Capítulo 30 (parte 1)

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Llegaron corriendo al despacho de Marcelo e ingresaron para encontrar que Lourdes estaba arrodillada al lado de él y lo sostenía contra su pecho. Levantó la vista para mirarlos y vieron las lágrimas que corrían por sus mejillas. El corazón de Ángela dejo de latir. Su padre no podía estar muerto, claro que no.

—¡Llamen al doctor Henry! —exclamó Agustín y se acercó hasta ellos para alzar a Marcelo en brazos.

Con una facilidad que sorprendió a la morena salió de allí y comenzó a subir las escaleras, como si su padre no pesara nada. Ella simplemente no podía reaccionar, estaba totalmente ida.

—¿Qué estas esperando? —le preguntó Renato —¡Sube con ellos!

Asintió tontamente y subió corriendo detrás de los pasos de Agustín. Llegó a la habitación de su padre y vio como Agus lo acomodaba sobre la cama. Se acercó hasta ellos.

—Papá —lo llamó y se arrodilló a su lado —Por favor, papito, despierta...

Marcelo no reaccionó. Entonces los ojos de Ángela soltaron las lágrimas que había estado acumulando durante todo el camino. Su padre lo era todo para ella. Y si él... se iba ella... ella no iba a soportarlo.

—Tranquila, Ángela —le dijo Agus y acarició su hombro. Ella siguió con la mirada fija en su padre —Le tomé el pulso, está vivo... solo está inconciente.

Ella se giró a verlo.

—Me muero si le pasa algo —dijo con la voz quebrada.

Agustín se arrodilló a su lado, la tomó del rostro y la acercó a él para acurrucarla contra su pecho. Ella se echó a llorar a conciencia y se apretó más contra él.

—Nada va a pasarle, te lo prometo...

Alguien entró al cuarto. Era Lourdes. Ellos la miraron y se pusieron de pie. Ella se acercó hasta la cama y se sentó al lado de Marcelo. Estaba pálida y el cuerpo le temblaba.

—Ya viene el médico —dijo apenas audible.

—Mamá, todo va a estar bien – la calmó él.

Ella simplemente asintió y miró a Marcelo. Había ido a buscarlo a su despacho para decirle que si... que se quería casar con él y compartir el resto de los años que le quedaban... juntos. Y lo había encontrado tirado en el suelo, inmóvil, con los ojos cerrados. Su mundo se había venido abajo. Ella simplemente iba a morir si al amor de su vida le pasaba algo... Él creía que ella ya no lo amaba, cosa que no era cierta. Lo miró y levantó su mano para acariciar su rostro. Siempre iba a amarlo, no importaba el daño, el dolor, los años... Marcelo Torres era la otra mitad de su alma.

Renato entró corriendo al cuarto, todos se giraron a verlo.

—Llegó el doctor —avisó.

Ángela salió rápidamente de la habitación y vio al hombre bastante mayor que terminaba de subir con algo de dificultad las escaleras. Tardó un poco en reconocerlo, pero lo hizo. Ese era el doctor que los atendía a ellos cuando ella aun vivía allí. Por Dios ese hombre todavía estaba vivo... debía tener cómo más de 100 años.

Sacudió la cabeza y se acercó hasta él.

—Por aquí está mi padre, doctor —le indicó. El hombre la miró sobre sus anteojos y asintió con la cabeza. La siguió en silencio en ingresó al cuarto. Ángela iba a entrar, pero él la detuvo.

—Necesito estar solo —le dijo con voz rasposa. Ella asintió. Y se quedó parada en la puerta. Apoyó la frente contra esta, y suspiró.

—Ven, Lourdes —dijo Tato —Vamos abajo... voy a hacerte un té de tilo así te calmas un poco... Marcelito va a estar bien.

—Vamos, vamos —susurró ella.

Agustín vio como ellos dos desaparecían por las escaleras. Giró y observó a Ángela apoyada contra la puerta, dándole la espalda. Se le encogió el corazón. Saber que ella estaba mal lo angustiaba. Se acercó un poco...

—Tengo miedo —escuchó que ella murmuraba.

—Ven aquí, Ánge —le dijo.

Ella giró para mirarlo. Y sin dudarlo dos veces casi corrió hacia él y se metió entre sus fuertes brazos. Aquel único aroma a campo, sol, hombre y algo dulce la invadió. Era el aroma de Agustín. Aroma que la calmaba, que la abrumaba.

Él la abrazó con firmeza, haciéndole escuchar los latidos rápidos de su corazón.

—¿De verdad crees que él va a estar bien? —preguntó ella contra su pecho. 

Holaa,les traigo la primera parte del capítulo número 30, creo que llegó el momento de avisar que estamos a muy poco de terminar esta novela, así que por día se subirá un capítulo, espero que les haya gustado ésta parte y nos vemos en la próxima (que se subirá a continuación).

Wild Horses-Adaptada-Angestín.Where stories live. Discover now