Capítulo 4: ¿El viaje sin retorno?

17.3K 1.2K 1.6K
                                    


Después de haber tomado su decisión inició a preparase. Podría salir de viaje solo con lo que tenía puesto, pero al tener un cachorro era algo diferente. En una caja empezó a meter algunas prendas de su bebé. Sacó de entre lo más profundo de sus pertenencias un saquito lleno de monedas. Contó el dinero, calculando si era más que suficiente para lo que tenía pensando.

El "ma...hmma..." que su bebé emitía llamaron su atención, así que acarició su mejilla con amor. Le arrulló suavemente, mientras intentaba relajarlo, pero el niño solo comenzó a palmar su mejilla y luego a alzar ambas manos en dirección a sus mechones sueltos, jalándoselos con fuerza.

—No lo pareces, pero eres muy travieso. —Sonrío.

El pequeño se removió más nervioso de lo usual. Nuevamente le llamaba, quería seguir observándole. En la última semana lloraba si no le veía mucho tiempo. Había aprendido a balbucear sus "ma...ma" y a moverse más sobre sí mismo.

—Quizás... ¿te estoy transmitiendo mi inquietud? Lo siento, pequeño, no te preocupes. Si papa se desquita no va a ser contigo sino con mi pobre cintura. —Bromeó.

Lo puso en la cama de barriga. El niño ya levantaba su cabeza y alzaba su bracito hacia él. Tomó uno de los muñecos de tela que había comprado y se lo dio para que se distraiga mientras terminaba de empacar. En todo momento, mientras babeaba el muñeco, le estuvo observando con atención.

Al finalizar, llamó a Lan SiZhui para pedirle ayuda.

El joven ingresó con esa suave expresión suya, pero cuando vio que había una caja de viaje abrió los ojos sorprendido.

—Maestro Wei ¿acaso usted...?

—Por favor, no me cuestiones.

—Pero, pero, pero...

El niño estaba totalmente sorprendido y preocupado. Se había quedado estático, con los ojos muy abiertos, sin procesar una adecuada explicación ante lo que veía, sobre todo porque recordaba que aparentemente sus padres habían tenido una pelea la última noche estuvieron juntos en el Receso de las Nubes.

—Ayúdame poniendo esto encima de manzanita, por favor, A-Yuan.

Wei Ying sabía que el joven siempre se emocionaba cuando le llamaba de esa manera. Así que el menor simplemente asintió tomando la caja. Mientras Wei Ying abandonó la habitación con el bebe bien envuelto, el cual no había querido dormir.

Su largo cabello se balanceaba casi libre al ritmo de su movimiento. Los otros estudiantes comenzaron a murmurar. Uno de ellos salió disparado buscando a un superior.

—Sizhui ¿Qué está sucediendo, señor Wei? ¿Usted ha pedido permiso a HanGuang-Jun para ir a buscarle?—Interrumpió Lan Jingyi.

— ¿Quién dice que voy por él?

Al igual que Lan Jinygi, A-Yuan había esperado que el esposo de su maestro simplemente se cansase de esperar, por lo que se encaprichó en ir a buscarlo. No que de verdad se cumpliese un temor profundo sobre separación. ¡Ellos se amaban tanto! ¡¿Cómo podrían separarse?!

— ¡Tú no puedes salir de aquí! ¡Menos con mi nieto-sobrino en brazos!—Interrumpió una voz grave y molesta.

La voz de Lan Quiren resonó, haciendo que los otros estudiantes se apartasen en automático.

—Le estoy cumpliendo uno de sus sueños, tío. —El joven omega moldeó su voz a uno fresco y sin titubeos, casi con una pizca de burla. — Voy a abandonar a su sobrino.

PEQUEÑO MAESTRO LAN (Hiatus Indefinido) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora