LA DESICIÒN DE KION

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Simba, Nala, Kiara, y todos aquellos animales que querían ayudar estaban en el filo de un precipicio. La meta de alcanzar a los cachorros, y de regresar a casa pendía de un hilo. O mejor dicho, de una decisión y un gran trabajo en equipo. Fuli pelea junto a Hikari con todas sus fuerzas en contra de Nattu.

La manda de Hikari, el príncipe de los chitas, estaban logrando contrarrestar la acechanza de las hienas. Sin embargo, ante ello, Nattu era quien más poder tenía. Y de quien, no con facilidad podrían combatir.

(AKANNI)

– kion... ¿estás seguro? ¡Nattu de inmediato se dará cuenta de lo que tratas de hacer!

(KION)

– será la única forma de acabar con el ser que vive dentro de él. Rafiki... ¿dijiste que Nattu estaba siendo controlado cierto?

Rafiki asiente de inmediato. Y rápidamente interviene Makini.

(MAKINI)

– pero eso significa que... tu... –dice preocupada.

(KION)

– No te preocupes Makini –sonríe –, desde el principio supe el precio que contraía esto. Además... mi abuelo –mira al cielo –, quiso... decirme algo de mucha importancia antes de que llegara con Nattu. Hasta ahora... me doy cuenta de que todo esto, siempre paso... porque, de algún afirma, existe algo que nos está poniendo a prueba. Por ahora... parece difusa esa respuesta, pero, mientras lo averiguamos, quiero pelear. Además... encontrar a mi hermano, volver a mi hogar asido mi lucha. Será mejor terminarlo de una vez por todas.

(AKANNI)

– Entonces... lucharemos juntos kion –dice con seriedad –, tu... eres mi hermano. De sangre... y desde el corazón.

Kion sonríe viendo con dulzura el gesto de kopa.

(BEHSTE)

– solo dinos que hacer kion –dice –, y considéralo hecho. Fuli, y Hikari no mantendrán a Nattu ocupado demasiado tiempo.

(KION)

– Entonces... este será lo que haremos –se acerca.

Tan rápido como kion pide que lo escuchen, la guardia, rafiki, y aquellos animales que los habían seguido escuchaban con atención. La lluvia azotaba con fiereza, y la tierra parecía retumbar.

(NATTU)

– Oh... pequeña chita –ríe –, ¿de verdad crees que con esto tú y los tuyos saldrán libres? ¡Kion... terminara rindiéndose! ¡He visto lo que más teme! Y no hay nada... que puedas hacer.

(FULI)

– Parece como si no lo conocieras –sonríe tratando de golpearlo con más fuerza –, kion.... nunca se rendirá, jamás se ha rendido. Y mucho menos con alguien como tú –gruñe –, ¡tú deberías rendirte!

(HIKARI)

– deberías rendirte ahora –le ordena a su manada rodear a las hienas y a Nattu –, porque te juro, que si no logramos hacer que tú mismo desistas. No dudare es asesinarte yo mismo.

La mirada d Nattu se clava en ambos chitas decididas. Sine embargo, el dolor, y el miedo estaban alejados de sí mismo. Lo único que sentía, era el deseo de asesinarlos, y de acabar con ellos. Dentro de él, aquel león llamado Nattu, estaba desapareciendo. Haciendo lucir, lo más oscuro de aquel ser. Siendo abominado por scar, el león que se había adueñado de su cuerpo.

(NATTU)

– pero si yo... aún no he terminado de jugar –ríe, pero en cuanto lo hace, de su sombra, salen seres en forma de leones de pelaje oscuro. Ojos como dos hoyos vacíos, y miradas tan penetrantes y sin brillo alguno.

EL SECRETO DE LAS PRADERASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora