Capítulo 11

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21 de octubre de 1982 - New York.   

La enfermería donde  se despertó era completamente diferente a la de la Mansión. Esta era de un color más oscuro y habían aparatos rodeandola que cumplian las funciones que los mutantes llevaban a cabo en la escula.

Los recuerdos la invadieron y soltó un gemido de dolor al tratar de incorporarse. Llevó sus manos a su cara para mitigar el malestar que la luz le probocaba.

-Será mejor que no te muevas- escuchó a alguien a su derecha.

Con un poco de consentracción pudo desviar sus poderes para eliminarse el dolor que sentía. De su cuerpo empezaron a desaparecer los pequeños moretones que había conseguido y los pesares se terminaron. Se sentó en la que al parecer esa su camilla y se frotó los ojos mientras bostezaba.

-Buscaré al Profesor, trata de no esforzarte. 

Rogue asintió. Estiró las manos y se miró sus palmas. Su mente estaba desordenada y eso solo probocaba caos. Observó como sus dedos empezaban a variar en distintos colores y luces que demostraban su poco control sobre sus poderes en esos momento.

Las personas con las que Rogue trataba solían decirle, cuando era muy pequeña, que sus poderes eran especiales incluso entre los mutantes. Ella asentía y sonreía, pero en el fondo fruncía el ceño y negaba con la cabeza. En la adolscencia creyó que el dominio sobre su mutanción llegaría. Pero lo sierto es que, la chica, tenía unos poderes muy peculiares que jamás podría controlar. 

Apretó los ojos y pegó sus brazos al pecho mientras sollozaba del dolor que las variaciones de energía le causaban al pelear por su atención.





-Despertó.

Los X-MEN y Vengadores reúnidos en la sala común del complejo corrieron hacia el piso de abajo al oír la declaración de Cíclope. 

Por las  ventanas de la habitación se colaba una curiosa alternación de luces que provenían del interior. La puerta fue azotada por Ángel, que fue el primero en ingresar.

La escena descolocó a los miembros de los Vengadores y no comprendieron que era lo que ocurría. Las miradas se fueron hacia el hombre en silla de ruedas que negó con la cabeza a la pregunta muda.

-Es un ataque de Ansidad, no puedo entrar en su cabeza. No me lo permite.

Emma dijo algo con los dientes apretados y luego fue hasta la chica. Los rayos luminosos no le hicieron el suficiente daño como para impedir que llegara hasta ella. La tomó en sus brazos y la sentó en su regazo mientras la apretaba contra sí misma, acarició su cabello y comenzó a susurrarle cosas en el oído que los demás no alcanzaron a oír.

La chica pareció reaccionar porque al poco tiempo dejó de temblar y el caos paró. Comenzó asentir a lo que Frost le decía y contestaba algunas cosas de vez en cuando. 

Cuando estuvo completamente calmada, la Renia Blanca la depositó de nuevo en la camilla teniendo cuidado de no tocarla.

-¿Te encuentras mejor?- Cíclope se acercó a ella.

Rogue asintió y dirigió su mirada a quien la había tranquilizado mientras sonreía. Se alivió al ver que Emma vestía mangas largas y pantalón, eso significaba que no la había lastimado. 

-¿Alguien puede explicarnos al resto que fue lo que pasó?- Tony interrumpió.

-Siempre a sufrido ataques de Ansiedad, algo así como desde los quince años...- le explicó Ángel que le servía un vaso de agua a su amiga.

-¿Y nunca la han tratado?- preguntó Bruce.

-Es intratable- la voz de Rogue salió entrecortada-, es parte de mi mutación.

-No entiendo- Banner se acomodó los lentes-, no hay síntomas secundarios de esa clase que vengan con una mutación. Eso según mis estudios.

-Nunca la estudiaste a ella- le recordó Hank mientras cubría a la chica con otra manta.

El hombre con problemas de furia se sonrojó levemente pero asintió.

-Luego de que nos pateara el trasero, no quisiste saber nada de ella- se burló IroMan.

-En los momentos que yo realicé mi estudio de mutantes, ya no te encontrabas en la Mansión, Rogue.

Ella asintió.

-Mis poderes son de naciemto, como todos los mutantes. Pero no son controlables. Se lo explico, Doctor. Mi mente esta llena de colores. Distintas tonalidades y formas, cada configuración es única, porque pertenece a un mutante único. Ningún poder se repite, algunos son parecidos pero todos son exclusivos. Cada vez que toco a un mutante o a una persona, agrego una nueva composición en mi memoria que me permite utilizarla cuando quiera. Bueno, eso desde hace unos años, porque antes era incapaz de recordarlos y salían en orden de más recientes.  Aquí adentro- señaló su cabeza-, nunca hay paz, porque las personalidas y vidas de las personas que toco también se queda. Ni siquiera recuerdo si alguna vez estuvo libre. 

-¿No desechas nada?

-Nunca. Cuando quiero utilizar algún poder, mi mente se convierte en algo así como un reproductor de música. Selecciono solo el poder que quiero en ese momento*.

-Entonces sí sabes controlarlo- objetó el científico.

Negó con la cabeza.

-El problema es que todas esa configuraciones entran en mi mente como si fueran personas con vida propia. Todas quieren atención al mismo tiempo y puedo controlarlas, pero al tocar a alguien siguen entrando más y más que buscan ser "llamadas".

-¿Y Apocalipsis?- Kitty indagó.

-Es un ser demasiado poderoso. Su mente se trasladó a la mía y por un momento él fue yo. No pude controlarlo porque es muy fuerte. Nadie es capaz de vencerlo. Lo vi todo, Apocalipsis fue el primer mutante y también quiere ser el último.

-¿Qué hay de su visión de paz y poder mutante?

-Es todo mentira, Profesor. Esta construyendo una máquina similar a aquella que Magneto utilizó en mí. Quiere todos los poderes de todos los mutantes. Solo desea poder. 

-Pero él no...

-Creo que Erick está con Apocalipsis- se lamentó Rogue.

La cara de Charles se vió decaída, pero asintió.

-Debemos de contactar con más mutantes, ahora mismo ya debe de tener a varios bajo su poder.

-Wolverine y Gambito se fueron con él.

La chica cerró los ojos y asintió mientras dos lágrimas se resbalaban por sus mejillas.

-Lo sé. Lo vi todo.

El silencio que se formó fue roto por Xavier.

-Los salvaremos. Pero, como has dicho, necesitamos a más mutantes. LLamaré a la Mansión, sin embargo, considero que es hora de llamar a tus amigos. 





*: Esto es una descripción del poder de Rogue que leí en una historia hace muchos años y relamente no recuerdo como se llama, pero todos los creditos al o la escritora. 

X-MEN: Intocable {Terminada}Where stories live. Discover now