Epilogo: It's okey...it's love.

11.2K 723 366
                                    


Un año después.

La puerta se cerro tras papá, tras haberme dicho algunas cosas sobre su trabajo y el nuevo perrito que habían comprado, dijo que necesitaba ir por café, me abrazó y y lo abrace de regreso, levantándome cuanto pude incluso. Se sentía como una despedida, no tengo idea por qué, pero se sentía para siempre, por eso había intentado hacerlo reír y tratar de aligerar el ambiente, seguro que él también sentía que estaba a punto de acabarse.

Es como un radar incrustado, lo sientes en el pecho, diciéndote que esta a punto de suceder algo, algo que se siente como un adiós, y tus familiares también lo sienten.

Es una despedida, supongo que papá necesitaba café porque necesitaba fuerzas, jamás lo había visto tan derrotado, y a pesar de que me partía el alma, sabía que tenía que dejarme ir. Y sería fuerte.

Sabía que estaría bien también, hace un año, justo después de que regrese a Nueva York, ellos se habían casado tres meses después, Karen y papá, me había alegrado y aliviado tanto haber podido ir a su boda. Papá quería que me quedara en casa, y no fuera a Nueva York, después de todo, el pronóstico del doctor había sido menos de un año de vida. Pero me había negado, no podía.

Él debía aprender a vivir sin mi, y quería pasar mis últimos meses libres en Nueva York, como una persona normal, no pensando en el reloj de arena que me seguía a todos lados, cada vez vaciándose mas rápido.

Aunque al final terminé volviendo.

Creo que la peor parte de perder a alguien no es cuando te despides si no cuando comienzas a vivir, dándote cuenta que esa persona no esta mas ahí. Siempre intentando llenar ese vacío hoyo negro que dejó en tu corazón.

Pero él aprendería a ser fuerte.

Porque el era mi superhéroe.

La puerta no tardo tanto cerrada como pensé, alce la vista de mis cada vez mas desgastadas manos, solo para observar a la figura adentrándose en la habitación.

Cerrando la puerta tras él.

- Hola chiquilla- saludó usando aquel estúpido apodo.

Incluso ahora, en mi lecho de muerte, odiaba que me dijera de aquel modo.

- Hola Jordan- saludé sonriendo.

Observé por un momento en sus ojos algo parecido a melancolía, después volvieron a ser amigables.

La última vez que lo había visto, hace un año en Navidad, había sido diferente, ahora parecía que era amigable, aunque sabía que intentaba esconder algo más.

Por ahora, sólo podía ver amistad. Y eso me tranquilizaba.

- No es tu mejor día, ¿eh?- preguntó.

Reí.

- No y eso que hemos tenido días, ¿no?- pregunte.

Sonrió.

- Como olvidarse, hubieron noches en las que solo pensaba "no saldremos de esta"- dijo.

Vino a sentarse en la orilla de la cama y tomo mi mano entre la suya de largos dedos delgados.

Se le veía tan cambiado al Jordan que conocí hace años, había madurado, se le veía en los ojos, en su postura recta, en la sonrisa en su cara, cada cosa me decía que había algo diferente en él, cada pequeño detalle irreconocible para alguien que no lo conocía. Pero yo si que lo hacía.

Se veía más maduro de la última vez que lo vi, hace un año.

No sabía como se entero, supongo que papá le había dicho algunos días atrás, no quería que me fuera con ningún remordimiento y todas esas cosas.

Fall For a Trouble.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora