¡Esto es guerra! © #2 [BORRADOR]

70. "Mejores hermanos que tus propios hermanos."

AVISO: Estoy terminando de escribir la historia, me falta poco. Cuando ya la tenga terminada, voy a publicar tres por semana o diariamente. LA VOY A ESTAR PUBLICANDO ANTES O EN MARZO (yo aviso todo por mis historias en Instagram)

@DelfiLovee, siempre subo boludeces y cosas importantes como estas.

Dedicado a weimania, DesireeSangster, Liaba06, EmyHobbit, SoyRaizavas, badAnonymousbcm, abichuelita_13, JuliHerrera2 ♡

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En el capítulo anterior:

{—No me aprovecho de que es el enemigo, él se ofreció —me excusé recibiendo un bufido de su parte.

—Te dije que seas amable.

—Todavía no le dije nad... —el morocho apareció en nuestro campo de visión, extendiéndome el helado que me había comprado. Sonreí como Cheshire comiendo con rapidez el manjar, frené unos segundos, encontrándome con Luke mirando con asco y Josh con diversión—. Muchas gracias.}

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Capítulo setenta

"Mejores hermanos que tus propios hermanos."

Al final, la cita no-cita oficial con Luke Mitchell y su novio, el Sigma, Joshua, había ido bastante bien.

Según me habían contado, se conocieron en una fiesta de la fraternidad del morocho, en la que Luke, había ido de forma encubierta para averiguar cómo era la casa Sigma por dentro, y así saber cómo hacerles la conocida broma en la cual los Delta se nos habían adelantado cuando nos reencontramos.

Luke no pudo indagar mucho en la casa porque había quedado embobado con un morocho que estaba en una competencia de chupitos con un pelirrojo de Sigma.

Josh ganó la competencia sin emborracharse y se acercó a Luke para hablar. No duró mucho ya que la policía apareció en la residencia y el señor Water se encargó de sacar a todos los Sigma de la casa. El morocho y el rubio se fueron a un parque antes de que los atrapen, se besaron y quedaron en volver a verse.

Así fue, se vieron una vez, dos veces, tres, cuatro y muchas más. Los Delta les hicieron la broma a los Sigma, Luke decidió hacérsela a Josh, él lo atrapó y el rubio le hizo jurar no decirles nada a los de Palo Alto de que ellos habían sido los responsables de semejante acto. El morocho se lo juro con un beso a cambio de una oportunidad y, justo antes de que Luke le diera el sí, todos los de la casa salieron de la misma a los gritos.

Luego, el maravilloso encuentro de algunos de los Sigma, los Delta y los Alpha arruinó la ocasión. Se volvieron a ver, Luke le dio una chance y hasta ahí llegábamos con la historia.

Hipotéticamente, el pacto de confianza era contarse todo el uno al otro.

Y ese era el motivo por el cual contarse todas las cosas innecesarias.

Con innecesario hablábamos, explícitamente, sobre mí.

Me tiré en la cama dispuesta a dormir, pero mi estómago rugió con fuerza. Bufé observando el reloj en la mesa, eran alrededor de las nueve de la noche. Me paré del paraíso y me saqué las botas, procedí a desatar el nudo que tenía la cinta en mi cintura junto a las tiras en mi pecho. Fui deslizando el vestido por mis hombros hasta bajar por mis caderas, cayó al suelo y lo revoleé hacia el tacho de ropa sucia del baño. En ese instante, la puerta de la habitación se abrió con rapidez dejando ver a un pecoso de cabello claro en la misma. Solté un grito tironeando de las sábanas, con las cuales me cubrí las partes más esenciales de mi cuerpo.