quien no le gusta su cumpleaños, pero era el hecho de ser mi último año de bachillerato, puede que sea el último cumpleaños que pasaba con papá en este pueblo, claro si mis deseos de ir a Nueva York se cumplían, también estaba el hecho que era el segundo cumpleaños que pasaba sin mamá, me dolía más de lo que podía llegar a admitir, sentía su ausencia como un balde de agua fría cada vez que alzaba la cara y encontraba que ella ya no me haría sus galletas caseras de cumpleaños, o iríamos al muelle como solíamos hacer siempre, y no le pediría ir a papá, estoy segura que eso lo destrozaría.

Y estaba también el hecho, claro, que seguía peleada con Sara, Damien se había enojado ya que se había enterado que le oculte lo de Taylor, Daniel había salido de viaje, y Alex no vendría si Sara no lo hacia.

Es decir, lo único que me quedaba era Jake y Jordán, y no tenía deseosos de ver a este último, teniendo en cuenta mis recientes descubrimientos.

- ¡Vamos Erin, es pastel de chocolate!- la voz de papá tentó.

Alce la cara de la almohada, para verlo con una sonrisa de oreja a oreja y un gran pastel de chocolate en la mano.

Bien por mi.

- Guau, gracias papá, que mejor manera de empezar el día- dije sentándome.

Me coloco una rebanada en las piernas y vino a sentarse a mi lado.

- Se que es tu favorito, y hoy todos tus deseosos se cumplirán- prometio.

JA, eso no creía que fuera a pasar, pero agradecía sus buenas intensiones.

- Muy lindo de parte del hada de los deseos- masculle.

Papá rió, entonces sus verdes ojos se pusieron serios.

- Erin me preguntaba, se cuanto amabas ir al muelle con mamá- oh diablos, creo que lo invoque- Y estaba pensando, ¿deseas ir este año?- pregunto viéndose de verdad incómodo.

La verdad es que no, la sola idea no me apetecía, no quería deprimirme el día de mi cumpleaños, no aún más.

- No tienes que hacerlo papá, creo que sobreviviré- masculle.

Papá se vio de repente aliviado.

- ¿Que planes tienes hoy? ¿Saldrás con tus amigos?

Hice un mohín.

- No cre....

Mi celular sonó en ese momento, me estire en el asiento y lo tomé del buró, el mensaje era de Jordán.

Mi corazón latió veloz, era el segundo que me hablaba para felicitarme, un lindo detalle, uno que hacia a mi corazón temblar.

Abrí el texto que ponía:

" FELIZ CUMPLEAÑOS CHIQUILLA!!! Hola Erin, este mensaje es en realidad una invitación formal para, bueno, invitarte, a un gran paseo esta tarde.

Si no aceptas explotara, si, es de los que explotan, ¿genial no?

Bien, hasta luego miss Erin."

Sonreí como tonta, ¿por que sonreía?

Ya recuerdo, sonreía por que ese estúpido chico dueño de un pasado misterioso, que me gustaba con todo mi corazón, me había felicitado, y no solo eso, había sido el segundo.

No dije eso en voz alta, imaginemos que jamás lo dije y punto.

Oh demonios, ¡tenía algo que hacer hoy!