Mistake ; Jeon Jungkook

26

Lee Soo Yυɴ

Desperté solo porque mi dolor de cabeza era más fuerte que cualquier otra cosa. Se sentía como si en cualquier momento fuese a explotar. Me senté en la cama analizando la habitación en la que estaba. Definitivamente no era la mía. Ahogué un chillido al ver el estado en que me encontraba. Y entonces vagas imágenes de la noche anterior vinieron a mi cabeza.

El lugar junto a mi estaba vacío, miré con extrañeza todo a mi alrededor otra vez buscando siquiera alguna prenda de Jungkook. Nada, no había absolutamente nada de él, por lo que la única opción que me quedaba de encontrar algo, era el baño. Cogí mi ropa vistiéndome rápido, y caminé hasta el baño.

Nada otra vez.

Dios, no podía ser posible. Jungkook no pudo haberme dejado aquí.

Busqué desesperadamente mi móvil en el bolsillo de mi campera, lo tomé tecleando de inmediato su número. Una vez, dos, tres, y ninguna contestó. Quería creer que todo lo que pensaba fuese solo un error, que tal vez tuvo que marcharse para ¿no preocupar a sus padres? No lo sé, solo quería hacerme la idea de que no había sido a propósito, pero eso confirme después, cuando envié una cantidad de mensajes que solo fueron leídos.

Lo maldije un millón de veces e insulté otro millón a través de mensajes.

Jungkook solo había querido acostarse conmigo. Por eso su repentino cambio al pedirme ser su novia. Por esa razón no quería contarle a Jihyun sobre nosotros.

¡Dios ¿Qué nosotros?!

Ni siquiera había uno.

Lo peor es que el idiota no solo me había utilizado, sino que me había dejado en un lugar que ni siquiera conocía, rodeada de chicos ebrios, de personas iguales a él. Me había desechado igual que a una prostituta.

El móvil en mis manos comenzó a sonar, rápido sequé mis mejillas y conteste.

—¿Diga?

—¿Como que diga, Sooyun? No has llegado a casa, nos tienes preocupados —era mamá— ¿Donde estás?

—Uh, Jihyun se embriagó ayer, y tuvimos que llevarla a casa, me quedé a dormir aquí, lamento no avisar, estaba cansada y lo olvidé —no sé como le había hecho para inventar todo eso en un segundo.

—Ven a casa pronto ¿si?

—Si, ya iba en camino —mentí.

Ella cortó la llamada, cerré mis párpados con fuerza dejando escapar un pesado suspiro.

Esperaba que al llegar allá ellos no preguntaran más. Esperaba también que Jungkook se pudriera donde sea que esté.

Cuando estuve frente a mi casa, otro suspiro salió de mis labios, me aseguré de no dejar ningún rastro de lágrimas en mis mejillas antes de golpear a la puerta.

—¿Donde estabas? —preguntó, Byeol cuando me vio.

—Ya le dije a mamá, dormí en casa de Jihyun —respondí, intentando sonar normal— Tu... ¿No fuiste a la fiesta?

—No, junto a unos compañeros preferimos ir a un lugar más tranquilo.

—Ya veo.

Mamá llegó corriendo a la entrada regañándome al instante por hacerla preocupar. Me dijo que no volviera a hacerlo y muchas cosas más. Yo solo podía pensar en lo que realmente había sucedido, sintiendo unas enormes ganas de llorar, que por ellos preferí resistir.